Pésame a los que están aterrorizados porque se les cierra la gran ubre del socialismo andaluz

Doy el pésame también, aunque con alegría indisimulada, a los miles de funcionarios enchufados y contratados a dedo por los socialistas, de manera ilícita y corrupta, que no han tenido tiempo de consolidar sus puestos y que ahora corren el riesgo de ser expulsados.

Mi pésame para los numerosos empresarios sumisos y habituados a doblar la espalda ante los socialistas, que han creado empresas sin músculo ni capacidad de competir libremente en los mercados, cuya prosperidad se debe exclusivamente a las ayudas, subvenciones y contratos otorgados por los socialistas. Su futuro es negro porque sus empresas, acostumbradas al dinero fácil, no son capaces de sobrevivir en los mercados libres y competitivos.

Pésame solidario para los miles de periodistas sometidos al poder que, tras haber abandonado el deber de difundir la verdad y ser fieles a la alianza con la democracia y los ciudadanos, decidieron un día ponerse al servicio del socialismo gobernante, obteniendo a cambio privilegios, dinero y una vida fácil que ahora está en peligro. El pésame también incluye a los medios sometidos y a miles de periodistas que, sin haber obtenido puestos en los espacios controlados por el poder, se sometían voluntariamente a las mentiras y al aparato de propaganda con la esperanza de ser un día recompensados.

Mi más indignado pésame a los corruptos profesionales que desde dentro y fuera de la Junta se ganaban la vida realizando chanchullos y arbitrariedades, moviendo expedientes, priorizando cobros, mediando para obtener concursos y subvenciones, toda una fauna repugnante que ahora se queda con el trasero al aire porque sus "amos" pierden el control del poder y del dinero público.

Mi pésame más feliz a los muchos directivos sin valor ni mérito que alcanzaron altos puestos de responsabilidad sólo porque eran amigos del poder, desempeñándose como directores de empresas públicas, miembros de consejos en empresas sometidas, enchufados en chiringuitos del poder, miembros de cátedras y departamentos universitarios, etc., pobre gente que ahora, sin el apoyo directo del poder, tendrán que comprobar lo difícil que es alcanzar las alturas, por méritos propios, en el mundo libre y competitivo, donde el único valor es el mérito.

Pésame a los dueños de puticlubs, restaurantes de lujo, agencias de viajes y demás empresas proveedoras de la Junta, familiares y amigos del poder y a toda esa fauna amplia, inepta y descarada que ha vivido de la corrupción y de los negocios sucios fáciles, amparados por el poder gobernante.

A las legiones de alcaldes, diputados, concejales, miembros de cooperativas y demás adjuntos al poder socialista, activistas claves de la red clientelar, cuya principal misión ha sido, durante décadas, mantener vivo el poder socialista y lograr que sea temido por las masas, sobre todo por la gente más humilde y necesitada de las zonas rurales, obligadas a votar socialista para conservar sus puestos de trabajo y pequeños privilegios.

Acompaño en su dolor, pero sintiendo profunda satisfacción porque la justicia y la verdad ocupan los espacios antes controlados por el miedo y la mafia, al resto de la enorme fauna adscrita al poder socialista: policías elevados a cargos de responsabilidad, jueces ciegos y sordos promocionados por el poder, despachos de abogados dedicados a defender a chorizos y a otros especímenes delictivos, medios de comunicación subvencionados y beneficiados con contratos publicitarios, esclavos de todos los tipos y pelajes, ante los que ahora se alza la incertidumbre del cambio de régimen y viven sumidos en el desasosiego y el miedo porque ven con terror que la gran teta del Estado se les escapa.

Francisco Rubiales