Cuando eran invadidos por el inmenso ejército persa de Jerjes, el oráculo de Delfos dijo a los griegos “buscad refugio en la ciudad (o en el muro) de madera”. Temístocles interpretó que el muro de madera se refería a la flota griega, que reforzó enormemente, gracias a la cual ganó la crucial batalla de Salamina que inclinó la guerra a favor de Grecia.
El griego Themístocles alzó contra los persas un "Muro de Madera" y los derrotó en Salamina. El muro consistía en una flota moderna y bien adestrada, que pudo derrotar a la flota persa, superior en número, en la bahía de Salamina.
Del mismo modo, el "Muro de la Verdad" de los demócratas españoles podrá derrotar al océano de mentiras, engaños, estafas y silencios que el gobierno de Sánchez ha construido para ejercer su dominio sobre la libertad y la decencia.
Ser demócrata hoy en España obliga a convertirse en periodista amateur y propagar verdades y denuncias en las redes sociales para contrarrestar las mentiras y oscuridades del poder.
Hay que hacer preguntas que molestan y pongan de los nervios a Sánchez y a sus tribus de enemigos de la libertad y de España: ¿Dónde están las maletas que trajeron los venezolanos corruptos de Maduro y que escondió el ex ministro Ábalos? ¿Por qué Griñán no ha ingresado en prisión cuando hay en las cárceles cientos de presos padeciendo procesos cancerosos y tratándose tras las rejas? ¿Por qué habéis eliminado el delito de sedición y suavizado las penas por malversación, cuando esa reforma favorece a golpistas enemigos de España y a corruptos? ¿Por qué habéis indultado a golpistas enemigos de España y encarceláis a quien roba un jamón porque su familia tiene hambre? ¿Qué se oculta detrás de la sucia y sorprendente decisión de abandonar a los saharauis y apoyar a Marruecos en su piratería sobre el Sahara Occidental? ¿Por qué hostigáis a las empresas, cuando ellas son las únicas creadoras de empleo y riqueza? ¿Por qué sois tan despilfarradores, no practicáis la austeridad y os negáis a ahorrar desde el monstruoso Estado que habéis construido? ¿Por qué tenéis tanto interés en controlar la Justicia, cuando ese poder tiene que ser libre e independiente en democracia? ¿No os da vergüenza beneficiar a las autonomías rebeldes y desleales, como Cataluña y Vascongadas, perjudicando a las que son leales y cumplidoras? ...
Y mil preguntas más, todas sin respuesta, sobre una forma de gobernar dañina y destructiva que está hundiendo nuestra nación.
Francisco Rubiales
El griego Themístocles alzó contra los persas un "Muro de Madera" y los derrotó en Salamina. El muro consistía en una flota moderna y bien adestrada, que pudo derrotar a la flota persa, superior en número, en la bahía de Salamina.
Del mismo modo, el "Muro de la Verdad" de los demócratas españoles podrá derrotar al océano de mentiras, engaños, estafas y silencios que el gobierno de Sánchez ha construido para ejercer su dominio sobre la libertad y la decencia.
Ser demócrata hoy en España obliga a convertirse en periodista amateur y propagar verdades y denuncias en las redes sociales para contrarrestar las mentiras y oscuridades del poder.
Hay que hacer preguntas que molestan y pongan de los nervios a Sánchez y a sus tribus de enemigos de la libertad y de España: ¿Dónde están las maletas que trajeron los venezolanos corruptos de Maduro y que escondió el ex ministro Ábalos? ¿Por qué Griñán no ha ingresado en prisión cuando hay en las cárceles cientos de presos padeciendo procesos cancerosos y tratándose tras las rejas? ¿Por qué habéis eliminado el delito de sedición y suavizado las penas por malversación, cuando esa reforma favorece a golpistas enemigos de España y a corruptos? ¿Por qué habéis indultado a golpistas enemigos de España y encarceláis a quien roba un jamón porque su familia tiene hambre? ¿Qué se oculta detrás de la sucia y sorprendente decisión de abandonar a los saharauis y apoyar a Marruecos en su piratería sobre el Sahara Occidental? ¿Por qué hostigáis a las empresas, cuando ellas son las únicas creadoras de empleo y riqueza? ¿Por qué sois tan despilfarradores, no practicáis la austeridad y os negáis a ahorrar desde el monstruoso Estado que habéis construido? ¿Por qué tenéis tanto interés en controlar la Justicia, cuando ese poder tiene que ser libre e independiente en democracia? ¿No os da vergüenza beneficiar a las autonomías rebeldes y desleales, como Cataluña y Vascongadas, perjudicando a las que son leales y cumplidoras? ...
Y mil preguntas más, todas sin respuesta, sobre una forma de gobernar dañina y destructiva que está hundiendo nuestra nación.
Francisco Rubiales
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