Los viejos políticos "ladrones de impuestos" no tienen futuro

Sin duda que los impuestos son son exagerados que los políticos tienen que reducirlos a menos que quieran un estallido social, que en España está muy cercano y faltaŕia una chispa para que se produzca.

Creo que estamos llegando a la conclusión que gran parte de lo que nos esquilman va a mantener a la casta y cunado te sobra el dinero, no miras demasiado, pero cuando te falta, la cosa cambia.

Seguramente en el resto del mundo han llegado a la misma conclusión y están votando a políticos que prometen menos impuestos. Pero la cosa no está tan clara. Los useños lo tienen fácil, se bajan los impuestos y se aumenta la deuda, con lo que las cuentas cuadran. No sé en Francia hasta qué punto se pueden bajar los impuestos, dado el estado de bienestar tan enorme que tienen. Y en el Reino Unido, que ganen los laboristas supone un aumento de impuestos.

Y mientras el terrorismo campando a sus anchas, sin que ningún gobierno tome las más elementales medidas, que los ciudadanos conocemos pero que al parecer, la casta ignora.

Sin embargo me temo que todo este ambiente no va a suponer una bajada de impuestos, al menos una bajada sustancial, porque aquí todos los años dicen que nos bajan los impuestos y cada vez pagamos más. Lo que me temo es una de tantas jugadas que nos hacen sin que nos enteremos, para avanzar en el gobierno mundial.

Y no olvidemos que esto es como un espectáculo de magia, todos miramos a una mano del mago, mientras con la otra, hace el truco. El objetivo final es el gobierno mundial. Las resistencias son enormes, pero se las van apañando para avanzar de forma más o menos lenta, pero segura, en ese objetivo.

Por ejemplo. No sabemos cuales son las intenciones de Trump, porque en le plano internacional, en especial en la cuestión bélica, sigue puntualmente la política de Obama pero en el interior, sigue una política contraria, tan contraria, que sólo por eso ya merece estar en el cargo.

Creo que el principal problema de Europa es el terrorismo, islamista en concreto y vemos con estupor que todo lo que se hace tiende a favorecerlo. En el último atentado de Londres, la policía ha demostrado tal grado de incompetencia que no se lo puede creer nadie. El gobierno confiesa que hay 23 000 islamistas en el país y no hace nada. En Europa los barrios musulmanes ya están fuera de las leyes de cada país y los gobiernos miran para otro lado, es más, con el asunto de los refugiados se llegó a la situación más contradictoria que se pueda imaginar.

Las leyes de "género" avanzan imparables en todo el mundo. Y en general observamos que las sociedades occidentales se descomponen a ojos vistas. Que algunos gobiernos reduzcan un poco la presión fiscal suena más bien a evitar que la gente proteste, más que a un deseo de beneficiar a los ciudadanos.

En los USA Trump ha iniciado un tímido rearme moral, lo cual está muy bien, aunque en los aspectos más visibles siga como siempre, al borde de la guerra, tal vez para mantener al país en tensión y evitar que se descubra que ya no es la superpotencia. Pero en Europa se sigue profundizando en la destrucción de la sociedad y las elecciones no consiguen cambiar la tendencia. Si con los conservadores el país va mal, con la llegada de los laboristas, la cosa se les va a poner peor.

El brexit fue una jugada orientada a desviar la economía de Europa a los USA y Canadá, pero mientras la situación trasatlántica se ha deteriorado, de forma que los nuevos negocios no van a compensar a los antiguos y si encima ganan los laboristas, con sus políticas socialdemócratas, el país puede verse en dificultades. Aunque tal vez sea ese el objetivo.

Aquí la noticia de ayer, oculta entre otras, fue el robo del banco Popular, porque sin duda ha sido un robo. Lo que no queda claro es quienes son los culpables. Seguramente, como viene ocurriendo en estos casos haya una mezcla de inocencia, estupidez y mala idea por parte de una serie de personas que van a ganar unas buenas cantidades aunque su intención no fuera hundir el banco. Lo hemos visto por ejemplo, con Banesto.

Y volviendo al titular, me suena que la situación, como siempre, toma tintes gatopardianos, todo debe cambiar, para que todo permanezca. Los viejos políticos desaparecen y viene los nuevos que son peores.

Ya se sabe que todo no sólo es susceptible de empeorar, es que en realidad siempre empeora.

LOS POLÍTICOS INDECENTES Y LADRONES, TIENEN LOS DÍAS CONTADOS.

Efectivamente, los viejos políticos, “ladrones de impuestos, mangantes de guantes blancos, arrogantes y atiborrados de privilegios, no tienen futuro”.

Y no tienen futuro, porque las estadísticas y las encuestas a pesar de los márgenes de errores, dictaminan veredictos que condenan a la vieja política, y a sus protagonistas. Las evidencias no pueden ser más irrefutables. Los tradicionales y viejos partidos socialistas radicales y socialdemócratas en toda Europa, vienen siendo una mínima representación, incluida su desaparición. En Grecia, Holanda, Francia y otros muchos países, han sido liquidados por sus mismos seguidores. Al igual que los partidos de la derecha más rancia, casposa y reaccionaria.

La nueva política consiste, en devolver a los ciudadanos los protagonismos que en derecho les corresponden, potenciando la sociedad civil, y participando en todos los órganos de decisión como únicos y exclusivos dueños y soberanos de la nación y del Estado. Los viejos, tradicionales y hegemónicos partidos políticos infectados de corrupción, de ninguna manera ni en modo alguno pueden seguir siendo, correa de transmisión entre los poderes y los ciudadanos.

Desgraciadamente en España, todavía no ha llegado la nueva política y políticos con decencia, capaces de hacer evolucionar y mejorar la sociedad, en civismo, libertades democráticas, derechos, deberes, obligaciones, educación, y bienestar social, exentos de utopías y demagogias irrealizables. Mientras en otros países más avanzados en derechos y libertades democráticas, eligen a nuevos partidos regeneradores con dirigentes políticos coherentes, justos y ecuánimes, en España seguimos apoyando y votando a partidos tradicionales y lo que es mucho más deleznable, a los mismos partidos y personajes, corruptos y corruptores, ladrones, chorizos y miserables sin ningún rubor.

Los ciudadanos hastiados y asqueados de la vieja política y de sus perversos políticos, están reaccionando con determinación y actitudes serias y responsables, en muchos países, a lo que se ha denominado el “Estableshiment”, y contra los sistemas políticos instalados, en las, injusticias, desigualdades, privilegios, abusos y latrocinios. Lo queramos aceptar o no, la política está cambiando a mejor en muchos países del mundo, porque existen ciudadanos decentes y comprometidos, que no renuncian a principios, valores, decoro y dignidad, contribuyendo, en la esperanza para hacer un mundo más justo y mejor redistribuido.

Un saludo.