El pucherazo constante de Pedro Sánchez

Buenas a todos,

En estos días de censura para no distraerme voy a tratar de volver a algo anterior, pues es importante pues podría servir para liberar mentes secuestradas por las ideas de dependencia, secuestro y sumisión del socialismo.

Quiero explicar más detalladamente como es que las retóricas de resultados llevan al caos, la ley de la selva y guerras. Pues eso yo creo que requiere una mejor explicación. No es fácil pero voy a intentarlo.

Para empezar, primero hay que ver como funcionan los seres vivos, expansividad, adaptación, depredadores, ecosistema, evolución. Es importante, pues, todo de mis teorías tiene que ver con entender la biología básica. Pero incidiendo después en la particularidad especial del hombre, que también está sujeto a esas normas, pero al mismo tiempo puede superarlas de diversas formas.

Cuando hay retóricas de resultados, esos resultados son en esencia objetivos biológicos, encubiertos de diversas máscaras retóricas, y se refieren a las normas de la biología básica. En cierta forma esa manera de pensar, al apartar las retóricas de principios de la visión del hombre, le induce a ser más como un animal salvaje.

Las retóricas de resultados suponen por ejemplo que hay determinadas riquezas en un país, y los habitantes de ese país se pelean por ellas, de tal modo que quedan envueltos en guerras, finalmente siendo esclavizados para extraer esas riquezas.

Mientras que las retóricas de principios son el caso contrario, un país sin ninguna riqueza, determina las normas de comportamiento que deben tener para progresar como sociedad, entonces ese país progresa. En algún punto se descubre por ejemplo, que en ese país hay riqueza, pero en vez de una guerra por esa riqueza por particulares, encuentran el modo de lograr que se preserve el interés nacional, en función de los principios que tienen como valor aún más allá de las riquezas pues les constituye como pueblo soberano.

¿Como se explica que sucederá así con la agenda global actual de resultados?

En la agenda se defienden resultados como acabar con el hambre y proteger el entorno natural. Ambos resultados son fines biológicos claramente, además que se contradicen un poco pero sin aclarar como resolver la contradicción, se deja en manos aleatorios de intereses y especulaciones particulares. De tal manera que la conclusión desordenada de los mismos, es el caos, y la autodestrucción de quienes defienden la agenda, en beneficio de los demás, los demás que defiendan sus intereses estarían mejor alineados con los verdaderos intereses biológicos del ser humano, que los que están guiados por la agenda de fines biológicos, como ocurre en el caso de Europa.

Sin embargo, si fuese por el lado contrario, en defensa de principios, poniendo el ser humano en el centro, respeto a la vida, la propiedad privada, y la libertad, la soberanía e interés nacional, democrático, entonces, las acciones políticas tendrían en cuenta unas a otras y el interés nacional, por tanto, no solo se reduciría el hambre y el impacto medioambiental, si no que se lograría un efecto global, y empujaría a los demás países a hacerlo, incluso si no apoyasen la agenda, pues los principios tienen valor propio.

Lo que es más es posible que no se lograsen los resultados deseados de la agenda firmada en un pasado, si no otros resultados aún mejores propios de cada momento, y más interesados verdaderamente por la sociedad mundial.

Reconozco que esto todavía no se ve claro, pero voy a seguir ahondando más. La evidencia empírica más notable de esto es el fracaso del socialismo.

Y el fracaso de este liberalismo conforme abraza retóricas de resultados más propias del socialismo. Empezando por adoptar el dinero fiat, cuando el dólar estadounidense dejó de estar amparado en nada. Desde ahí poco a poco entre diversas castas de poder influidas por el marxismo, la libertad empezó a morir y hace falta un nuevo proyecto de libertad para el mundo.

Se habla del nuevo orden mundial desde el 11-s aproximadamente, el punto crítico en el que una élite de conservadores influidos por el trotskismo llegan al poder. Y lo que pretenden es una especie de fascismo inspirado en ese trotskismo a través de guerras para someter a países que no se sometan a la economía circular falsa, y que ahora se presenta como si fueran progresistas. Es el comunismo o el fascismo de siempre, es difícil diferenciarlos en este punto pues el fin es la dominación global.

Este presunto orden mundial está condenado a fracasar como todos los socialismos pues el socialismo es una retórica de resultados, es un desperdicio energético constante, es algo que no puede funcionar porque va contra la naturaleza humana y por eso requiere desperdiciar mucha energía para tratar de mantenerlo. Hay que invertir en instrumentos de coerción, de manipulación, de opresión, de control, etc. constantemente, y sin verdadera necesidad.

Un país como El Salvador de Nayib Bukele, que invierte en Bitcoin, y gana con un 82% de votos, contra la partitocracia vetusta, está representando una alternativa clara a este orden mundial camino de su autodestrucción, empezando con una retórica de principios. Alguna gente ve esto como una dictadura, pero eso es lo que parece tras el choque drástico con la realidad, cuando uno tiene la venda en los ojos del globalismo y partitocracia vetusta.

Hay algunos puntos que son complejos de explicar, la retórica de resultados se centra en deseos que tienen las personas y sociedades, pero no se centran en hacer valer a las personas mismas y esas sociedades. Es como que le ofrecen cosas que desean a cambio se van humillando poco a poco. Olvidándose de hacerse respetar a sí mismas y hacer valer su integridad moral, individual y colectiva.

Supongamos que tenemos una caja fuerte en nuestro país cerrada, dentro existe la probabilidad de que haya algo de inconmensurable valor y la probabilidad de que no haya nada. La cuestión es, ¿a quien pertenecería lo que estuviese dentro? En retóricas de resultados, el valor de esa caja es lo que haya dentro, pero quizás no repercuta en absoluto en la sociedad pues a lo mejor alguien se lo quedaría para sí mismo. En retóricas de principios, habría un acuerdo en la sociedad para determinar como hacer buen uso de lo que haya dentro, y si no hay nada, el acuerdo entre la sociedad es una riqueza en sí misma, pues crea orden y unión social.

Un ciudadano de uno de estos países afectados por el globalismo de resultados, es egoísta en su forma de vivir aunque está sobrecargado de ideas del bien global. Esta contradicción, esta hipocresía generalizada es un síntoma de las retóricas de resultados claro. Por el cual muchas personas incluso no entienden por qué pasan las cosas y cada vez vamos a peor. Cuando importan los resultados, es difícil que un ciudadano quiera ir a morir a una guerra para defender su país, pues no importa su país, porque el país es una identidad no unos resultados, se pierde un sentimiento verdadero de comunión por una ideología de comunidad que no coincide con el mundo real.

Los verdaderos fines biológicos son los que valoran las características propias del hombre no aquellos en los que el hombre en un planteamiento de autoceguera, valora los fines biológicos del hombre como iguales al resto de animales, aislandose de contarse a sí mismo en el proceso mismo de toma en consideración de esos intereses.

Un saludo