EL SOCIALISMO, UNA FALSA IDEA DE PROGRESO QUE ESTÁ SIENDO ERRADICADO

Buenas a todos,

Mantengo lo que pienso por que los gobiernos que mejor están funcionando son tecnocracias, y a veces son elegidas por el pueblo, otras veces son dictaduras, otras veces algo intermedio, pero es claro que es el modelo que funciona.

La tecnocracia consiste en poner a la gente competente al mando sobre aquello que sea competente, no es ninguna teoría revolucionaria. Es sentido común. Algo que es aplicable a cualquier forma de gobierno incluso cualquier ideología incluyendo la más aberrante. Es lo que haría cualquier persona con un mínimo de dos dedos de frente cuando quiere que algo salga bien.

Si muchas personas en España tienen buenos recuerdos de la dictadura de Franco fue porque Franco fue un tecnócrata durante una larga época, de la cual se cosecharon resultados, y eso podría haberlo hecho cualquiera, si ahora mismo en la dictadura que hay en Cuba hicieran lo mismo, también tendrían mejores resultados. Como claro ejemplo de esto es la dictadura China, que es la primera o segunda potencial mundial, es una tecnocracia. Taiwan, que es un territorio en disputa con China, también es una tecnocracia, con la diferencia de que hay elecciones. En los resultados son similares.

Y este sentido común a veces se despierta cuando hay una crisis brutal, una situación de inestabilidad. En periodos de paz y abundancia el sentido común se guarda en un cajón y la sociedad va a por otras cosas. Y eso suele traernos a situaciones difíciles donde solo queda que el pueblo y los poderes apoyen el sentido común más elemental para salir de la situación. Pero es un modelo que se podría mantener en el tiempo, no tendría por qué abandonarse.

Lo tecnócrata quizás sea la columna vertebral de lo que todos quieren ver en sus gobiernos, eficiencia, y gente competente, por encima de todo lo demás. Fruto de esta voluntad, tolerancia cero ante la corruptela, y el despilfarro de dinero público. No extrañaría nada que hubiese pena de muerte para corruptos, y que se les crucifique en una plaza como método disuasorio. Este tipo de justicias salvajes tiene sentido en épocas salvajes, cuando reina el caos, la traición política, las mafias de delincuentes, el terrorismo, etc. para reestablecer el orden, castigos duros y ejemplarizantes para instaurar el orden.

Y tiene sentido en la actualidad cuando precisamente por todo el mundo, sobretodo donde no hay este modelo, estamos teniendo problemas, crisis serias, y siendo conscientes de tener políticos inútiles, además de corruptos, un Estado sobredimensionado con gente que cobra dinero público pero que nadie en realidad querría pagarlo, así que no se podría llamar democracia cuando el dinero público se gasta de manera oculta para fines espurios que nunca el pueblo aprobaría, tanto el pueblo que paga como el que no paga, porque nadie puede estar a favor de desperdiciar el dinero, sea propio o de terceros, todo el mundo querría verlo en algo útil.

Por supuesto que si solo votasen los que no cobran nada del Estado, seguramente estaríamos mejor. Pero la democracia no consiste en solo votar. Los que pagan suelen mirar mejor que se invierta mejor su dinero. Pero si hubiera verdadera democracia, más allá de un voto, tampoco haría falta llegar a eso, porque las decisiones serían coherentes a la voluntad del pueblo, tanto si está equivocado como si está en lo cierto, y el paso del tiempo las pondría en los mejores caminos en pro de los intereses colectivos, ya sea la seguridad, la libertad o la prosperidad.

Que la tecnocracia sea alternativa a lo que tenemos es algo claro y es un discurso muy popular que brota espontáneamente en la sociedad, sin decir exactamente esa palabra "tecnocracia", pero defendiendo exactamente eso, que haya gente de reconocida competencia a cargo. Se parece algo a la meritocracia, pero más enfocado en lo técnico y menos en lo académico. Algo objetivo y demostrable. Alguien que es empresario de una multinacional, tendrá más fiabilidad para saber llevar por ejemplo las cuentas de un país. Un agricultor sabrá sobre lo que necesitan los trabajadores del campo. Un pescador la pesca, un ganadero, y así sucesivamente.

No he leído el libro de la portada, aunque sí he escuchado comentarlo al mismo autor, estando mayormente de acuerdo con Jano García en la mayoría de lo que suele decir. No en todo porque está en contra de la democracia, y yo estoy a favor, recomiendo igualmente ver su canal en Youtube y comprar sus libros, sobretodo para apoyarle, porque es un gran comunicador.

Su último libro "El triunfo de la estupidez: Por qué la ignorancia es más peligrosa que la maldad" lo ha publicado recientemente. Recuerda en el título y seguramente el contenido a las leyes de Cipolla y lo que continuó Livraghi, que muchas se ha comentado en este blog. La 5ª Ley de Cipolla dice lo siguiente "La persona estúpida es la más peligrosa que existe.".


Como dije otras veces, la democracia es fruto de la libertad, por eso defender libertad pero estar en contra de la democracia, es también estar en contra de una parte de la libertad, porque son las personas las que naturalmente tienden con su libertad a tratar de construir y vivir en democracia, siendo además, la libertad política, una de las libertades fundamentales, pero también porque es una manera de vivir más eficiente, más libre y poderosa, como dije en el otro comentario, en vez de cada persona que quiere limones planta un limonero en su jardín, entre todos los que quieren limones compran un terreno y siembran un campo de limoneros, siendo más cómodo y eficiente, les sobra para vender limones, plantar otro limonero en su jardín y sacar dinero extra.

Es un ejemplo visual, pero es mucho más que eso. Por ejemplo, los servicios públicos como la sanidad, si no existiera la sanidad pública, serían todas privadas, al estar separadas entre sí, son menos eficientes, haciendo lo mismo varias veces en distintos sitios, aunque por la necesidad de competir y arriesgarse económicamente, hay menos despilfarro que en lo público cuando quienes están a cargo no arriesgan su patrimonio con su trabajo. Por esa misma necesidad económica, también merman lo que cubren como seguro sanitario, habiendo enfermedades que cuestan muchísimo tratarlas.

La versión más eficiente posible sería lo que reuniera lo mejor de ambos mundos en uno solo. El ciudadano es el que paga el servicio público y pone las condiciones, el que ofrece el servicio está controlado y vigilado constantemente por el ciudadano, se arriesga a ser despedido incluso a pagar algún delito, si hay ineficiencias y el servicio está por debajo de lo contratado y esperado, el servicio ofrece la cobertura máxima, además resulta más barato para el contribuyente que uno privado, al no haber multiplicidades, siendo más eficiente, y por último, si hay voluntad e interés del contribuyente, podrían beneficiarse no contribuyentes, especialmente si eso repercute en su propia salud, por ejemplo el control de enfermedades infecciosas. La cuestión es que esto funcionaría bien siempre que el ciudadano y contribuyente, es quien tiene la primera y última palabra, como si fuera el empresario. Siempre defenderá sus intereses, y siempre tenderá a maximizar la eficiencia, no permitiendo abusos y situaciones insostenibles.

Un saludo