La lluvia de dinero, consistente en nada menos que un 32 por ciento de incremento en las inversiones, está incluída en los Presupuestos Generales del Estado y se produce cuatro meses después de haberse mejorado ya el "cupo vasco", que ya redujo en 1.300 millones de euros la aportación del País Vasco a las arcas del Estado, y en un momento en que La Moncloa busca el apoyo del PNV a sus presupuestos.
El gobierno de Rajoy no aprende y continúa gobernando con los vicios del pasado, en concreto con la compra de votos a las autonomías díscolas y rebeldes, a las que concede privilegios y ventajas a cambio de apoyos, un camino siniestro que en Cataluña condujo hacia la actual rebelión secesionista y a incrementar el odio antiespañol.
La maldad de esta forma de gobernar, inmoral, antidemocrática y contraria al espíritu de la Constitución, reside en que destroza el principio de igualdad, premia la rebeldía y la deslealtad y priva a las demás regiones, sobre todo a las más atrasadas, del dinero que necesitan para avanzar y abandonar el atraso.
Esa línea de conducta, practicada por los dos grandes partidos españoles que han gobernado desde la muerte de Franco y por los nacionalistas, es repudiada por los ciudadanos porque genera desigualdad y denota corrupción y falta de principios democráticos, además de ser perversa en si misma y reflejo de la falta de controles a los gobernantes en España, de la nula influencia de los ciudadanos y de la impotencia de la sociedad para frenar los abusos y arbitrariedades del poder.
El gobierno incrementa el esfuerzo inversor en infraestructuras en las comunidades autónomas tras el recorte generalizado de 2017. En este ejercicio hay 14.823 millones de euros en gasto territorial, un 15,3% más que en el año anterior. Si entonces este desembolso se redujo en todas las regiones salvo Canarias, en 2018 todas excepto Navarra y La Rioja recibirán más dinero.
Otorgar más dinero y privilegios a los vascos significa relegar a los andaluces, extremeños, manchegos, castellanos y a otras comunidades españolas más necesitadas. El País Vasco, junto con Cataluña, las dos regiones más desleales y rebeldes y las únicas donde ha anidado el terrorismo asesino, han sido las privilegiadas en España, tanto por los gobiernos de Franco, que las industrializó y las colmó de beneficios, como por los de la falsa democracia actual, que mantienen e incrementan esa política de desigualdad e injusticia.
Francisco Rubiales
El gobierno de Rajoy no aprende y continúa gobernando con los vicios del pasado, en concreto con la compra de votos a las autonomías díscolas y rebeldes, a las que concede privilegios y ventajas a cambio de apoyos, un camino siniestro que en Cataluña condujo hacia la actual rebelión secesionista y a incrementar el odio antiespañol.
La maldad de esta forma de gobernar, inmoral, antidemocrática y contraria al espíritu de la Constitución, reside en que destroza el principio de igualdad, premia la rebeldía y la deslealtad y priva a las demás regiones, sobre todo a las más atrasadas, del dinero que necesitan para avanzar y abandonar el atraso.
Esa línea de conducta, practicada por los dos grandes partidos españoles que han gobernado desde la muerte de Franco y por los nacionalistas, es repudiada por los ciudadanos porque genera desigualdad y denota corrupción y falta de principios democráticos, además de ser perversa en si misma y reflejo de la falta de controles a los gobernantes en España, de la nula influencia de los ciudadanos y de la impotencia de la sociedad para frenar los abusos y arbitrariedades del poder.
El gobierno incrementa el esfuerzo inversor en infraestructuras en las comunidades autónomas tras el recorte generalizado de 2017. En este ejercicio hay 14.823 millones de euros en gasto territorial, un 15,3% más que en el año anterior. Si entonces este desembolso se redujo en todas las regiones salvo Canarias, en 2018 todas excepto Navarra y La Rioja recibirán más dinero.
Otorgar más dinero y privilegios a los vascos significa relegar a los andaluces, extremeños, manchegos, castellanos y a otras comunidades españolas más necesitadas. El País Vasco, junto con Cataluña, las dos regiones más desleales y rebeldes y las únicas donde ha anidado el terrorismo asesino, han sido las privilegiadas en España, tanto por los gobiernos de Franco, que las industrializó y las colmó de beneficios, como por los de la falsa democracia actual, que mantienen e incrementan esa política de desigualdad e injusticia.
Francisco Rubiales
Comentarios: