Dimitro Kuleba, Jens Stoltenberg y Josep Borrell
En apariencia, los líderes mundiales lamentan que Moscú haya decidido suspender unilateralmente su acuerdo con Estados Unidos por el control de las armas nucleares, el conocido como tratado Nuevo Start, y pide al Kremlin que reconsidere su decisión, pero para muchos poderes oscuros las cosas marchan bien, como se había previsto, hacia el deseado conflicto que aniquilará a Rusia, despoblará el mundo y hará posible el "reseteo" de la humanidad, empezando una nueva civilización, con un Estado único y poderoso, dominador de un ser humano sometido al Estado, sin apenas libertades ni derechos.
"Nos estamos alejando de la arquitectura de control de armas y las normas internacionales basadas en el orden que hemos utilizado durante décadas y hemos construido paso a paso y por acuerdo”, ha icho el secretario general de la OTAN,
Nuestro mundo está plagado de peligro no porque exista una guerra entre Rusia y Occidente con Ucrania como campo de batalla, sino porque los valores y la ética han desaparecido de la política mundial y el mundo está en manos de indeseables, más preocupados por conservar el poder que por el bien común y el avance de la Humanidad.
Nuestro políticos, aquellos a los que pagamos el sueldo, nos están llevando a la ruina, no sólo en España, donde el deterioro y la injusticia son claramente visibles y despreciables, sino en todo el mundo.
Aquellos que han sido elegidos para gobernar con firmeza y acierto son los que nos están llevando hacia el abismo. Todos somos culpables del drama de la Humanidad, los políticos por haberse vuelto canallas y corruptos y los ciudadanos por haber elegido a miserables y por permitirles gobernar rodeados de abuso, vicio y maldad.
Nadie duda que Putin es una bestia peligrosa, pero Occidente no se va a la zaga si se analizan las últimas décadas, en las que los falsos demócratas han destruido Libia, Irak, Yugoslavia y han organizado multitud de guerras de depredación.
Por lo pronto, la industria militar de todo Occidente se prepara para producir armas y municiones a toda velocidad, mientras se busca dinero para financiar un rearme sin precedentes.
La propaganda occidental, un recurso que funciona a la perfección, golpea los tambores de guerra para enardecer a una población sometida a los poderosos indignos que les gobiernan sin merecerlo.
¿Qué más signos e indicios necesitamos para concluir que nos dirigimos hacia el Apocalipsis?.
Francisco Rubiales
"Nos estamos alejando de la arquitectura de control de armas y las normas internacionales basadas en el orden que hemos utilizado durante décadas y hemos construido paso a paso y por acuerdo”, ha icho el secretario general de la OTAN,
Nuestro mundo está plagado de peligro no porque exista una guerra entre Rusia y Occidente con Ucrania como campo de batalla, sino porque los valores y la ética han desaparecido de la política mundial y el mundo está en manos de indeseables, más preocupados por conservar el poder que por el bien común y el avance de la Humanidad.
Nuestro políticos, aquellos a los que pagamos el sueldo, nos están llevando a la ruina, no sólo en España, donde el deterioro y la injusticia son claramente visibles y despreciables, sino en todo el mundo.
Aquellos que han sido elegidos para gobernar con firmeza y acierto son los que nos están llevando hacia el abismo. Todos somos culpables del drama de la Humanidad, los políticos por haberse vuelto canallas y corruptos y los ciudadanos por haber elegido a miserables y por permitirles gobernar rodeados de abuso, vicio y maldad.
Nadie duda que Putin es una bestia peligrosa, pero Occidente no se va a la zaga si se analizan las últimas décadas, en las que los falsos demócratas han destruido Libia, Irak, Yugoslavia y han organizado multitud de guerras de depredación.
Por lo pronto, la industria militar de todo Occidente se prepara para producir armas y municiones a toda velocidad, mientras se busca dinero para financiar un rearme sin precedentes.
La propaganda occidental, un recurso que funciona a la perfección, golpea los tambores de guerra para enardecer a una población sometida a los poderosos indignos que les gobiernan sin merecerlo.
¿Qué más signos e indicios necesitamos para concluir que nos dirigimos hacia el Apocalipsis?.
Francisco Rubiales
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