Llevamos muchos años ocultando la raíz de la cuestión y es bueno que alguien diga las cosas como son. El cristianismo, creador de Europa y, sobre todo, de sus valores, esos valores que damos por sentados como si hubieran nacido con la Humanidad, se abandona porque tenemos esos valores, sin comprender que esos valores sin la causa que los creó son cosa vacía y sin sentido.
Pero es que el cristianismo es muy peligroso para los que mandan ya que nos hace libres porque somos hijos de Dios. Y eso no encaja bien con con los que desean tener un pueblo de esclavos que hagan lo que ellos quieren.
Esa es la parte novedosa del cristianismo, convertirnos en hijos de Dios y por tanto en seres libres. Los judíos se escandalizaban cuando Jesús y luego los cristianos llamaban padre a Dios. Para los musulmanes, ese concepto de Dios padre es la peor blasfemia y en las demás religiones, que ya no tienen a Dios, el concepto es directamente extraño.
Ese concepto de hombre libre es lo que ha creado Europa y visto lo que hay por el mundo, no cabe duda que la filosofía que crea Europa es muy superior a las demás y a la vista está el desarrollo del pensamiento europeo.
Pero interesa un pueblo esclavo, por eso hay que cambiar toda la manera de pensar y como consecuencia que desaparezca Europa y para ello lo mejor es abandonar a Dios. No creo que Dios no haya abandonado, es simplemente que hemos abando a Dios y no contentos con eso, hemos cambiado hasta las raíces naturales de nuestra vida.
Porque otros pueblos han elaborado sociedades muy prósperas basados sólo en la filosofía natural, en donde los conceptos del bien y del mal se establecen razonablemente. El mayor problema es que además del abandono de Dios y por tanto de nuestras raíces, se ha cambiado la forma de pensar y al mal se le llama bien y al bien, mal. Vemos como se nos muestran como ciudadanos ejemplares a la escoria de la sociedad y se nos muestran actitudes abyectas como las adecuadas.
La creencia en el fin de los tiempos está bastante presente, aunque tampoco demasiado. Lo que sí parece claro es que se acerca el fin de estos tiempos, en el sentido que sea, sea para instaurar una sociedad de esclavos, que duraría varios siglos o volver a los valores tradicionales y a la libertad. Pero en cualquier caso esto no nos va a salir gratis, volver a la libertad y a los valores va a costar mucha sangre, pero supongo que, dado que todo tiene un precio, es el precio que hay que pagar.
Ese es otro de los grandes errores, pensar que las cosas son gratis, que por ser nosotros tenemos derecho a ciertas cosas, como la libertad. Cuando en realidad es que la libertad supone una lucha constante, especialmente interior y como resultado de las miles de luchas interiores sale una sociedad de personas libres.
Aunque seguramente no lo veremos nosotros, que ya tenemos nuestros años, creo que la sociedad evolucionará para volver a los valores que la hicieron grande. Pero no va a ser un paseo. Si en otras épocas, restaurar los valores costó mucho, en esta, en donde los valores no es que se han perdido, es que se han vuelto del revés, el esfuerzo será mucho mayor y primero la sociedad tiene que tocar fondo y para eso aún falta.
El gran peligro es que al tocar fondo no seamos capaces de levantarnos y caigamos en la esclavitud.
Vanlop
Pero es que el cristianismo es muy peligroso para los que mandan ya que nos hace libres porque somos hijos de Dios. Y eso no encaja bien con con los que desean tener un pueblo de esclavos que hagan lo que ellos quieren.
Esa es la parte novedosa del cristianismo, convertirnos en hijos de Dios y por tanto en seres libres. Los judíos se escandalizaban cuando Jesús y luego los cristianos llamaban padre a Dios. Para los musulmanes, ese concepto de Dios padre es la peor blasfemia y en las demás religiones, que ya no tienen a Dios, el concepto es directamente extraño.
Ese concepto de hombre libre es lo que ha creado Europa y visto lo que hay por el mundo, no cabe duda que la filosofía que crea Europa es muy superior a las demás y a la vista está el desarrollo del pensamiento europeo.
Pero interesa un pueblo esclavo, por eso hay que cambiar toda la manera de pensar y como consecuencia que desaparezca Europa y para ello lo mejor es abandonar a Dios. No creo que Dios no haya abandonado, es simplemente que hemos abando a Dios y no contentos con eso, hemos cambiado hasta las raíces naturales de nuestra vida.
Porque otros pueblos han elaborado sociedades muy prósperas basados sólo en la filosofía natural, en donde los conceptos del bien y del mal se establecen razonablemente. El mayor problema es que además del abandono de Dios y por tanto de nuestras raíces, se ha cambiado la forma de pensar y al mal se le llama bien y al bien, mal. Vemos como se nos muestran como ciudadanos ejemplares a la escoria de la sociedad y se nos muestran actitudes abyectas como las adecuadas.
La creencia en el fin de los tiempos está bastante presente, aunque tampoco demasiado. Lo que sí parece claro es que se acerca el fin de estos tiempos, en el sentido que sea, sea para instaurar una sociedad de esclavos, que duraría varios siglos o volver a los valores tradicionales y a la libertad. Pero en cualquier caso esto no nos va a salir gratis, volver a la libertad y a los valores va a costar mucha sangre, pero supongo que, dado que todo tiene un precio, es el precio que hay que pagar.
Ese es otro de los grandes errores, pensar que las cosas son gratis, que por ser nosotros tenemos derecho a ciertas cosas, como la libertad. Cuando en realidad es que la libertad supone una lucha constante, especialmente interior y como resultado de las miles de luchas interiores sale una sociedad de personas libres.
Aunque seguramente no lo veremos nosotros, que ya tenemos nuestros años, creo que la sociedad evolucionará para volver a los valores que la hicieron grande. Pero no va a ser un paseo. Si en otras épocas, restaurar los valores costó mucho, en esta, en donde los valores no es que se han perdido, es que se han vuelto del revés, el esfuerzo será mucho mayor y primero la sociedad tiene que tocar fondo y para eso aún falta.
El gran peligro es que al tocar fondo no seamos capaces de levantarnos y caigamos en la esclavitud.
Vanlop
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