Una reflexión acerca del reférendum convocado por Ibarretxe, surgida a raíz de la reflexión que hacía mi mejor amigo y compañero de piso, mientras yo veía un debate esta mañana en Telemadrid sobre la política antiterrorista del Gobierno.
Mi compañero comentaba "Me gustaría saber el resultado de ese reférendum", a lo que yo le respondía, "ese reférendum es ilegal", pero el me respondía "ya, pero me gustaría saber el resultado".
Es decir, mi compañero de piso querría conocer la voluntad del pueblo vasco, para poder tomar decisiones, si fuera político, o en su caso como ciudadano, posiciones.
A él no le gusta hablar mucho de política, así que lo que voy a exponer se lo he contado de forma resumida, y no hemos seguido discutiendo el tema. Pero no estaría mal que el Partido Popular, ese partido sitúado por el PSOE y sus socios en la extrema derecha, que mantiene una postura conservadora y defensiva ante el arrinconamiento al que le somete el resto de la escena política iniciase un discurso claro y resolutivo, a la vez que democrático, ante el problema del nacionalismo vasco, catalán o gallego.
Mi planteamiento sería el siguiente. En España la soberanía nacional reside en el pueblo español. En todo y cada uno de los españoles. Y las decisiones que afecten a la estructura de la nación la deben tomar todos los españoles democráticamente. Y sólo partiendo de esta base, que respeta la legalidad, la Constitución que aprobamos todos los españoles, y los principios de convivencia y democracia que sostienen este país se puede empezar a solucionar el problema.
Partiendo de esta base lo primero sería convocar un reférendum a nivel nacional para que todo el pueblo español decida si vascos, catalanes, gallegos, o cualquier otra región tiene derecho a la autodeterminación, a convocar un reférendum regional para decidir en libertad y democracia su futuro. Si ese reférendum convocado a nivel nacional diera a Cataluña, País Vasco o Galicia la oportunidad de decidir si quieren independizarse de España o no, habríamos superado claramente el primer problema, que no es una decisión que dependa de esas regiones exclusivamente. Todos los españoles habríamos tenido voz y voto, y abríamos aprobado o denegado ese derecho.
Yo quizás les daría libertad para que se autodeterminaran, se independizaran, y dejaran de joder y putear. Si quieren ser gobernados por esos nacionalistas totalitarios allá ellos, sufrirán sus consecuencias y en el resto del país tendremos que dejar de sufrirles.
Por otro lado, ese reférendum de autodeterminación debe ser convocado en libertad, y esa es una premisa que actualmente no se da en el País Vasco, por la existencia de ETA, y en Cataluña empieza a estar en duda por la existencia de una espiral del silencio y por el inicio de una violencia consentida por las autoridades públicas que golpea con determinante fuerza a la libertad de un partido como Ciudadanos, cuyo líder está amenazado de muerte por las juventudes de ERC. Hasta que dicha situación no se normalizase, y realmente existiese libertad para expresarse en libertad, sin ser mal visto, discriminado o amenazado, no se podría convocar dicho reférendum. Y para ello es necesaria la desaparición de ETA, y el desarrollo de un plazo de tiempo y de medidas que normalicen la libertad en dichos territorios. ¿10 años? ¿20 años? No lo sé. El necesario. Con medidas reales para garantizar la libertad.
En Galicia dicha presión actualmente no existe, y la libertad de los gallegos es mucho mayor, en el caso de que un reférendum a nivel nacional les diese el derecho de autodeterminación, éste se podría convocar casi de inmediato. Y obviamente todos los gallegos deberían aceptar su resultado.
Una consulta en el país vasco ahora no tiene sentido. Porque hay vascos que han huido de su tierra, porque hay vascos que viven amenazados y atenazados. Porque hay armas y bombas de por medio. Lo que a mi amigo le gustaría saber resultaría ser totalmente engañoso, porque los vascos no se pueden expresar en libertad.
Yo no pretendo retenerlos por obligación. Que decidan libremente. Pero para eso es necesario garantizar previamente la libertad.
Postdata: Sólo encuentro un problema a estos planteamientos, y es el lavado de cerebro al que han sido sometidos los jóvenes vascos y catalanes de mi generación, educados bajo 25 años de gobierno nacionalista. ¿Cómo podemos garantizar su libertad si están mediatizados desde su nacimiento?
alehop
Mi compañero comentaba "Me gustaría saber el resultado de ese reférendum", a lo que yo le respondía, "ese reférendum es ilegal", pero el me respondía "ya, pero me gustaría saber el resultado".
Es decir, mi compañero de piso querría conocer la voluntad del pueblo vasco, para poder tomar decisiones, si fuera político, o en su caso como ciudadano, posiciones.
A él no le gusta hablar mucho de política, así que lo que voy a exponer se lo he contado de forma resumida, y no hemos seguido discutiendo el tema. Pero no estaría mal que el Partido Popular, ese partido sitúado por el PSOE y sus socios en la extrema derecha, que mantiene una postura conservadora y defensiva ante el arrinconamiento al que le somete el resto de la escena política iniciase un discurso claro y resolutivo, a la vez que democrático, ante el problema del nacionalismo vasco, catalán o gallego.
Mi planteamiento sería el siguiente. En España la soberanía nacional reside en el pueblo español. En todo y cada uno de los españoles. Y las decisiones que afecten a la estructura de la nación la deben tomar todos los españoles democráticamente. Y sólo partiendo de esta base, que respeta la legalidad, la Constitución que aprobamos todos los españoles, y los principios de convivencia y democracia que sostienen este país se puede empezar a solucionar el problema.
Partiendo de esta base lo primero sería convocar un reférendum a nivel nacional para que todo el pueblo español decida si vascos, catalanes, gallegos, o cualquier otra región tiene derecho a la autodeterminación, a convocar un reférendum regional para decidir en libertad y democracia su futuro. Si ese reférendum convocado a nivel nacional diera a Cataluña, País Vasco o Galicia la oportunidad de decidir si quieren independizarse de España o no, habríamos superado claramente el primer problema, que no es una decisión que dependa de esas regiones exclusivamente. Todos los españoles habríamos tenido voz y voto, y abríamos aprobado o denegado ese derecho.
Yo quizás les daría libertad para que se autodeterminaran, se independizaran, y dejaran de joder y putear. Si quieren ser gobernados por esos nacionalistas totalitarios allá ellos, sufrirán sus consecuencias y en el resto del país tendremos que dejar de sufrirles.
Por otro lado, ese reférendum de autodeterminación debe ser convocado en libertad, y esa es una premisa que actualmente no se da en el País Vasco, por la existencia de ETA, y en Cataluña empieza a estar en duda por la existencia de una espiral del silencio y por el inicio de una violencia consentida por las autoridades públicas que golpea con determinante fuerza a la libertad de un partido como Ciudadanos, cuyo líder está amenazado de muerte por las juventudes de ERC. Hasta que dicha situación no se normalizase, y realmente existiese libertad para expresarse en libertad, sin ser mal visto, discriminado o amenazado, no se podría convocar dicho reférendum. Y para ello es necesaria la desaparición de ETA, y el desarrollo de un plazo de tiempo y de medidas que normalicen la libertad en dichos territorios. ¿10 años? ¿20 años? No lo sé. El necesario. Con medidas reales para garantizar la libertad.
En Galicia dicha presión actualmente no existe, y la libertad de los gallegos es mucho mayor, en el caso de que un reférendum a nivel nacional les diese el derecho de autodeterminación, éste se podría convocar casi de inmediato. Y obviamente todos los gallegos deberían aceptar su resultado.
Una consulta en el país vasco ahora no tiene sentido. Porque hay vascos que han huido de su tierra, porque hay vascos que viven amenazados y atenazados. Porque hay armas y bombas de por medio. Lo que a mi amigo le gustaría saber resultaría ser totalmente engañoso, porque los vascos no se pueden expresar en libertad.
Yo no pretendo retenerlos por obligación. Que decidan libremente. Pero para eso es necesario garantizar previamente la libertad.
Postdata: Sólo encuentro un problema a estos planteamientos, y es el lavado de cerebro al que han sido sometidos los jóvenes vascos y catalanes de mi generación, educados bajo 25 años de gobierno nacionalista. ¿Cómo podemos garantizar su libertad si están mediatizados desde su nacimiento?
alehop
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