En los presupuestos generales del Estado que se pretenden aprobar para el próximo año; hay cosas que no concuerdan con “el empobrecimiento que tenemos encima la inmensa mayoría de españoles”; y me refiero sólo a dos; una el considerable aumento que el ministro del Interior se va a asignar en eso tan escandaloso que se denomina “fondos reservados” y por cuyo motivos, algún colega de gobiernos anteriores y algunos subalternos, fueron a la cárcel, puesto que los gastaron en lo que les vino en gana o se los apropiaron limpiamente y aún no los han devuelto; por lo que es de suponer que esos fondos reservados, al final, van destinados a capricho de quién los maneja y vete a saber donde y para qué.
Lo que igualmente es escandaloso en esta situación, es que el presupuesto que se asigna al rey y su casa (“reparto que luego el rey hará como mejor le venga en gana”) suba en vez de bajar, que es lo que era de esperar… puesto que “si el primer español no da ejemplo”… ¿qué puede esperarse del resto? Veamos datos concretos y que copio de la publicación que los ha hecho públicos.
“En tiempos de crisis y de vacas flacas, cuando los altos cargos de la Administración han congelado sus sueldos, la Casa de Su Majestad el Rey Juan Carlos I parece ir contracorriente y dispondrá el año que viene, según el proyecto de presupuestos generales del Estado presentado ayer por Pedro Solbes, de un total de 8,90 millones de euros “para el sostenimiento de su Familia y Casa”, tal y como marca la Constitución en su artículo 65. La cifra es un 2,7% superior a lo que los Borbón han recibido este año, en el que el Rey ha distribuido libremente entre sus herederos 8´86 millones de euros”.
Y debe importarnos un bledo, si se nos argumenta que en Inglaterra, Suecia u otro país, costean a sus reyes con más o con menos… Estamos en España y España ha sido empobrecida por sus malísimos gobernantes, lleva ya bastantes años y en los que la casa real y su cabeza principal, han recibido ingresos cuantiosos y aumentados cada año sin que se hayan preocupado de todos los demás, como es su obligación… “por aquello de que dicen encarnarnos a todos”… “los padres tienen que dar ejemplos para marcar pautas a seguir” y esto se ha olvidado y no interesa recordarlo, a los perceptores de ciertas grandes prebendas.
Por lo tanto esperamos que esos presupuestos no sean aprobados y en estos dos casos y otros muchos que pueda haber, no sólo no se aumenten sino que sean reducidos sensiblemente… ¡¡ Estamos hartos de pagar impuestos para que sean dilapidados de mil formas diferentes”.
Antonio García Fuentes
Lo que igualmente es escandaloso en esta situación, es que el presupuesto que se asigna al rey y su casa (“reparto que luego el rey hará como mejor le venga en gana”) suba en vez de bajar, que es lo que era de esperar… puesto que “si el primer español no da ejemplo”… ¿qué puede esperarse del resto? Veamos datos concretos y que copio de la publicación que los ha hecho públicos.
“En tiempos de crisis y de vacas flacas, cuando los altos cargos de la Administración han congelado sus sueldos, la Casa de Su Majestad el Rey Juan Carlos I parece ir contracorriente y dispondrá el año que viene, según el proyecto de presupuestos generales del Estado presentado ayer por Pedro Solbes, de un total de 8,90 millones de euros “para el sostenimiento de su Familia y Casa”, tal y como marca la Constitución en su artículo 65. La cifra es un 2,7% superior a lo que los Borbón han recibido este año, en el que el Rey ha distribuido libremente entre sus herederos 8´86 millones de euros”.
Y debe importarnos un bledo, si se nos argumenta que en Inglaterra, Suecia u otro país, costean a sus reyes con más o con menos… Estamos en España y España ha sido empobrecida por sus malísimos gobernantes, lleva ya bastantes años y en los que la casa real y su cabeza principal, han recibido ingresos cuantiosos y aumentados cada año sin que se hayan preocupado de todos los demás, como es su obligación… “por aquello de que dicen encarnarnos a todos”… “los padres tienen que dar ejemplos para marcar pautas a seguir” y esto se ha olvidado y no interesa recordarlo, a los perceptores de ciertas grandes prebendas.
Por lo tanto esperamos que esos presupuestos no sean aprobados y en estos dos casos y otros muchos que pueda haber, no sólo no se aumenten sino que sean reducidos sensiblemente… ¡¡ Estamos hartos de pagar impuestos para que sean dilapidados de mil formas diferentes”.
Antonio García Fuentes
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