España cada día se parece más a una dictadura, "a la dictadura franquista con rostro humano y democrático".
Lo afirma José Luis Gutiérrez, ex director de Diario 16, autor de varios libros, representante de la vieja guardia del periodismo democrático español y uno de los precursores del periodismo de investigación en España, destapando entre otros los aspectos más graves del caso Roldan.
Dice "el Guti" que la única salida es la denuncia y afirma que él "se desgañita" denunciando la falta de verdadera democracia y de libertades.
Reproducimos a continuación sus opiniones, publicadas en Periodista Digital, muy parecidas a las que defiende con insistencia este blog:
Pregunta: ¿De que adolece el periodismo actual?
Respuesta: Cada vez nos parecemos más a una dictadura. A la dictadura Franquista con rostro humano y democrático. Porque la unanimidad en el discurso mediático es inquietante.
P: ¿Consideras que no hay disparidad de voces es en los medios?
R: No las hay. Hay un control en la inmensa mayoría de los medios desde el poder político. Cuando hablo de esto me refiero al Gobierno, al PSOE. No al PP que no tiene ninguno. Creo que eso es inquietante para la buena salud democrática de España.
P: ¿De esto tampoco se salva Internet con la pluralidad y libertad que se la presupone?
R: En Internet también ha entrado el poder porque lo ves en los titulares. De todos modos es algo muy incipiente en España al margen de las audiencias que tiene que llegan a ser muy respetables. Hay algunos periódicos como Periodista Digital o Libertad Digital (por no hablar de Elmundo.es) que así lo confirman.
P: ¿Crees que la ideología mata la esencia del periodista?
R: No la ideología, la política. Ideología no hay. Tú puedes tener un talante de izquierdas como yo mismo y como otros muchos colegas, pero no militar en un partido. En este sentido, el gran peligro es convertirse en un propagandista. Te dan la consigna desde una sentina y tú vas y la reproduces.
P: ¿Cómo se podría superar este obstáculo? Pero superarlo desde la propia profesión.
R: Haciendo lo que yo hago. Denunciándolo un día y otro también. Yo me desgañito allí donde esté.
Lo afirma José Luis Gutiérrez, ex director de Diario 16, autor de varios libros, representante de la vieja guardia del periodismo democrático español y uno de los precursores del periodismo de investigación en España, destapando entre otros los aspectos más graves del caso Roldan.
Dice "el Guti" que la única salida es la denuncia y afirma que él "se desgañita" denunciando la falta de verdadera democracia y de libertades.
Reproducimos a continuación sus opiniones, publicadas en Periodista Digital, muy parecidas a las que defiende con insistencia este blog:
Pregunta: ¿De que adolece el periodismo actual?
Respuesta: Cada vez nos parecemos más a una dictadura. A la dictadura Franquista con rostro humano y democrático. Porque la unanimidad en el discurso mediático es inquietante.
P: ¿Consideras que no hay disparidad de voces es en los medios?
R: No las hay. Hay un control en la inmensa mayoría de los medios desde el poder político. Cuando hablo de esto me refiero al Gobierno, al PSOE. No al PP que no tiene ninguno. Creo que eso es inquietante para la buena salud democrática de España.
P: ¿De esto tampoco se salva Internet con la pluralidad y libertad que se la presupone?
R: En Internet también ha entrado el poder porque lo ves en los titulares. De todos modos es algo muy incipiente en España al margen de las audiencias que tiene que llegan a ser muy respetables. Hay algunos periódicos como Periodista Digital o Libertad Digital (por no hablar de Elmundo.es) que así lo confirman.
P: ¿Crees que la ideología mata la esencia del periodista?
R: No la ideología, la política. Ideología no hay. Tú puedes tener un talante de izquierdas como yo mismo y como otros muchos colegas, pero no militar en un partido. En este sentido, el gran peligro es convertirse en un propagandista. Te dan la consigna desde una sentina y tú vas y la reproduces.
P: ¿Cómo se podría superar este obstáculo? Pero superarlo desde la propia profesión.
R: Haciendo lo que yo hago. Denunciándolo un día y otro también. Yo me desgañito allí donde esté.