¿Asistirá Ayuso al entierro de Pedro Sánchez?

Buenos días Don Francisco

Ando atareadísimo estos días.

Tengo pendiente al menos dos comentarios extensos sobre el voto por correo y lo de la cosa musulmana. Cuando tenga tiempo los "perpetro" y se los cuelgo ...

Simplemente y respecto al artículo de hoy.

La cuestión clave, es hasta que punto la Sra. Ayuso es capaz de navegar por si misma, de ser un verbo suelto, o si se dejará mangonear por el PP. Ál respecto el PSOE y Sánchez son casi anecdóticos.

Lo digo por lo siguiente:

Me parece que la mayoría "arsoluta" en la Asamblea de Madrid son 67 escaños (132 escaños en total).

Pongamos, es un suponer, que el PP saca 55 y VOX 20 = 75 mayoría holgada. Y que por ventura el Moñas se quedase sin pasar el 5%, ídem con Cs. Quedándose el PSOE con 45 y Mas Madrid (Errejón) con 12 = suman 57. No me parece un resultado imposible.

Con lo que muchos pensaríamos, ese es el ánimo de su artículo, que por fin se ve el final del túnel y que tanto Podemos cómo Sánchez tendrían, en el medio plazo,
sus días contados.

Pero podría no ser así (no quiero ser agorero). Y ello se debería a la naturaleza globalista del PP. Porque puesta a formar gobierno Ayuso debería (supongo) de aceptar no sólo que VOX tuviera representantes en ese gobierno, si no que determinadas políticas en educación, cosa LGTBIQ, feminazi, memoria histérica, "migraciones", políticas abortistas, ecologismos del tocomocho climático... cambiaran su orientación (entre otras cosas, retirada de numerosas subvenciones ad hoc).

Y ahí, Don Francisco, con la "iglesia" habríamos topado. Véase "iglesia" como ese conjunto de ideas globalistas (confundidas habitualmente como liberales) que tanto peso tienen tanto en Podemos, PSOE, Cs, nazionalistas y Partido Popular.

Por lo que Sánchez, para evitar el "desastre" de que un partido de "ultraderecha" pudiera "condicionar" de manera tan "catastrófica" la política de una Comunidad cómo la de Madrid, ejemplo de que una gestión distinta puede hacerse, y con el consiguiente riesgo de que el ejemplo se extendiera después al resto de España... Decidiera "sacrificar" al PSOE de Madrid diciendo que se abstendrían en la elección de Ayuso, a cambio de que no se tocasen (es mas se incrementasen) los políticas respectivas/presupuestos representadas por VOX... "sacrificio" que contaría (puede estar usted seguro) con TODOS LOS PARABIENES de los medios, medios extranjeros, el Papa Francisco, ....

Y si al final no quedara otra hasta podría hacer una crisis de Gobierno ofreciendo la Vicepresidencia a Casado.. para dar la estabilidad suficiente a España en estos tiempos procelosos de pandemia y crisis... con el "fascismo" populista acechando.
¿Se resistiría Casado?

Yo lo dudo.

¿Se resistiría Ayuso a las presiones de Casado? Yo me temo que tampoco. Pero cualquier cosa puede ser.

En mi opinión son preguntas que deberíamos hacernos todos ... y pensar sosegadamente la respuesta.

Porque los poderes a los que se enfrentan los españoles y madrileños son muy poderosos, valga la redundancia, y son capaces de cualquier cosa.

Un cordial saludo

PS

Don Francisco.

Puede tener usted la completa seguridad de que el tal Bustos.. en que usted ha insipirado su artículo, levitaría de felicidad si el PSOE se abstuviera en la elección de Ayuso a cambio de que el PP se desmarcara de VOX.

Y "sólo por incordiar".

Si usted conoce a algún periodita con acceso a las ruedas de presa de nuestros PSOE... que prueben (si se atreven) a pregunatrle a algún capo por ¿si se abstendría el PSOE en la elección de Ayuso, con tal de impedir que VOX pudiera condicionar la politica de la CAM?

Le puedo asegurar que al gachó o gachis ... le muda la cara. Si es un pregunta no pactada y no prevista.

Un cordial saludo otra vez

Buenas,

Voy a hablar un poco de la idiotez en sentido etimológico. Toda aquella persona que no se preocupa de los asuntos públicos. Siempre hay idiotez de fondo en todos los problemas políticos.

La sociedad en España se pueden organizar y fundar con su dinero más partidos políticos y mejores en cuanto a ideas y metodologías de trabajo, pero por comodidad o inercia no lo hacemos.

Pero cuando llega el día de las elecciones, hay que tomar una decisión con lo que hemos hecho, o sea, con los partidos que ya hay. Hay gente que en este punto dice, "hombre no, no voy a votar a ninguno porque el sistema y los partidos políticos son corruptos". Este discurso es parte de la idiotez de base. Ya que los asuntos públicos como el pagar impuestos son un vínculo forzoso de la humanidad, como ser parte de una familia. El ser humano siempre es parte de una sociedad.

El punto bueno del sistema es que la ciudadanía tiene el poder, el punto malo es que delegue y pase demasiado de ejercerlo. Que se desentienda de su responsabilidad. Pero eso no es el sistema, eso somos nosotros. No preocuparse por los asuntos públicos es una cuestión cultural. Desde siempre.

El sistema refleja en sus defectos estos defectos culturales, y como las manzanas podridas, si se les deja mucho tiempo, terminan pudriendo también el sistema. Si hay partidos políticos liberales corruptos, como el PP hasta Rajoy, y PSOE hasta Zapatero, y se deja que se pudran. El resultado puede ser que el liberalismo corrupto sea degradado a socialismo. Pasar de una casta corrupta dividida en varios partidos a una casta supercorrupta totalitaria, de partido único, represora de todas las libertades, esclavizando y destruyendo la economía.

No es el sistema político lo que esté peor en España, es mejorable. Lo que está funcionando mal somos nosotros, nuestra cultura, nuestra opinión pública, nuestra actitud ante los problemas.

La corrupción evidente de algunos políticos, como por ejemplo, que haya políticos abiertamente separatistas, hace que mucha gente se aleje de la política, volviéndose más pasota de los asuntos públicos de lo que sería ideal. Pero cuando la gente se implica de verdad, que ocurre porque estamos espada contra la pared, esta clase de energúmenos políticos no desmotiva, porque se entiende que la causa de que estén ahí es justamente haber pasado antes, comprando cantos de sirena de socialistos, que son charlatanes como quien regala caramelos, también es una manera de pasar de los asuntos públicos. Un sistema basado en la confianza está mal, pero tampoco hay nadie ahora mismo organizándose para llevar otro en forma de partido.

Podemos decía que hacía esto al principio, decía que era trasversal, que quería democracia ciudadana, y justamente eso era el engaño en su caso. Como vemos la clave de engañar a las masas es disfrazarse con el hábito de la solución. Simular ser como el ciudadano indignado, vestir y hablar como él, para que este se sienta identificado con el político como un igual, pese a que este es un parásito, y le apoye, sin saber que todo ha sido parte de un engaño.

Así que hasta en la solución siempre puede haber engaño, si la ciudadanía no se implica lo suficiente para detectar las incongruencias a tiempo. Puesto que la clave de engañar es disfrazarse de solución. Hay que desconfiar naturalmente de todos los políticos, especialmente de los populistas, pero yo añado, no hay que dejarse contagiar por su desmotivación por el asunto de la política.

Al día de las elecciones hay que tomar una decisión otra vez, y esa decisión tiene que ser coherente con el estado actual de las cosas.

Pese a que mucha gente les parecen todos los políticos iguales o todos los partidos iguales, eso es un planteamiento emocional, ni siquiera han pensado a fondo los pros y contras de cada partidos político, con todos sus defectos de cada uno, los datos cuando ha gobernado uno y otro. A los políticos, como a los psicópatas, se les juzga mejor desde la distancia temporal y espacial. Seguro en en la Alemania nazi casi nadie hablaba mal de Adolf Hitler, ni siquiera antes de que llegara al poder. Como en la China de Mao, nadie hablaba mal, ni antes ni durante. Lo sabemos ahora, que eran unos psicópatas asesinos y que solo les preocupaba el poder.

Ese tiempo que pasa entre que una masa cae en grandes engaños y sirve a sus causas y después se da cuenta mucho tiempo después, es un problema, especialmente con el socialismo, porque el socialismo no cree en la libertad y aspira a permanecer en el poder indefinidamente, cancelando todo atisbo de libertad por parte de las personas. No vale darse cuenta después para corregir los males del socialismo.

Y justamente por eso, justo por eso, tuvimos una guerra civil, el no tener derecho a futuro cambio de opinión fuerza a la acción violenta contra el esa clase de populismo. El socialismo, que se sufre a día de hoy en China, Cuba y Corea del Norte. Y no hay una fecha clara de que esos sistemas dejen de ser dictaduras, al contrario, parece que van a más.

No hemos vencido al comunismo, en España solo hemos vencido una batalla, y globalmente estamos perdiendo. A cámara lenta, eso sí, pero estamos perdiendo. Como una apisonadora.


Al final, de una manera u otra la efectividad de un político se traduce a beneficios materiales del ciudadano, de una manera u otra, necesariamente debe repercutir en la calidad de vida, con todas sus complejidades, hay datos que matan el relato de unos y otros, de políticos con sus cantos de sirena y de mucha gente que sin ser político, como muchos periodistas, también contribuye al mismo relato, así como muchos ciudadanos normales especialmente hombres que necesitan el reconocimiento, y está bien visto decir siempre que todos los políticos son "malos, en todas las épocas, en todos los países, con independencia de su calidad de vida, si son más o menos corruptos.

Lo que quiero decir es que hay que ir más al fondo de la cuestión, salir a veces del engaño de las emociones que tenemos que comprar, de odio o de amor, simpatía o antipatía personal, para tener un juicio mejor de las decisiones que vamos a tomar.

Unos no nos quieren dar el derecho a cambiar de opinión si los elegimos, y donde han llegado al poder lo han hecho amañando los sistemas electorales, porque no creen en la democracia ni en la libertad. No se puede equiparar a estos con los otros, los que podemos elegir, y luego podemos cambiar.

Ante esta decisión forzosa, cada proceso electoral que toca, permanecer impasible y no participar no es un comportamiento racional. Cuando se desprecia el derecho a voto lo máximo que se puede conseguir es perder el derecho a voto. Lo he advertido en más de una ocasión, no creo que esto sea solo mi visión de las cosas, es lo que siempre ha ocurrido.


Hay gente que no quiere vacunarse, los datos no le sirven, el rechazo a las vacunas o a una vacuna concreta, es emocional, como también fue emocional que el 80% de la sociedad entera de occidente y sus medios negaran la pandemia, y luego vinieran con medidas on/off, relativismo y tibieza. Nada rotundo en pro de solucionar el problema en cuanto al conocimiento, el sentido de la precaución, etc.

Las mismas emociones hacen que si uno piensa que reforzar las fronteras nacionales es racismo, cualquier cosa es racismo hoy en día, o machismo, si se pone uno a mirar lo suficiente, es un defecto de la cultura, y difícilmente se puede mejorar como sociedad ignorando que tenemos este problema como sociedad no llamando a las cosas por su nombre, si no por otro, por causas caprichosas y emocionales, y que muchas veces tienen que ver con políticos y otros ingenieros sociales, gente como George Soros y compañía, que a diferencia de la sociedad que pasa de los asuntos públicos, hay esta gente multimillonaria que destina millones a manipular la manera en como pensamos y podemos decir las cosas.

Bajando los brazos ellos salen ganando. No hay que ser un ciudadano domesticado, ni por la educación, ni por la clase política, ni por los medios de comunicación, o también redes sociales con bots, propiedad privada de los anteriores gigantes privados. Por todo esto debemos escuchar más a nuestros padres y abuelos, pese a no estar de acuerdo con ellos, siempre hay que tenerles como referente. Por lo mismo, también necesitamos defender la institución de la familia. Porque son nuestras estructuras básicas de sociedad.

Un saludo.