El mundo está mejor que nunca

Sr. una persona, no un cenutrio:

No, no hago. Lo siento. Estoy desmotivado y no creo que tengamos susficientes puntos en común para que el debete puede ser enriquecedor.

Si quiere usted, me doy por derrotado.

Un cordial saludo.

F. Rubiales

Sr. Una persona, no un cenutrio:

Estoy en desacuerdo con su tesis que coloca al poder económico por encima del político. He dedicado más de un capítulo en mi libro Políticos, los nuevos amos, a desmontar esa falsa creencia, claramente alimentada por el sistema. El poder político prevalece siempre, a la hora de la verdad. Es la máxima instancia. Son los gobiernos los que han rescatado a los bancos, no los bancos a los gobiernos, en esta crisis. Al final, quien se impone es quien posee la fuerza, que es el último argumento, y los ejercitos, policías, leyes y aparatos de propaganda son del gobierno. Cualquier bando poderoso, como el de Botín, no aguantaría un día en pie si el gobierno cuestiona su solvencia publicamente. Los ciudadanos acudirían a las ventanillas y el poder se esfumaría en un instante. Desmontar el Estado es más complejo y mucho más difícil. He comprobado hasta más allá de toda duda que esa creencia, alimentada desde el poder, es una falacia. Considere usted un último argumento: incluso si usted otorga el máximo poder al dinero, nadie tiene más que el Estado, cuya capacidad de endeudamiento es casi ilimitada. El Estado es más rico en cualquier país que el conjunto de los bancos. Además, no existe un sector más regulado y maniatado que la banca, a la que se le impide sacar cualquier producto o incrementar cualquier comisión sin que cuente con la aprobación del banco central respectivo y de otros organismos reguladores, casi siempre directamente controlados por el poder público.

No iba a intervenir en este debate, pero he visto que usted presenta su tesis como "conclusión" en su comentario número 37 y he tenido que saltar, como siempre, paradefender la verdad, que es mi única motivación.

Un cordial saludo.

F. Rubiales

una persona, no un cenutrio :

Hace muchos meses que no participo en los debates de voto en blanco, aunque entre en el blog casi a diario. Pero el debate entre usted y Rubén me toca de lleno porque soy profesional de la banca.

Tiene toda la razón Rubén. He visto a mis altos jefes temblar como monigotes ante el político y no existe otro miedo en el mundo de las finanzas que el miedo al político, que tiene todo el poder, como afirma Rubén.

Es cierto que el mundo financiero es el gran cómplice del poder político, como también lo es el mundo mediático, pero esa cercanía no es poder sino influencia, que es distinto. En la hora suprema, ante el conflicto final, se impone el poder del Estado, siempre.

Además, señor una persona, no un cenutrio, usted no aporta argumentos ante los que plantea Rubén. Simplemente dice que el poder decisivo es el financiero, hablando con una autoridad que no tiene porque no la sustenta con argumentos ni ideas.

Creo, señor, que le han dado un varapalo y usted, como buen ibérico, se niega a reconocerlo.

Sebas

Sr. Una Persona, No un Cenutrio:

No estoy de acuerdo con lo que usted dice sobre que la cúspide del sistema son los poderes financieros. Veo a banqueros en la cárcel, como Mario Conde, Javier de la Rosa y otros, pero jamás verá usted a un político de alto nivel encerrado. El autor de este blog lo aclara muy buien en su libro "Políticos, los nuevos amos", donde queda más que demostrado que lo de que el gran poder es financiero es una leyenda urbana para crédulos, forjada por los mismos políticos. ¿Quien puede ser más poderoso que el que tiene a su servicio al Ejército, la policía y las armas, que son siempre el argumento final? Pero es que tienen, además, las leyes, el presupuesto, el BOE y otros muchos recursos. Yo, que soy un medio cenutrio, con sólo el poder del BOE me atrevo a enfrentarme con Botin y toda su corte de banqueros. Me duran una mañana, justo el tiempo de publicar una ley que los destroza.

Si tuviera usted razón (que no la tiene) y el poder real fueran los banqueros, habría que detener a los políticos por dejación de funciones, ya que los hemos elegido para que ostenten el poder máximo, el delegado por el ciudadano, que es el soberano del sistema.

Pura leyenda urbana, alimentada por los políticos. Se lo garantizo. Y me extraña que un tipo con su formación se lo crea. No lo esperaba.

Cordialmente:

Rubén

Sr. Una Persona, No un Cenutrio:

Aunque su intervención 23 está escrita en clave, supongo que se refiere a los banqueros y grandes capitalistas como artífices de la crisis. Yo también creo que ahí estuvo el origen, pero no la responsabilidad, que es de los políticos. Ninguno de nosotros ha elegido nunca a un banquero para que le represente e instaure el orden y la justicia, pero sí hemos elegido a los políticos que permitieron que esos banqueros y grandes capitalistas llegaran tan lejos. Su obligación era controlarlos y evitar que se desmadraran. Los dimos todo el poder y los recursos del Estado, pero ellos (los políticos) no hicieron nada porque se sentían a gusto dentro de la busbuja, aprobando desde los órganos reguladores los bonos basuras y las hipotecas, de hipotecas, sustentadas por hipotecas basuras. Hable usted con un banquero de confianza, si puede, y le dirá que un banco no puede hacer nada, ni siquiera sacar un producto al mercado, sin el permiso del regulador, que es siempre dependiente del poder político.

Los que han fracasado ante el ciudadano son los políticos, que no han cumplido con su deber, como tampoco han cumplido con su obligación de evitar la corrupción, de defender los logros sociales, de repartir la riqueza con justicia y en tantas otras cosas. Nadie hay en el mundo más malvado que un político que no cumple y que fracasa porque es el único que tiene el mandato ciudadano para controlar el mundo y evitar las canalladas. En lugar de hacerlo, en países como España son ellos los que han contaminado al país entero, desde las administraciones, con la corrupción y el incumplimiento de la ley. Deben pagar sus deudas en 50 dias, pero no pagan ni en 600 días. Hay 450.000 empresas que han cerrado en España por culpa de la Administración, pero ellos son impunes e inmunes. Y todavía hay quienes critican al "empresariado español" antes que a los canallas que lo han aplastado, sembrando el país de parados y de pobreza. Pruebe usted a retrasarse en el pago a Hacienda y verá como le embargan y, si lo repite, hasta le multan, pero ellos (los políticos) pueden hacerlo todo. Son peores que el Sida, más malos que el cáncer. Y nosotros les permitimos que sigan adelante con sus abusos y canalladas.

¿A esto se refería usted en su mensaje críptico?

Cordialmente:

Rubén

Sr Candidolav:

Nadie aquí ha exonerado de culpa al PP. Solo decimos que hasta donde ha llegado el PSOE, en vileza, despilfarro, corrupción y destrucción de España, nunca antes nadie había llegado.

Si las cosas son como usted las describe, ¿por qué sus queridos socialistas no las han enmendado, al igual que derogaron la nueva ley de educación tras el triunfo de Zapatero?

Se sintieron tan agusto en la podredumbre heredada del PP que la mejoraron. TVE siguió endeudándose y el Estado central despilfarró a manos llenas hasta convertir a este país en uno de los más endeudados. Incrementaron la corrupción y mantuvieron el "odioso" modelo de crecimiento heredado del PP, basado en el ladrillo. Amparado en ese "despreciable" modelo, Zapatero dijo que había sobrepasado a Italia y que pronto caerían Francia y Alemania. El muy idiota... Incrementó también el paro y propagó la mentira como nunca nadie lo había hecho antes. Quiso transferir la crisis al PP, a los banqueros y a los americanos, pero lo cierto es que todos han salido de la crisis y el mundo está hoy avanzando por todas partes, menos en la España de Zapatero y en otras desgraciadas repúblicas sometidas al socialismo inepto.

Desprecio tanto a Aznar y a su política que ha tenido que llegar Zapatero para que me tape la nariz y hasta lo añore, a pesar de que fue un miserable. Pero, comparado con Zapatero, Aznar cobra dimensión humana y hasta parece un estadista, cuando en realidad fue un mediocre engreído, acomplejado y siniestro.

Creo que seguir discutiendo sobre el "tu más" es de una tontería sublime en la que no quiero participar, pero tenga usted en cuenta que el único que en este blog sale, de manera automática, como un resorte, atacando al PP cada vez que se critica al PSOE, es usted. Por algo será.

Rubén

El artículo de hoy no es portador de crítica, pero si es provocador y coloca al lector frente a una realidad que desconoce porque en España están las cosas tan mal que nos creemos que todos en el mundo viven igual. Y sin embargo, para vergüenza del PSOE y para dolor de los ciudadanos de España, es cierto que el mundo está mejor que nunca porque cientos de millones de desposeidos están accediendo a la dignidad y a ciertos niveles de prosperidad. En Europa, la crisis es ya un recuerdo, exepto en países que han sido mal gobernados, generalmente por partidos socialistas, como España, Portugal y Grecia. Hasta Irlanda parece que va cogiendo rítmo. En otros países, como Alemnia, Francia, Dinamarca, Holanda y otros, la economía crece a buen rítmo y las perspectivas son inmejorables. Los ricos de Europa han perdido todo rasgo de grandeza y quieren crecer a costa de los "pigs" del sur, sobre todo de España, cuya pobreza representa para ellos eliminar a un competidor y poder colonizar una economía devastada por el inefable Zapatero, al que ahora quieren los eurpeos porque les está liquidando a la antes competitiva España.

El eslogan de los socialistas de Zapatero de que la crisis es mundial es una mentira clamorosa. La crisis es sólo de los paises administrados por canallas y torpes. Otra de las tesis favoritas de la propaganda socilista, la que echa la culpa de la crisis a los banqueros, es también una falacia. La crisis es una consecuencia del mal gobierno. Si es de los banqueros, ¿por qué continua haciendo estragos en España y no en Alemania, Francia y otros países, donde el sistema bancario era más débil? Sencillamente porque allí han gobernado bien y aquí han despilfarrado, retrasado las reformas por miedo a perder votos, y robado a manos llenas. El otro slogan propagandístico de los mentirosos socialistas españoles es que la crisis se debe a la derecha, pero esa mentira también se desmorona porque la derecha está avanzando en toda Europa, porque los ciudadanos han descubierto que, aunque sean también corruptos, lo son menos que el socialismo y, además, saben gestionar mejor las finanzas y crear riqueza donde los socialistas la aniquilan o la roban.

Así que el artículo de hoy, conociendo el blog y a su autor, es provocador y crítico como pocos. Decir en España que el mundo va mejor que nunca es pura provocación y un torpedo en la línea de flotación de los socialistas y sus díscípulos, camuflados o descubieros, los que acusan a la derecha, los que señalan a los banqueros y los que defienden la equidistancia vil del "todos son iguales". No es así. El mundo inteligente abandona el socialismo y la crisis se queda limitada para los ladrones y los sinvergüenzas y, por supuesto, para los pueblos cobardes, como el español, que soportan la mentira institucional, el mal gobierno y la opresión.

Les digo a Candidolav, a Oyonarte y a otros prototipos del mundo equidistante y del "todos son iguales" que miren el mapa de Europa y del mundo y descubran que la crisis, hoy por hoy, es sólo un reducto del socialismo, una secuela de esa doctrina gobernante que ha institucionalizado la corrupción y que culpa a los banquieros mientras los enriquece, que hace pagar al pueblo la factura del despilfarro y que acosa a las empresas, que son las únicas que crean riqueza, mientras ampara y pelotrea a los sindicatos, que no defienden a los obreros, sino a sus élites privilegiadas y burocratizadas.

Muchos estamos hartos de tanta mentira y de tanto engaño camuflado de verborrea. Yo, como todo tipo demócrata, prefiero a un gobierno limpio y adornado con los valores cívicos, pero si es imposible encontrarlo, prefiero mil veces al que crea riqueza que al que la destruye, al que tal vez robe y oprima que al que está robando y oprimiendo, al que eligen los demócratas de todo el mudo, antes que el que está siendo derrotado en todo el mundo por sus errores ideológicos y por su afición desmedida a la rapiña.

Rubén