El buque especializado en la búsqueda de tesoros parece tener localizado los restos del naufragado buque británico "HMS Sussex", que naufragó en un paraje cercano al estrecho de Gibraltar, en aguas jurisdiccionales españolas, en 1694, con un valioso cargamento en oro y plata.
Los piratas están hoy de nuevo en el Estrecho de Gibraltar, como en el pasado, con intención de saquear, pero ahora, como corresponde a los nuevos estilos confusos y difusos de la política y la manipulación, nadie sabe a ciencia cierta lo que está ocurriendo, quién es el más pirata o quien tiene razón.
La empresa norteamericana propietaria del Odyssey afirma que tiene los permisos necesarios de los gobiernos británico y español, concretamente del Ministerio de Asuntos Exteriores. La embajada de Estados Unidos, lógicamente, apoya a la empresa norteamericana y exige que le dejen trabajar, ya que le ampara la legalidad. La Junta de Andalucía, apoyada por los colectivos ecologistas del Campo de Gibraltar, dice que las competencias son suyas y exige al barco que deje de rescatar los tesoros sumergidos. El barco, mientras tanto, atraca en el muelle de la colonia británica de Gibraltar y sale cada dia a cazar el tesoro al que dice tener derecho.
Los ciudadanos, como siempre, sorprendidos y en espera de noticias que no sabe si creerse. En fin, un galimatias en el que se mezclan la mentira, alguna verdad, la confusión, la manipulación y la piratería.
El asunto, "tipicamente español", según dicen con sarcasmo algunos medios británicos, está deteriorando la imagen de España y rememora la historia de la pirateria, en la que corsarios de diversos países, muchas veces al servicio de Inglaterra, se aprovecharon de la tradicional debilidad de España y de su incapacidad histórica para defender sus propiedades y derechos.
El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, asegura que no va a permitir un "saqueo" de un patrimonio sobre el que tiene competencias la Junta de Andalucía, en referencia a la presencia del buque norteamericano "Odyssey" a seis millas de Punta Europa, que al parecer habría hallado los restos del navío británico "HMS Sussex", que supuestamente naufragó en 1694 con un valioso cargamento en oro y plata.
Ante la insistencia de la empresa americana que ha fletado el Odyssey de que tiene todos los permisos necesarios, emitidos por el gobierno español, para efectuar el rescate de los restos, Chaves aseguró que le "extraña" que el Ministerio de Asuntos Exteriores "haya dado el beneplácito" a la empresa propietaria del "Odyssey" para trabajar en la zona, tal y como defiende esta empresa, que asegura contar con "todas" las autorizaciones.
La Embajada de Estados Unidos en España se está empleando con fuerza en la defensa de los intereses de la empresa norteamericana propietaria del barco "para que sea tratada de una manera justa, según las leyes", ha indicado el portavoz de la Embajada. En este sentido, añadió que se está en contacto con la empresa y los responsables del "Odyssey Explorer" sobre la situación que tienen con las autoridades británicas y españolas. "Velamos por sus intereses", aseveró refiriéndose al barco explorador estadounidense.
Los piratas están hoy de nuevo en el Estrecho de Gibraltar, como en el pasado, con intención de saquear, pero ahora, como corresponde a los nuevos estilos confusos y difusos de la política y la manipulación, nadie sabe a ciencia cierta lo que está ocurriendo, quién es el más pirata o quien tiene razón.
La empresa norteamericana propietaria del Odyssey afirma que tiene los permisos necesarios de los gobiernos británico y español, concretamente del Ministerio de Asuntos Exteriores. La embajada de Estados Unidos, lógicamente, apoya a la empresa norteamericana y exige que le dejen trabajar, ya que le ampara la legalidad. La Junta de Andalucía, apoyada por los colectivos ecologistas del Campo de Gibraltar, dice que las competencias son suyas y exige al barco que deje de rescatar los tesoros sumergidos. El barco, mientras tanto, atraca en el muelle de la colonia británica de Gibraltar y sale cada dia a cazar el tesoro al que dice tener derecho.
Los ciudadanos, como siempre, sorprendidos y en espera de noticias que no sabe si creerse. En fin, un galimatias en el que se mezclan la mentira, alguna verdad, la confusión, la manipulación y la piratería.
El asunto, "tipicamente español", según dicen con sarcasmo algunos medios británicos, está deteriorando la imagen de España y rememora la historia de la pirateria, en la que corsarios de diversos países, muchas veces al servicio de Inglaterra, se aprovecharon de la tradicional debilidad de España y de su incapacidad histórica para defender sus propiedades y derechos.
El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, asegura que no va a permitir un "saqueo" de un patrimonio sobre el que tiene competencias la Junta de Andalucía, en referencia a la presencia del buque norteamericano "Odyssey" a seis millas de Punta Europa, que al parecer habría hallado los restos del navío británico "HMS Sussex", que supuestamente naufragó en 1694 con un valioso cargamento en oro y plata.
Ante la insistencia de la empresa americana que ha fletado el Odyssey de que tiene todos los permisos necesarios, emitidos por el gobierno español, para efectuar el rescate de los restos, Chaves aseguró que le "extraña" que el Ministerio de Asuntos Exteriores "haya dado el beneplácito" a la empresa propietaria del "Odyssey" para trabajar en la zona, tal y como defiende esta empresa, que asegura contar con "todas" las autorizaciones.
La Embajada de Estados Unidos en España se está empleando con fuerza en la defensa de los intereses de la empresa norteamericana propietaria del barco "para que sea tratada de una manera justa, según las leyes", ha indicado el portavoz de la Embajada. En este sentido, añadió que se está en contacto con la empresa y los responsables del "Odyssey Explorer" sobre la situación que tienen con las autoridades británicas y españolas. "Velamos por sus intereses", aseveró refiriéndose al barco explorador estadounidense.