Tal como había prometido durante la campaña, Unión Progreso y Democracia (UPyD) ha registrado en el Congreso una propuesta para reformar el sistema electoral, de forma que la circunscripción electoral pase a ser la comunidad autónoma, en lugar de la provincia y que, además, exista una circunscripción única nacional. La proposición de ley, que es la primera iniciativa del partido, ha sido registrada en la Cámara Baja por el Grupo Mixto, a instancias de Rosa Díez.
La reforma tiene un rasgo sorprendente que no va a gustar a muchos electores, el de elevar hasta 400 el número de diputados, el máximo que permite la Constitución, lo que engordará todavía más la casta política y encarecerá el costo del Estado, pero racionaliza el sistema y lo hace más justo, eliminando en parte el efecto perverso actual, que permite que los votos valgan más o menos, según el lugar donde se emita.
La propuesta, además de plantear la reforma, abrirá efectivamente el debate sobre la necesidad de reformar un sistema electoral que es manifiestamente injusto y desequilibrado. Los partidos tendrán que debatirlo y se comprometerán ante los ciudadanos y la Historia con sus argumentos y votos.
La reforma tiene un rasgo sorprendente que no va a gustar a muchos electores, el de elevar hasta 400 el número de diputados, el máximo que permite la Constitución, lo que engordará todavía más la casta política y encarecerá el costo del Estado, pero racionaliza el sistema y lo hace más justo, eliminando en parte el efecto perverso actual, que permite que los votos valgan más o menos, según el lugar donde se emita.
La propuesta, además de plantear la reforma, abrirá efectivamente el debate sobre la necesidad de reformar un sistema electoral que es manifiestamente injusto y desequilibrado. Los partidos tendrán que debatirlo y se comprometerán ante los ciudadanos y la Historia con sus argumentos y votos.