Mi amigo Sebas dice que Dios ha cambiado de política y que de nuevo ha decidido golpear a los soberbios, como hizo en el pasado con Sodoma y Gomorra. Por eso acaba de inundar la afrancesada y viciosa New Orleans, por eso acaba de lanzar una docena de tornados y 36.400 rayos sobre la soberbia e insolidaria Cataluña.
Yo, sin embargo, creo que Dios sigue de vacaciones y que los avisos recientes a la depravada New Orleans y a la soberbia Cataluña han sido una pura casualidad.
Yo, sin embargo, creo que Dios sigue de vacaciones y que los avisos recientes a la depravada New Orleans y a la soberbia Cataluña han sido una pura casualidad.