Sr. Pedro Sánchez: Usted trabaja para mi, no yo para usted. Está usted confundido sobre nuestra mutua relación. Es usted el que tiene que complacerme, no yo a usted. España le ha elegido no para que nos subyugue, arruine y mienta, sino para que solucione los problemas de la nación. No soy su esclavo, sino su jefe, un ciudadano soberano al que la Constitución y la democracia definen como empleador suyo. Usted desprecia las reglas del juego democrático y ha abusado de la confianza que los dueños de la empresa España depositamos en usted. No ha sabido comportarse, ni ha gestionado bien la organización a la que todos pertenecemos, a la que usted ha arruinado y ha hecho retroceder, llenándola de injusticias y errores de liderazgo y despojándola de prestigio y peso que tenía en el concierto mundial. Es usted un fracasado y le pido que se marche. Si no lo hace, millones de accionistas de España S.A., indignados, haremos lo posible por echarle sin indemnización, alegando verdades fáciles de demostrar, como incumplimiento de los deberes de su cargo y daños irreparables a la empresa que le paga.
Su dirección de la empresa ha sido un fracaso por muchas razones, entre las que resalto las siguientes:
Siempre que puede, ha eludido el control parlamentario a su gobierno, que es preceptivo en democracia. Desprecia el control al gobierno en el Senado y dice que “Se hacen muy largas las preguntas”. Es un auténtico sátrapa al que le repele la democracia y sus controles sobre el poder. Durante la pandemia decretó dos estados de alarma que la Justicia española condenó como ilegales. En cualquier país decente y democrático, esas desautorizaciones de los máximos tribunales habrían provocado la dimisión inmediata del presidente, pero en España nos gobierna un tirano disfrazado de demócrata que ignora la democracia, las leyes y la decencia.
El periodista Eduardo Inda afirma que usted "Es un tipo de la peor ralea que uno pueda imaginar. Fue quien cometió la más vil traición conocida en un presidente en 44 años de democracia: pactar con quienes asesinaron a 856 españoles, entre ellos, 11 correligionarios suyos".
Inda se refería a su alianza con BILDU, heredera de ETA, pero la tesis de la bajeza del presidente puede aplicarse a otros de sus socios: los comunistas de Podemos, totalitarios y defensores de la ideología más asesina de la Historia, los separatistas y golpistas catalanes, llenos de odio a España, y los mercenarios vascos del PNV, dispuestos siempre a vender sus votos a quien más les pague, todos ellos unidos por el denominador común del odio a la nación española.
Sus desplazamientos innecesarios en el avión Falcón, su despilfarro, su ostentación, su endeudamiento suicida, su avaricia a la hora de cobrar impuestos abusivos, sin importarle que esos tributos alejan a las empresas, paralizan la economía y arruinan al ciudadano, demuestran la baja calidad de su liderazgo y su escasez de ética democrática.
Miente usted casi a diario, compra voluntades, subvenciona a sus amigos, margina a sus enemigos, compra periodistas y medios de comunicación para que priven al ciudadano de la verdad y oculten sus fracasos y desmanes, reparte usted con parcialidad y corrupción los fondos públicos, beneficia a los que le apoyan y emplea el dinero público, de manera obscena e ilegítima, en comprar votos y en financiar su poder.
Hay una palabra que resume perfectamente su actuación. Algunos dicen que esa palabra es "psicópata", pero yo creo que es "sátrapa", un término definido por la RAE como "Persona que gobierna despótica y arbitrariamente y que hace ostentación de su poder", una definición que le viene a usted como anillo al dedo.
Millones de españoles no entendemos cómo los países democráticos de nuestro entorno europeo no le han presionado para que libere a los españoles de su maldito yugo y deje de causar daño a un país miembro de la Unión. En realidad no lo entendemos, salvo que Europa, al igual que sus amigos catalanes, vascos y comunistas, deseen una España débil, arruinada, siempre de rodillas, dependiente e incapaz de competir con sus industrias y servicios.
Para mi, usted es un auténtico enemigo de España.
Francisco Rubiales
.
Su dirección de la empresa ha sido un fracaso por muchas razones, entre las que resalto las siguientes:
Siempre que puede, ha eludido el control parlamentario a su gobierno, que es preceptivo en democracia. Desprecia el control al gobierno en el Senado y dice que “Se hacen muy largas las preguntas”. Es un auténtico sátrapa al que le repele la democracia y sus controles sobre el poder. Durante la pandemia decretó dos estados de alarma que la Justicia española condenó como ilegales. En cualquier país decente y democrático, esas desautorizaciones de los máximos tribunales habrían provocado la dimisión inmediata del presidente, pero en España nos gobierna un tirano disfrazado de demócrata que ignora la democracia, las leyes y la decencia.
El periodista Eduardo Inda afirma que usted "Es un tipo de la peor ralea que uno pueda imaginar. Fue quien cometió la más vil traición conocida en un presidente en 44 años de democracia: pactar con quienes asesinaron a 856 españoles, entre ellos, 11 correligionarios suyos".
Inda se refería a su alianza con BILDU, heredera de ETA, pero la tesis de la bajeza del presidente puede aplicarse a otros de sus socios: los comunistas de Podemos, totalitarios y defensores de la ideología más asesina de la Historia, los separatistas y golpistas catalanes, llenos de odio a España, y los mercenarios vascos del PNV, dispuestos siempre a vender sus votos a quien más les pague, todos ellos unidos por el denominador común del odio a la nación española.
Sus desplazamientos innecesarios en el avión Falcón, su despilfarro, su ostentación, su endeudamiento suicida, su avaricia a la hora de cobrar impuestos abusivos, sin importarle que esos tributos alejan a las empresas, paralizan la economía y arruinan al ciudadano, demuestran la baja calidad de su liderazgo y su escasez de ética democrática.
Miente usted casi a diario, compra voluntades, subvenciona a sus amigos, margina a sus enemigos, compra periodistas y medios de comunicación para que priven al ciudadano de la verdad y oculten sus fracasos y desmanes, reparte usted con parcialidad y corrupción los fondos públicos, beneficia a los que le apoyan y emplea el dinero público, de manera obscena e ilegítima, en comprar votos y en financiar su poder.
Hay una palabra que resume perfectamente su actuación. Algunos dicen que esa palabra es "psicópata", pero yo creo que es "sátrapa", un término definido por la RAE como "Persona que gobierna despótica y arbitrariamente y que hace ostentación de su poder", una definición que le viene a usted como anillo al dedo.
Millones de españoles no entendemos cómo los países democráticos de nuestro entorno europeo no le han presionado para que libere a los españoles de su maldito yugo y deje de causar daño a un país miembro de la Unión. En realidad no lo entendemos, salvo que Europa, al igual que sus amigos catalanes, vascos y comunistas, deseen una España débil, arruinada, siempre de rodillas, dependiente e incapaz de competir con sus industrias y servicios.
Para mi, usted es un auténtico enemigo de España.
Francisco Rubiales
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