Las dos únicas opciones reales en la España política: socialismo comunistoide de Sánchez y la mano dura de VOX contra corruptos, parásitos y miserables en el poder
VOX está renaciendo como consecuencia de la frustración creciente de los españoles ante los grandes partidos políticos. La decepción ante el PP y el PSOE se traduce directamente en votos para VOX, que se ha convertido en la única alternativa real al viejo poder en la política española.
Las campañas lanzadas por el sanchismo, Podemos y la vieja derecha del PP para estigmatizar a VOX como un partido peligroso, anticonstitucional y antieuropeo, se están desmoronando y ya han perdido su eficacia. La gente las ve ya como reflejo del miedo a perder el poder que VOX provoca en aquellos que hasta ahora han monopolizado el gobierno de España.
La llegada al poder en Italia de Meloni, también acusada de ser la "extrema derecha" por la izquierda y los viejos partidos italianos, sin que se produzca la vaticinada tragedia y con notables éxitos iniciales, también está ayudando a VOX, partido al que millones de españoles ya miran como alternativa real a la vieja y corrompida política española.
Ese renacer de VOX lo conocen bien los expertos, aunque las encuestas todavía no lo reflejen en su verdadera dimensión. Pero lo sabe, en especial, el Partido Popular, lleno de miedo, cuyo líder, Alberto Núñez Feijóo, ha cometido el error de decir públicamente que prefiere pactar con el PSOE que con VOX, una afirmación que podría costarle la Moncloa.
El acoso a VOX, acusado por los demás partidos de ser una "extrema derecha" peligrosa, fortalece al acosado y debilita a los acosadores.
VOX, ante los errores y fracasos del PSOE y del PP y frente a desastres como los de la ley del "Sí es sí", que ha rebajado las penas a más de 300 violadores y pederastas y a excarcelado a una treintena de peligrosos delincuentes sexuales, como el asalto a la Justicia de Pedro Sánchez y la supresión del delito de sedición, crece como la espuma y reafirma su imagen de ser la verdadera y única alternativa a la actual política española, llena de corrupción y desvergüenza.
La blandura del PP frente a los socialistas también fortalece a VOX, del mismo modo que lo agrandan los abusos del PSOE y la miserable actitud de los nacionalistas e independentistas vascos y catalanes.
VOX nació como protesta ante el fracaso de los grandes partidos y la suciedad de la política española, pero hoy es ya un partido "atrapatodo", que se beneficia de los errores ajenos y que ya funciona como "la gran esperanza" de millones de españoles demócratas, decentes e indignados.
Las encuestas no recogen por completo ese renacimiento de VOX porque sus partidarios y simpatizantes prefieren ocultar a los encuestadores su verdadera intención de votarle. Eso hace que sus votos reales, si se abrieran hoy las urnas, pudieran llegar a ser casi el doble del reflejado.
La afirmación de Feijóo de que no contempla pacto alguno con VOX, pero "no descarta pactar con el PSOE" ha sido tan decepcionante para millones de votantes de la derecha española que ha engordado intensamente a VOX y ha convertido a ese partido en el refugio de los votos de los demócratas, los indignados y los que aman a España.
Entre el pusilánime Feijóo y el miserable y mentiroso Pedro Sánchez, con la inestimable ayuda de un Podemos cuyos líderes se han convertido ya en casta arrogante, y la valiosa colaboración de los amigos del terrorismo de BILDU y los golpistas catalanes, provocan toneladas de rechazo e indignación que pueden convertir a VOX en el gran triunfador sorpresa de las próximas elecciones generales.
Ya lo varemos.
Francisco Rubiales
Las campañas lanzadas por el sanchismo, Podemos y la vieja derecha del PP para estigmatizar a VOX como un partido peligroso, anticonstitucional y antieuropeo, se están desmoronando y ya han perdido su eficacia. La gente las ve ya como reflejo del miedo a perder el poder que VOX provoca en aquellos que hasta ahora han monopolizado el gobierno de España.
La llegada al poder en Italia de Meloni, también acusada de ser la "extrema derecha" por la izquierda y los viejos partidos italianos, sin que se produzca la vaticinada tragedia y con notables éxitos iniciales, también está ayudando a VOX, partido al que millones de españoles ya miran como alternativa real a la vieja y corrompida política española.
Ese renacer de VOX lo conocen bien los expertos, aunque las encuestas todavía no lo reflejen en su verdadera dimensión. Pero lo sabe, en especial, el Partido Popular, lleno de miedo, cuyo líder, Alberto Núñez Feijóo, ha cometido el error de decir públicamente que prefiere pactar con el PSOE que con VOX, una afirmación que podría costarle la Moncloa.
El acoso a VOX, acusado por los demás partidos de ser una "extrema derecha" peligrosa, fortalece al acosado y debilita a los acosadores.
VOX, ante los errores y fracasos del PSOE y del PP y frente a desastres como los de la ley del "Sí es sí", que ha rebajado las penas a más de 300 violadores y pederastas y a excarcelado a una treintena de peligrosos delincuentes sexuales, como el asalto a la Justicia de Pedro Sánchez y la supresión del delito de sedición, crece como la espuma y reafirma su imagen de ser la verdadera y única alternativa a la actual política española, llena de corrupción y desvergüenza.
La blandura del PP frente a los socialistas también fortalece a VOX, del mismo modo que lo agrandan los abusos del PSOE y la miserable actitud de los nacionalistas e independentistas vascos y catalanes.
VOX nació como protesta ante el fracaso de los grandes partidos y la suciedad de la política española, pero hoy es ya un partido "atrapatodo", que se beneficia de los errores ajenos y que ya funciona como "la gran esperanza" de millones de españoles demócratas, decentes e indignados.
Las encuestas no recogen por completo ese renacimiento de VOX porque sus partidarios y simpatizantes prefieren ocultar a los encuestadores su verdadera intención de votarle. Eso hace que sus votos reales, si se abrieran hoy las urnas, pudieran llegar a ser casi el doble del reflejado.
La afirmación de Feijóo de que no contempla pacto alguno con VOX, pero "no descarta pactar con el PSOE" ha sido tan decepcionante para millones de votantes de la derecha española que ha engordado intensamente a VOX y ha convertido a ese partido en el refugio de los votos de los demócratas, los indignados y los que aman a España.
Entre el pusilánime Feijóo y el miserable y mentiroso Pedro Sánchez, con la inestimable ayuda de un Podemos cuyos líderes se han convertido ya en casta arrogante, y la valiosa colaboración de los amigos del terrorismo de BILDU y los golpistas catalanes, provocan toneladas de rechazo e indignación que pueden convertir a VOX en el gran triunfador sorpresa de las próximas elecciones generales.
Ya lo varemos.
Francisco Rubiales