La multinacional coreana Sansung prepara un nuevo televisor dotado de un sofisticado sistema, programable por el usuario y capaz de bloquear la imagen de cualquier político o personaje público que resulte molesto.
Eso significa que los españoles podrán impedir que personajes como Felipe VI, Rajoy, Pablo Iglesias, Pedro Sánchez, Cospedal y hasta una lista de cien políticos puedan penetrar impunemente en nuestros hogares para amargarnos las veladas.
El PP y el PSOE, alarmados ante lo que ese avance representa de libertad y control para el ciudadano, presentarán una demanda contra la multinacional coreana
Para muchos observadores y expertos, el invento "discriminador" de Sansung representa un paso adelante de gran importancia en la libertad de los humanos y el principio de la liberación política ciudadana frente a la intromisión de los partidos y los políticos en la vida privada. También lo consideran como el germen de una nueva política, mucho mas democrática y decente, donde los líderes tendrán que hacer méritos para no ser censurados por los ciudadanos en sus hogares, que es donde se cuecen las adhesiones y las intenciones de voto.
El invento es también una sentencia de muerte para las televisiones sometidas al poder y toda una revolución en la publicidad televisiva, ya que el discriminador también puede programarse para bloquear determinadas marcas.
Eso significa que los españoles podrán impedir que personajes como Felipe VI, Rajoy, Pablo Iglesias, Pedro Sánchez, Cospedal y hasta una lista de cien políticos puedan penetrar impunemente en nuestros hogares para amargarnos las veladas.
El PP y el PSOE, alarmados ante lo que ese avance representa de libertad y control para el ciudadano, presentarán una demanda contra la multinacional coreana
Para muchos observadores y expertos, el invento "discriminador" de Sansung representa un paso adelante de gran importancia en la libertad de los humanos y el principio de la liberación política ciudadana frente a la intromisión de los partidos y los políticos en la vida privada. También lo consideran como el germen de una nueva política, mucho mas democrática y decente, donde los líderes tendrán que hacer méritos para no ser censurados por los ciudadanos en sus hogares, que es donde se cuecen las adhesiones y las intenciones de voto.
El invento es también una sentencia de muerte para las televisiones sometidas al poder y toda una revolución en la publicidad televisiva, ya que el discriminador también puede programarse para bloquear determinadas marcas.