Colaboraciones

ROSA AGUILAR, SÍNTOMA DE UNA DEMOCRACIA ENFERMA



La "escapada" de Rosa Aguilar de Córdoba es una bofetada a la decencia democrática y un símbolo del desprecio de los políticos a los ciudadanos y a las instituciones. No trabajan para los ciudadanos, ni para las instituciones, ni para el bien común, sino para ellos mismos, más, incluso, que para sus respectivos partidos. ¿No apreciais un siniestro paralelismo entre la escapada de Rosa Aguilar y la huída de Manuel Chaves? En uno y otro caso hay abandono de los ciudadanos, falta de respeto a las reglas y a las instituciones y olor a democracia podrida y a partitocracia en auge.

Publicamos hoy un interesante articulo de "Otro" sobre el tema.
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La marcha de Rosa Aguilar a la Junta de Andalucía ha dejado patentes muchos de los males de la enferma democracia española. Lo grave del "caso Aguilar" no es que alguien deje un partido político para unirse a otro. Eso es muy natural y muy sano en democracia: los partidos cambian y las personas también. Lo que es vergonzoso es que Rosa Aguilar ha faltado gravemente a su compromiso con los cordobeses que la eligieron como alcaldesa, abandonándolos a mitad de legislatura. Esto demuestra que los políticos españoles viven de espaldas al pueblo, y lo que es peor, a nadie parece importarle.

Desde las filas de sus antiguos compañeros de IU, le han llovido numerosas críticas por "desleal" y por pasarse al enemigo. Sólo un ex-político (retirado desde hace años) como Julio Anguita pone el dedo en la verdadera llaga y critica a la ex-alcaldesa por su falta de lealtad hacia los cordobeses, quienes la eligieron hace dos años para que gobernara la ciudad durante cuatro. Y al resto de IU, no le importan los cordobeses?

El PSOE, que ha conseguido tentar a la Eva de Córdoba usando como cebo la manzana de la Consejería de Obras Públicas (la que mueve más dinero y maletines de Andalucía), pide respeto a su "opción personal". Sin embargo, el PSOE no pide respeto para los cordobeses, a quiénes Rosa Aguilar se ha pasado por la "puerta del puente". El PSOE se olvida de que Rosa Aguilar no es una persona privada, cuyas decisiones merecen todo el respeto; se olvida de que Rosa Aguilar es alcaldesa de Córdoba, y se debe en primer lugar a sus cordobeses. Cuando La Sra. Aguilar deja la alcaldía antes de tiempo está demostrando que le importa más su propio beneficio que el de aquellos a quienes dice representar.

El PP, mientras tanto, dice que pasará el caso por la Mesa Antitransfugismo. El PP sólo parece estar interesado en que los miembros de los partidos políticos acepten la jerarquía como soldados, fieles al partido como a un equipo de fútbol, consagrando la oligarquía de partidos por encima de todo. El PP no se preocupa por la verdadera DEMOcracia. Acaso ha propuesto el PP una ley por la cual un político no puede dejar un cargo electo para aceptar otro? Acaso se ha preocupado el PP por los ciudadanos? No, el PP sólo se preocupa por acabar con el transfuguismo, por fortalecer la PARTITOcracia.

Y mientras tanto, ¿qué hacen los cordobeses? ¿Cuándo van a pedir cuentas a esta señora que los acaba de abandonar, demostrando lo poco que le importan? "

Otro

   
Sábado, 25 de Abril 2009
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