Es evidente que el sistema político inaugurado con la Constitución de 1978 ha caducado en un ambiente de ira ciudadana contra una casta política deplorable y fracasada, que ha convertido España en un país casi fallido. La deuda pública se ha disparado y tendrán que pagarla nuestros nietos y bisnietos, la monarquía, que tenía el deber de ser ejemplar, está bajo sospecha y acumula rechazo, los múltiples casos de corrupción, como los EREs, de la Junta de Andalucía, caso Bárcenas y tantos otros han liquidado la poca fe que los ciudadanos tenían en sus Instituciones. La indignación de los ciudadanos con la casta política es brutal.
Salimos de una dictadura que asesinó hasta en sus últimos días, para entrar en una dictablanda sin dignidad y podrida por la corrupción. La Historia que empezó aquel aciago 18 de julio de 1936 aún cabalga y nos patea. Nuestros políticos actuales, de derecha o de izquierda, son herederos directos del franquismo y comparten con aquel régimen su desprecio a la verdadera democracia. Hora va siendo de que paremos en seco a esos apocalíptcos caballos desbocados y desmontemos a sus perversos jinetes.
La derecha española, nuevamente en el poder, es la de siempre y no ha evolucionado. Sus tics los conserva inamovibles por los siglos. mientras la izquierda también mantiene intactos sus peores instintos, aquellos que la empujan hacia la destrucción de España y al ansia desmedida de demagogia, engaño, poder sin servicio y privilegios.
Es difícil encontrar en el mundo evidencias tan sólidas de fracaso como las que ofrece la clase política española. El mundo que han construido, después de tres décadas y media de "democracia" es sobrecogedor: España ha retrocedido en industria, educación, renta per cápita con respecto a la media europea y solvencia económica, mientras el país se ha endeudado mas, ha multiplicado por mas de 100 el numero de los políticos y de los que viven ordeñando el Estado y ocupa los primeros puestos en el ranking mundial del desempleo, el avance de la pobreza, la desigualdad, la injusticia, la corrupción, el fracaso escolar, la baja calidad de la enseñanza, el blanqueo de dinero, el tráfico y consumo de drogas, el alcoholismo, la prostitución y decenas de vicios y lacras, todos ellos aportados por una democracia falsa cuyos dirigentes se han convertido en un mal ejemplo para los jóvenes y en una vergüenza para los que aspiran a un mundo honrado y de valores.
Los políticos ha confirmado el refrán "prometer hasta el meter, y despues de lo metío, olvidar lo prometío". No hay que culpar tanto a los que votaron al PSOE por haber apadrinado a corruptos y sinvergüenzas, y a los votantes del PP porque fueron engañados con un programa estrella que luego de las elecciones, fraudulentamente, han arrinconado, como al estafador que prometió para luego incumplir. No tiene tanta culpa el elector, como el elegido, por ser mentiroso.
Abrumados por el rechazo ciudadano y con miedo a una rebelión cívica a gran escala, los políticos se rodean de policías bien armados y adiestrados porque hace tiempo que saben que el enemigo ya no es, como en el pasado, otro país agresor, sino el propio pueblo, cansado de abusos e injusticias. Los políticos se protegen ya unos a otros y los dirigentes del PP están tomando medidas para evitar ser abucheados en la vía pública. Sus estrategas y asesores les dicen que, para evitar los abucheos y las posibles agresiones de ciudadanos estafados o víctimas de abusos e injusticias, deben salir a la calle en grupo. En la sede del PP existe gran preocupación por las tensas escenas que pueden sufrir sus dirigentes en las calles. En el partido son conscientes de que algunos sectores de la sociedad están seriamente enfadados con algunas decisiones tomadas, de ahí que estén intentando a toda costa evitar insultos e improperios. La derogación de la doctrina Parot y la futura puesta en libertad de casi un centenar de etarras provocará mucha tensión en las calles, que se sumará a una indignación permanente por rechazo popular al vertedero que los políticos han fabricado en la sociedad española.
Cada día son mas los políticos que abandonan sus despachos y salen a la calle junto con otros compañeros, por miedo a ser insultados si van solos. En la manifestación del pasado sábado en Madrid, organizada por las víctimas del terrorismo, los dirigentes del PP presentes estaban agrupados por miedo, a pesar de los cual fueron duramente abucheados.
La parte mas consciente y digna del pueblo empieza a vengarse y les espera en las urnas para hacerles morder el polvo con una rechazo brutal a la partitocracia corrupta e inepta que ha gobernado España desde 1975.
Salimos de una dictadura que asesinó hasta en sus últimos días, para entrar en una dictablanda sin dignidad y podrida por la corrupción. La Historia que empezó aquel aciago 18 de julio de 1936 aún cabalga y nos patea. Nuestros políticos actuales, de derecha o de izquierda, son herederos directos del franquismo y comparten con aquel régimen su desprecio a la verdadera democracia. Hora va siendo de que paremos en seco a esos apocalíptcos caballos desbocados y desmontemos a sus perversos jinetes.
La derecha española, nuevamente en el poder, es la de siempre y no ha evolucionado. Sus tics los conserva inamovibles por los siglos. mientras la izquierda también mantiene intactos sus peores instintos, aquellos que la empujan hacia la destrucción de España y al ansia desmedida de demagogia, engaño, poder sin servicio y privilegios.
Es difícil encontrar en el mundo evidencias tan sólidas de fracaso como las que ofrece la clase política española. El mundo que han construido, después de tres décadas y media de "democracia" es sobrecogedor: España ha retrocedido en industria, educación, renta per cápita con respecto a la media europea y solvencia económica, mientras el país se ha endeudado mas, ha multiplicado por mas de 100 el numero de los políticos y de los que viven ordeñando el Estado y ocupa los primeros puestos en el ranking mundial del desempleo, el avance de la pobreza, la desigualdad, la injusticia, la corrupción, el fracaso escolar, la baja calidad de la enseñanza, el blanqueo de dinero, el tráfico y consumo de drogas, el alcoholismo, la prostitución y decenas de vicios y lacras, todos ellos aportados por una democracia falsa cuyos dirigentes se han convertido en un mal ejemplo para los jóvenes y en una vergüenza para los que aspiran a un mundo honrado y de valores.
Los políticos ha confirmado el refrán "prometer hasta el meter, y despues de lo metío, olvidar lo prometío". No hay que culpar tanto a los que votaron al PSOE por haber apadrinado a corruptos y sinvergüenzas, y a los votantes del PP porque fueron engañados con un programa estrella que luego de las elecciones, fraudulentamente, han arrinconado, como al estafador que prometió para luego incumplir. No tiene tanta culpa el elector, como el elegido, por ser mentiroso.
Abrumados por el rechazo ciudadano y con miedo a una rebelión cívica a gran escala, los políticos se rodean de policías bien armados y adiestrados porque hace tiempo que saben que el enemigo ya no es, como en el pasado, otro país agresor, sino el propio pueblo, cansado de abusos e injusticias. Los políticos se protegen ya unos a otros y los dirigentes del PP están tomando medidas para evitar ser abucheados en la vía pública. Sus estrategas y asesores les dicen que, para evitar los abucheos y las posibles agresiones de ciudadanos estafados o víctimas de abusos e injusticias, deben salir a la calle en grupo. En la sede del PP existe gran preocupación por las tensas escenas que pueden sufrir sus dirigentes en las calles. En el partido son conscientes de que algunos sectores de la sociedad están seriamente enfadados con algunas decisiones tomadas, de ahí que estén intentando a toda costa evitar insultos e improperios. La derogación de la doctrina Parot y la futura puesta en libertad de casi un centenar de etarras provocará mucha tensión en las calles, que se sumará a una indignación permanente por rechazo popular al vertedero que los políticos han fabricado en la sociedad española.
Cada día son mas los políticos que abandonan sus despachos y salen a la calle junto con otros compañeros, por miedo a ser insultados si van solos. En la manifestación del pasado sábado en Madrid, organizada por las víctimas del terrorismo, los dirigentes del PP presentes estaban agrupados por miedo, a pesar de los cual fueron duramente abucheados.
La parte mas consciente y digna del pueblo empieza a vengarse y les espera en las urnas para hacerles morder el polvo con una rechazo brutal a la partitocracia corrupta e inepta que ha gobernado España desde 1975.