La llamada telefónica del "Grupo Risa", de la cadena COPE, a Evo Morales, suplantando ( magistralmente al presidente del gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, constituye para Voto en Blanco una mala práctica periodística y una vergüenza para la profesión de informadores que desempeñamos.
Hemos sentido vergüenza en Voto en Blanco al oir como se suplantaba la persona del jefe del gobierno de España y cómo el flamante presidente de Bolivía se abría al diálogo, confiado y de buena fe.
Al margen de las implicaciones diplomáticas y de la situación de ridículo en la que se ha colocado irrespetuosamente al mandatario boliviano, hay en estos momentos muchos periodistas españoles avergonzados por lo ocurrido, entre ellos muchos que, como los que redactamos Voto en Blanco, solemos ser críticos con Zapatero.
Sin embargo, lo ocurrido va más alla de la crítica y produce bochorno profesional.
Hemos sentido vergüenza en Voto en Blanco al oir como se suplantaba la persona del jefe del gobierno de España y cómo el flamante presidente de Bolivía se abría al diálogo, confiado y de buena fe.
Al margen de las implicaciones diplomáticas y de la situación de ridículo en la que se ha colocado irrespetuosamente al mandatario boliviano, hay en estos momentos muchos periodistas españoles avergonzados por lo ocurrido, entre ellos muchos que, como los que redactamos Voto en Blanco, solemos ser críticos con Zapatero.
Sin embargo, lo ocurrido va más alla de la crítica y produce bochorno profesional.