Los cuatro jinetes del Apocalipsis en España: PSOE radicalizado, comunismo de Podemos, nacionalismo del odio y los pro etarras
Los locos y felices años 20 del pasado siglo XX sirvieron como caldo de cultivo donde crecieran monstruos y dramas que batieron todos los records históricos en guerras sangrientas, crímenes, asesinatos, exterminios y ruina económica. Detrás de las orquestas y el baile, del charlestón, del recién inaugurado cine y de la frivoldad alegre estaban germinando la gran depresión, el nacionalismo, el estalinismo, el fascismo, el nazismo, la Guerra Civil española y la II Guerra Mundial.
Muchos perciben hoy las mismas amenazas, el todo el mundo y especialmente en España, donde de nuevo parece que somos la proa de las desgracias. Un extraño y malévolo personaje llamado Pedro Sánchez, osado y sin escrúpulos, nos gobierna provisionalmente y está a punto de consolidarse como presidente, tras haber domesticado al socialismo español, transformándolo en un partido que odia a España y a sus leyes, y reeditando el cóctel más miserable y letal de la Historia Moderna de España, el Frente Popular, que fue preludio de la guerra civil, integrado por la parte más brutal, desleal y enemiga de España: socialistas y comunistas, unidos a nacionalistas llenos de deseos de independencia, ánimo de romper España y furia golpista, desde el odio y el rencor.
En el mundo actual, detrás del crecimiento acentuado, del consumo, la expansión del comercio y los avances tecnológicos, se alzan amenazantes el deterioro de las democracias, la baja calidad del liderazgo, el desencanto de los pueblos, la fuerza sorprendente del terrorismo y la insurgencia civil, el resurgir de las tiranías y la destrucción de lo que existe sin que exista nada sólido que lo sustituya, todo lo cual se traduce en un vacío ético y vital de alto voltaje y enorme peligrosidad.
Para desgracia de España, el "loco Sánchez", uno de los más peligrosos agentes del pervertido nuevo orden, está a punto de ganar su batalla, después de haber vendido España a sus enemigos, a cambio del apoyo a su contubernio.
Francisco Rubiales
Muchos perciben hoy las mismas amenazas, el todo el mundo y especialmente en España, donde de nuevo parece que somos la proa de las desgracias. Un extraño y malévolo personaje llamado Pedro Sánchez, osado y sin escrúpulos, nos gobierna provisionalmente y está a punto de consolidarse como presidente, tras haber domesticado al socialismo español, transformándolo en un partido que odia a España y a sus leyes, y reeditando el cóctel más miserable y letal de la Historia Moderna de España, el Frente Popular, que fue preludio de la guerra civil, integrado por la parte más brutal, desleal y enemiga de España: socialistas y comunistas, unidos a nacionalistas llenos de deseos de independencia, ánimo de romper España y furia golpista, desde el odio y el rencor.
En el mundo actual, detrás del crecimiento acentuado, del consumo, la expansión del comercio y los avances tecnológicos, se alzan amenazantes el deterioro de las democracias, la baja calidad del liderazgo, el desencanto de los pueblos, la fuerza sorprendente del terrorismo y la insurgencia civil, el resurgir de las tiranías y la destrucción de lo que existe sin que exista nada sólido que lo sustituya, todo lo cual se traduce en un vacío ético y vital de alto voltaje y enorme peligrosidad.
Para desgracia de España, el "loco Sánchez", uno de los más peligrosos agentes del pervertido nuevo orden, está a punto de ganar su batalla, después de haber vendido España a sus enemigos, a cambio del apoyo a su contubernio.
Francisco Rubiales