La lucha por descubrir los secretos sucios del pasado socialista andaluz ya ha comenzado. El partido popular estudia denunciar a la Junta ante la Justicia por haber destruido en los últimos días muchos sacos de documentos en Granada. El descubrimiento de la destrucción de documentos de la Junta en Granada se debe a denuncias de funcionarios. En el ámbito privado, muchos políticos de los partidos que han relevado a los socialistas en el poder admiten que están ya tocando a funcionarios para que revelen irregularidades y delitos cometidos por los antiguos dueños del poder.
En muchos países, la figura del "arrepentido", al que se le permite reducir la pena que le corresponde por contribuir a esclarecer delitos ocultos, es utilizada para combatir la impunidad y extender el brazo de la justicia. El premio al arrepentido" se va a convertir en el gran recurso del nuevo gobierno andaluz, que preside Juan Manuel Moreno Bonilla para romper el muro de silencio impuesto por el socialismo y descubrir las muchas irregularidades, abusos y delitos cometidos por el PSOE y sus aliados en sus casi cuatro décadas de poder.
Ese recurso ha sido utilizado con éxito por muchos países para liquidar mafias y descubrir la porquería que sus autores querían mantener sepultada.
En Andalucía, donde el PSOE ha intentado siempre sellar las bocas con silencio para ocultar sus prácticas de dudosa legalidad, ante la destrucción de pruebas y documentos realizada por el gobierno provisional de Susana Díaz, sólo la labor de los arrepentidos, junto con la de los funcionarios con conciencia cívica, permitirán sacar a flote las toneladas de suciedad que han sido cuidadosamente ocultadas para no dejar rastro alguno de los abusos y delitos cometidos por el poder, entre los que abundan contratos públicos amañados, subvenciones concedidas de manera arbitraria, colocación a dedo de miles de enchufados, familiares y amigos del poder, trato preferencial a empresas afines, compra de voluntades, manipulaciones, acosos, teléfonos presuntamente pinchados sin intervención judicial, listas negras de adversarios del poder, instituciones y empresas fantasmas, cuentas amañadas, cobro de comisiones, robos directos y otros cientos de presuntos abusos y arbitrariedades, entre los que existen no pocos delitos tipificados en el extenso ámbito de la corrupción.
La Fiscalía española tiene una amplia experiencia en cerrar tratos con los acusados que deciden colaborar con la justicia, a los que se les rebajaron las penas a cambio de que declaren, un recurso utilizado con éxito en la lucha antiterrorista, en el combate contra el delito común y en el juicio de los grandes escándalos. En el ámbito de la política se ha utilizado poco hasta ahora, pero en Andalucía existen precedentes muy sólidos de grandes escándalos descubiertos gracias a las declaraciones de implicados, como ocurrió con los ERES delictivos, con el robo del dinero destinado a la formación y en otros muchos casos.
La lucha por desvelar los secretos del pasado en Andalucía será apasionante y llenará las salas de los tribunales y muchas portadas y espacios en los telediarios, probablemente durante años, pues el descubrimiento de la suciedad escondida es una de las claves para que el nuevo poder se asiente y fortalezca su gobierno.
En este capítulo de la colaboración de los arrepentidos, el papel de VOX va a ser decisivo, ya que muchos funcionarios marginados y descontentos de la Junta de Andalucía se están incorporando a VOX como militantes.
Francisco Rubiales
En muchos países, la figura del "arrepentido", al que se le permite reducir la pena que le corresponde por contribuir a esclarecer delitos ocultos, es utilizada para combatir la impunidad y extender el brazo de la justicia. El premio al arrepentido" se va a convertir en el gran recurso del nuevo gobierno andaluz, que preside Juan Manuel Moreno Bonilla para romper el muro de silencio impuesto por el socialismo y descubrir las muchas irregularidades, abusos y delitos cometidos por el PSOE y sus aliados en sus casi cuatro décadas de poder.
Ese recurso ha sido utilizado con éxito por muchos países para liquidar mafias y descubrir la porquería que sus autores querían mantener sepultada.
En Andalucía, donde el PSOE ha intentado siempre sellar las bocas con silencio para ocultar sus prácticas de dudosa legalidad, ante la destrucción de pruebas y documentos realizada por el gobierno provisional de Susana Díaz, sólo la labor de los arrepentidos, junto con la de los funcionarios con conciencia cívica, permitirán sacar a flote las toneladas de suciedad que han sido cuidadosamente ocultadas para no dejar rastro alguno de los abusos y delitos cometidos por el poder, entre los que abundan contratos públicos amañados, subvenciones concedidas de manera arbitraria, colocación a dedo de miles de enchufados, familiares y amigos del poder, trato preferencial a empresas afines, compra de voluntades, manipulaciones, acosos, teléfonos presuntamente pinchados sin intervención judicial, listas negras de adversarios del poder, instituciones y empresas fantasmas, cuentas amañadas, cobro de comisiones, robos directos y otros cientos de presuntos abusos y arbitrariedades, entre los que existen no pocos delitos tipificados en el extenso ámbito de la corrupción.
La Fiscalía española tiene una amplia experiencia en cerrar tratos con los acusados que deciden colaborar con la justicia, a los que se les rebajaron las penas a cambio de que declaren, un recurso utilizado con éxito en la lucha antiterrorista, en el combate contra el delito común y en el juicio de los grandes escándalos. En el ámbito de la política se ha utilizado poco hasta ahora, pero en Andalucía existen precedentes muy sólidos de grandes escándalos descubiertos gracias a las declaraciones de implicados, como ocurrió con los ERES delictivos, con el robo del dinero destinado a la formación y en otros muchos casos.
La lucha por desvelar los secretos del pasado en Andalucía será apasionante y llenará las salas de los tribunales y muchas portadas y espacios en los telediarios, probablemente durante años, pues el descubrimiento de la suciedad escondida es una de las claves para que el nuevo poder se asiente y fortalezca su gobierno.
En este capítulo de la colaboración de los arrepentidos, el papel de VOX va a ser decisivo, ya que muchos funcionarios marginados y descontentos de la Junta de Andalucía se están incorporando a VOX como militantes.
Francisco Rubiales