La cobardía del gobierno de España ante los retos del Barcelona Fútbol Club

LA SUSTITUTA

El virus del nacionalismo, tiene la particularidad de no ser mutante. El catalán que al nacer queda infectado no hay cóctel de retrovirales que lo enmiende. Son casos perdidos. . El virus del nacionalismo produce ceguera, sordera y bloquea las sinapsis neuronales. Y no solo a los que actúan de políticos, sino allegados.

Tenemos el caso de la señora Ferrusola, quintaesencia del catalanismo retrógrado, provinciano, hortera y cateto, que aun llevando un apellido valenciano-mallorquín, se trasga las vestiduras en un medio de comunicación porque el Presidente de la Generalidad se llama Montilla, es andaluz, lleva un apellido castellano y sacrilegio de todos los sacrilegios, no habla bien el catalán. Ante estos horrores, la señora Sustituta se encuentra muy contrariada. (Número de marzo de la revista 'Los Nuestros. La Radio Escrita', del grupo Teletaxi)

Cuando se llega a cierta edad, nuestros allegados deben cuidar de lo que decimos, especialmente si hay una alcachofa delante de nuestras narices.

Ahora que Carod Rovira, paladín del catalanismo, logotipo del Made in Catalunya, el Josep Lluis de aquí y en la China, el bufón de la corona de espinas, está aparcado en el desván de los “psa” ( Por si acaso) aparece la señora Ferusola a sustituirle, creando enojo, menospreciando a otros españoles por su apellido y origen, cabreando una vez más a los clientes de Cataluña y avivando de nuevo la compra selectiva. Algo que no tiene fecha de caducidad y que los catalanes de pura cepa, se encargan de reactivar.

Por eso, esta señora es por méritos propios la indiscutible Sustituta del Terror del Penedés. Dicen sus paisanos que cuando Carod Rovira abre la boca es como una tormenta de granizo para el Penedés.

Pues la Sustituta ha levantado ya astillas en Andalucía por mucho que Chaves quiera echar tierra encima y su marido, el ex presidente Pujol ,haya enviado un comunicado de prensa tapando la boca a la cónyuge.

El nacionalismo no muta, es el mismo y solo le veo una solución, el aislamiento. Los pones juntos, se desintegran en facciones y se destruyen ellos mismos, son una especie incapaz de convivir con nadie, ni con sus congéneres.

Ligur