Ya se esta hablando de la herencia de Franco. Pues bien, todos ocultarán el dato clave de que la fortuna de los Franco proviene de Doña Carmen Polo de Franco, una asturiana cuya familia era la más rica de la región. Dicho de otra manera, cuando el Caudillo accedió a la jefatura del Estado, ya era un hombre rico, gracias a su esposa.
Los analfabetos totalitarios acusan a Franco de haber expoliado a España, pero nada es más falso. Por el contrario, él fue, probablemente, el dirigente español más austero y eficaz desde los tiempos del rey visigodo Don Rodrigo. Ni siquiera cobraba impuestos a los españoles y toda su administración era inferior en número y en gasto a la actual Junta de Andalucía y otras comunidades españolas derrochadoras.
Franco era un enemigo de la libertad y de los políticos, a los que culpaba, con razón, de casi todos los males de España, pero era una persona austera en todos los ordenes. A sus 81 años llevaba el calzado de los soldados y sus comidas eran tan frugales que casi nadie le apetecía ser invitado a comer en su casa.
Tuve ocasión de visitar el palacio de El Pardo, recién fallecido Franco. A cada estancia que entrabamos, el estupor era sonoro, ¿Aquí vivía el jefe del Estado? Recuerdo sofás que mostraban los muelles, la tapicería desgastada y en las paredes se notaba que hacia décadas que no se había pasado una capa de pintura. Ya existían los teléfonos de centralita automática, con marcadores de teclado, pero en El Pardo los teléfonos eran de bakelita negros y había que darle a una manivela para que desde una centralita de clavijas, un operador proporcionase conexión.
El Pardo se cerró y se hizo una remodelación que costo a los españoles 2000 millones de pesetas, para que fuese residencia de los jefes de Estado que visitaban nuestra nación.
Franco no tuvo ni un solo escarceo corrupto, no tuvo que mantener a miles de fulanas, ni cobraba comisiones de nadie ni por nada. Franco era rico (vía herencia de su esposa) y ahora le atribuyen a la familia un patrimonio de unos 600 millones de euros, mucho menos que el simple fraude de los EREs en la Andalucia socialista. Mucho menos también que el patrimonio del rey emérito, que accedió al trono siendo pobre y dilapido el dinero de los españoles a manos llenas.
A Franco, sus mediocres y mentirosos enemigos le han sumado lo que el marques de Villaverde gano a lo largo de su vida y lo que todos los nietos han conseguido por su trabajo y méritos propios.
Tampoco cuentan que Franco fue la máxima jerarquía en 40 años y durante ese periodo, recibió cientos de medallas de oro y otros muchos objetos de valor. A su hija recién fallecida ni siquiera le permitieron fundir el oro que heredó.
Otra cosa que hoy no contarán los medios de comunicación dominados y comprados por el poder es que Franco, a su edad, disponía de una sala de enfermería tan antigua que solo servia para un museo. Para trasladarlo de su habitación a la enfermería, no disponían ni de una camilla y lo tuvieron que transportar con una manta, como se hace con los perros. Una vez en esa sala, al conectar la pantalla lumínica se fundieron los plomos porque el contador no aguantaba esos watios y tuvieron que apagar las luces de estancias de su guardia para poder operarlo. Al final acabó en la habitación de un hospital de la Seguridad Social que el creo, como uno más de los españoles.
Todo esto y muchos otros detalles positivos y ejemplares no lo contaran los medios y lo ocultaran los fracasados políticos de la falsa democracia española.
Ante tanta indignidad, he decidido publicar estas líneas, sin otro fin que contrarrestar las muchas mentiras que el poder político vierte desde su corrupta falsedad. Conviene que los olvidadizos españoles, ampliamente esclavizados por las mentiras del actual sistema, tengan al menos un contrapunto de verdad.🇪🇸🇪🇸🇪🇸
Nota: lo he encontrado en Internet, lo he reescrito y lo publico con orgullo. Aunque no puedo ser franquista porque solo amo la democracia verdadera, que no es la que padecemos, creo necesario publicar estas verdades ocultadas para que el pueblo español pueda comparar y disponga de una memoria histórica decente, no la llena de miseria y engaños que está siendo difundida por los politicastros de hoy.
Francisco Rubiales
Los analfabetos totalitarios acusan a Franco de haber expoliado a España, pero nada es más falso. Por el contrario, él fue, probablemente, el dirigente español más austero y eficaz desde los tiempos del rey visigodo Don Rodrigo. Ni siquiera cobraba impuestos a los españoles y toda su administración era inferior en número y en gasto a la actual Junta de Andalucía y otras comunidades españolas derrochadoras.
Franco era un enemigo de la libertad y de los políticos, a los que culpaba, con razón, de casi todos los males de España, pero era una persona austera en todos los ordenes. A sus 81 años llevaba el calzado de los soldados y sus comidas eran tan frugales que casi nadie le apetecía ser invitado a comer en su casa.
Tuve ocasión de visitar el palacio de El Pardo, recién fallecido Franco. A cada estancia que entrabamos, el estupor era sonoro, ¿Aquí vivía el jefe del Estado? Recuerdo sofás que mostraban los muelles, la tapicería desgastada y en las paredes se notaba que hacia décadas que no se había pasado una capa de pintura. Ya existían los teléfonos de centralita automática, con marcadores de teclado, pero en El Pardo los teléfonos eran de bakelita negros y había que darle a una manivela para que desde una centralita de clavijas, un operador proporcionase conexión.
El Pardo se cerró y se hizo una remodelación que costo a los españoles 2000 millones de pesetas, para que fuese residencia de los jefes de Estado que visitaban nuestra nación.
Franco no tuvo ni un solo escarceo corrupto, no tuvo que mantener a miles de fulanas, ni cobraba comisiones de nadie ni por nada. Franco era rico (vía herencia de su esposa) y ahora le atribuyen a la familia un patrimonio de unos 600 millones de euros, mucho menos que el simple fraude de los EREs en la Andalucia socialista. Mucho menos también que el patrimonio del rey emérito, que accedió al trono siendo pobre y dilapido el dinero de los españoles a manos llenas.
A Franco, sus mediocres y mentirosos enemigos le han sumado lo que el marques de Villaverde gano a lo largo de su vida y lo que todos los nietos han conseguido por su trabajo y méritos propios.
Tampoco cuentan que Franco fue la máxima jerarquía en 40 años y durante ese periodo, recibió cientos de medallas de oro y otros muchos objetos de valor. A su hija recién fallecida ni siquiera le permitieron fundir el oro que heredó.
Otra cosa que hoy no contarán los medios de comunicación dominados y comprados por el poder es que Franco, a su edad, disponía de una sala de enfermería tan antigua que solo servia para un museo. Para trasladarlo de su habitación a la enfermería, no disponían ni de una camilla y lo tuvieron que transportar con una manta, como se hace con los perros. Una vez en esa sala, al conectar la pantalla lumínica se fundieron los plomos porque el contador no aguantaba esos watios y tuvieron que apagar las luces de estancias de su guardia para poder operarlo. Al final acabó en la habitación de un hospital de la Seguridad Social que el creo, como uno más de los españoles.
Todo esto y muchos otros detalles positivos y ejemplares no lo contaran los medios y lo ocultaran los fracasados políticos de la falsa democracia española.
Ante tanta indignidad, he decidido publicar estas líneas, sin otro fin que contrarrestar las muchas mentiras que el poder político vierte desde su corrupta falsedad. Conviene que los olvidadizos españoles, ampliamente esclavizados por las mentiras del actual sistema, tengan al menos un contrapunto de verdad.🇪🇸🇪🇸🇪🇸
Nota: lo he encontrado en Internet, lo he reescrito y lo publico con orgullo. Aunque no puedo ser franquista porque solo amo la democracia verdadera, que no es la que padecemos, creo necesario publicar estas verdades ocultadas para que el pueblo español pueda comparar y disponga de una memoria histórica decente, no la llena de miseria y engaños que está siendo difundida por los politicastros de hoy.
Francisco Rubiales