El problema ya resulta evidente por mucho que se intente esconder por parte de los gobiernos traidores a sus ciudadanos. Las democracias han dejado de serlo para pasar a ser sistemas al servicio de las grandes corporaciones, de ese 1% que traslada su sufrimiento de Wall Street al 99% restante del planeta con el consentimiento, autorización y obediencia servil de los incompetentes gobiernos al servicio del capitalismo voraz.
Esta panda de marionetas llamadas gobierno han visto desde su más absoluta incompetencia como se saqueaban las Cajas de Ahorro y como se desguazaba un país entero por los miembros de la secta partidista sin hacer absolutamente nada, excepto tocarse las pelotas mientras España era esquilmada en un orgia de coca, reparto del saqueo y evasión a paraisos fiscales, orgia que le está tocando pagar al ciudadano sin que medie la menor autocritica por los hechos acaecidos y que tienen como únicos responsables a la casta política.
Una casta que tiene que ganar las elecciones a base de engaños o con maniobras terroristas que cuestan la vida a cientos de ciudadanos, una casta que no duda en ayudar a los bancos y dejar abandonados a su suerte a miles de ciudadanos con mayores y niños. Es la peor crisis de humanidad que ha vivido Europa desde la segunda guerra mundial. Y así como en aquellos tiempos todos colaboraban y silenciaban las barbaridades que se hacían, ahora ocurre lo mismo, solo tienes derecho a estar callado, a dejar que te echen de tu hogar, a que tus hijos pasen hambre en el colegio mientras se aprueban ayudas para el cine cubano, las playas de El Salvador y no se que hostias en Mali, todo ello con la consiguiente comisión que se queda por el camino via paraisos fiscales como podemos observar en los EREs donde se ha jugado con el dinero de los parados para que estos saqueadores disfrazados de socialistas llenen las cámaras acorazadas de los bancos caribeños.
En este contexto, los ciudadanos tienen la obligación de salir a la calle y no acabar con la protesta hasta que se meta en prisión al último de estos individuos que no solo se ha llevado el dinero de todos sino que nos lo hace pagar esquilmandonos mediante Hacienda y su psicópata Ministro a razón del 50% de nuestro esfuerzo, un esfuerzo que hacemos para dar de comer a nuestros hijos, llevarlos al colegio y comprarles algo de ropa etc... pero que el Estado en manos de estos saqueadores nos obliga mediante coacción a reponer semejante robo institucionalizado.
El ciudadano tiene la obligación de acabar con esto aunque le cueste la vida porque como se decía con Franco, que no nos tengamos que avergonzar de haberlo dejado morir en la cama, pues a estos lo mismo. No se les puede dejar acabar sus dias de gloria con nuestro dinero mientras nosotros pasamos hambre, hay que acabar hasta con el perro de cualquiera de estos saqueadores porque muerto el perro se acabó la rabia.
Carlos RH
Esta panda de marionetas llamadas gobierno han visto desde su más absoluta incompetencia como se saqueaban las Cajas de Ahorro y como se desguazaba un país entero por los miembros de la secta partidista sin hacer absolutamente nada, excepto tocarse las pelotas mientras España era esquilmada en un orgia de coca, reparto del saqueo y evasión a paraisos fiscales, orgia que le está tocando pagar al ciudadano sin que medie la menor autocritica por los hechos acaecidos y que tienen como únicos responsables a la casta política.
Una casta que tiene que ganar las elecciones a base de engaños o con maniobras terroristas que cuestan la vida a cientos de ciudadanos, una casta que no duda en ayudar a los bancos y dejar abandonados a su suerte a miles de ciudadanos con mayores y niños. Es la peor crisis de humanidad que ha vivido Europa desde la segunda guerra mundial. Y así como en aquellos tiempos todos colaboraban y silenciaban las barbaridades que se hacían, ahora ocurre lo mismo, solo tienes derecho a estar callado, a dejar que te echen de tu hogar, a que tus hijos pasen hambre en el colegio mientras se aprueban ayudas para el cine cubano, las playas de El Salvador y no se que hostias en Mali, todo ello con la consiguiente comisión que se queda por el camino via paraisos fiscales como podemos observar en los EREs donde se ha jugado con el dinero de los parados para que estos saqueadores disfrazados de socialistas llenen las cámaras acorazadas de los bancos caribeños.
En este contexto, los ciudadanos tienen la obligación de salir a la calle y no acabar con la protesta hasta que se meta en prisión al último de estos individuos que no solo se ha llevado el dinero de todos sino que nos lo hace pagar esquilmandonos mediante Hacienda y su psicópata Ministro a razón del 50% de nuestro esfuerzo, un esfuerzo que hacemos para dar de comer a nuestros hijos, llevarlos al colegio y comprarles algo de ropa etc... pero que el Estado en manos de estos saqueadores nos obliga mediante coacción a reponer semejante robo institucionalizado.
El ciudadano tiene la obligación de acabar con esto aunque le cueste la vida porque como se decía con Franco, que no nos tengamos que avergonzar de haberlo dejado morir en la cama, pues a estos lo mismo. No se les puede dejar acabar sus dias de gloria con nuestro dinero mientras nosotros pasamos hambre, hay que acabar hasta con el perro de cualquiera de estos saqueadores porque muerto el perro se acabó la rabia.
Carlos RH