La culpa por la que en Andalucía es posible, un régimen de décadas de psocioclientelismo es, fundamentalmente, por la secular ínfima calidad de su clase media, que hace que la mayoría no se fíe de ellos, porque aunque no muy listos, aquí memoria si tenemos.
El franquismo desmontó literalmente la exigua industria andaluza que pudo sobrevivir al XIX para entregársela a vascos y catalanes ante el aplauso complaciente de los terratenientes franquistas andaluces de mierda.
Gran parte del dinero con el que se financió el golpe de estado franquista del 36 lo pusieron terratenientes andaluces, para asegurarse el único modo de vida que esta basura entendía y entiende la vida:
"Nosotros elegidos por dios para explotar a los demás debemos asegurar que la incultura, la opresión, y la falta de desarrollo impida a los explotados poder levantar la vista del suelo".
La burguesía andaluza no ha hecho absolutamente nada en toda la historia por mejorar su propia tierra. El pueblo andaluz los ha ayudado todo lo que ha podido para que así sea.
En el otro fiel de la balanza actual, el PSOE un partido político compuesto en su inmensa mayoría hasta ahora por maestros de escuela en excedencia mediocres y vagos, no ha sabido ni querido cambiar un modelo de clientelismo que les garantizaba vivir bien, no dando un palo al agua.
En medio la masa, incapaz de autogobernarse y con la debilidad que da la generosidad del entorno, generosidad climática, generosidad caracteriologica. (Aquí a los únicos que nos hemos opuestos fue a los franceses, porque traían la intolerable modernidad y laicismo del Estado)
Miles de no andaluces ocupan puestos en la administración andaluza sin que nunca hayan sufrido ninguna oposición a su llegada.
¿Hubiera sido eso posible, a la inversa, en Castilla?
Se han llegado a programar, desde la Junta de Andalucía, convocatorias de oposiciones para todos los cuerpos en fechas escogidas, para que no coincidieran con convocatorias en Castilla y León con la única intención de que pudieran presentarse cuantos más castellanos mejor.
Los castellanos que ocupaban y ocupan puestos relevantes y que nunca han querido esta tierra, se han asegurado en estos cuarenta años del sometimiento territorial de Andalucía, desterrando un fantasma preocupante para el centralismo: " una Andalucía independiente que pudiera aspirar a imponer su mayoría poblacional en la política nacional" (y el pueblo andaluz hemos colaborado generosa y cretínamente a ser derrotados)
Como pesadilla recuerdan aún los actuales líderes de todos los partidos políticos los primeros años de la democracia, en que los tres partidos importantes estaban presididos por tres andaluces.
Andalucía fue, es y será un cortijo por decisión mayoritaria de su pueblo, con señoritos de izquierda o de derecha, eso da lo mismo.
Y si algún día el turismo (nuestra única industria) pusiera en peligro nuestro sometimiento, no tendríamos el menor reparo en emular la guerra de independencia y expulsaríamos a los "extranjeros" para mayor gloria de nuestro clero y terratenientes.... lo llevamos en las venas.
Secula Seculorum
El franquismo desmontó literalmente la exigua industria andaluza que pudo sobrevivir al XIX para entregársela a vascos y catalanes ante el aplauso complaciente de los terratenientes franquistas andaluces de mierda.
Gran parte del dinero con el que se financió el golpe de estado franquista del 36 lo pusieron terratenientes andaluces, para asegurarse el único modo de vida que esta basura entendía y entiende la vida:
"Nosotros elegidos por dios para explotar a los demás debemos asegurar que la incultura, la opresión, y la falta de desarrollo impida a los explotados poder levantar la vista del suelo".
La burguesía andaluza no ha hecho absolutamente nada en toda la historia por mejorar su propia tierra. El pueblo andaluz los ha ayudado todo lo que ha podido para que así sea.
En el otro fiel de la balanza actual, el PSOE un partido político compuesto en su inmensa mayoría hasta ahora por maestros de escuela en excedencia mediocres y vagos, no ha sabido ni querido cambiar un modelo de clientelismo que les garantizaba vivir bien, no dando un palo al agua.
En medio la masa, incapaz de autogobernarse y con la debilidad que da la generosidad del entorno, generosidad climática, generosidad caracteriologica. (Aquí a los únicos que nos hemos opuestos fue a los franceses, porque traían la intolerable modernidad y laicismo del Estado)
Miles de no andaluces ocupan puestos en la administración andaluza sin que nunca hayan sufrido ninguna oposición a su llegada.
¿Hubiera sido eso posible, a la inversa, en Castilla?
Se han llegado a programar, desde la Junta de Andalucía, convocatorias de oposiciones para todos los cuerpos en fechas escogidas, para que no coincidieran con convocatorias en Castilla y León con la única intención de que pudieran presentarse cuantos más castellanos mejor.
Los castellanos que ocupaban y ocupan puestos relevantes y que nunca han querido esta tierra, se han asegurado en estos cuarenta años del sometimiento territorial de Andalucía, desterrando un fantasma preocupante para el centralismo: " una Andalucía independiente que pudiera aspirar a imponer su mayoría poblacional en la política nacional" (y el pueblo andaluz hemos colaborado generosa y cretínamente a ser derrotados)
Como pesadilla recuerdan aún los actuales líderes de todos los partidos políticos los primeros años de la democracia, en que los tres partidos importantes estaban presididos por tres andaluces.
Andalucía fue, es y será un cortijo por decisión mayoritaria de su pueblo, con señoritos de izquierda o de derecha, eso da lo mismo.
Y si algún día el turismo (nuestra única industria) pusiera en peligro nuestro sometimiento, no tendríamos el menor reparo en emular la guerra de independencia y expulsaríamos a los "extranjeros" para mayor gloria de nuestro clero y terratenientes.... lo llevamos en las venas.
Secula Seculorum