Los hechos recientes demuestran que Begoña, la mujer de Sánchez, es la verdadera "número dos" del PSOE
Felipe González, Alfonso Guerra y García-Page son los tres rostros más famosos del anti sanchismo dentro del socialismo español, pero hay miles más que ya critican abiertamente a Sánchez y rechazan la política del partido. Todos ellos comparten la tesis de que el PSOE está siendo asesinado por el sanchismo y desacreditado ante la opinión mayoritaria de los españoles, lo que podría acabar con el partido en el futuro.
Personalmente me quedan muy pocos amigos socialistas. Mi postura crítica los ha alejado, pero entre los que me quedan no hay uno sólo que no sienta ganas de vomitar ante la política de su partido.
Los testimonios de los disidentes comienzan a aparecer y crecen las reuniones entre disidentes socialistas, como la reciente reunión entre Felipe González y García-Page, todas ellas críticas con el sanchismo y orientadas a preparar la sucesión de un Sánchez cada día más quemado y rechazado por los españoles.
El diario "La Voz del Sur" comenta el testimonio de una teniente de alcalde y delegada municipal socialista, en Jerez de la Frontera, una de las ciudades andaluzas gobernada por el PSOE en muchas etapas, Refiriéndose a la Amnistía, la socialista dice que no comulga "con esta locura".
"Llevo tiempo pensándome la baja, estoy en el 12% del partido que votó parar esta locura, pero si te das de baja se quedan con todo sin nadie que se les oponga", mantiene bajo el anonimato este destacado miembro de uno de los gobiernos municipales más relevantes que ha tenido el PSOE andaluz en las dos últimas décadas.
El presidente de la Junta, Juanma Moreno acaba de apelar al rechazo masivo que la amnistía ha despertado en España, incluso dentro del PSOE. "Hasta Espadas y el PSOE lo reconocen: la sociedad española ni entiende ni comparte la Ley de Amnistía. Liberar de sentencias firmes a quienes vulneraron la Constitución Española con el afán de mantenerse en la Moncloa es un error".
El rechazo de la inmensa mayoría de los españoles a la amnistía es un hecho comprobado. Algunas encuestas lo sitúan por encima del 70 por ciento, pero, a pesar de ese rechazo, Pedro Sánchez ha decidido violar la voluntad popular y enfrentarse a su pueblo, como un vulgar tirano, y seguir adelante con esa política contraria a la Constitución, al derecho y a la decencia.
La sucia amnistía, unida al escándalo corrupto del Caso Koldo, que cada día crece más y es ya "el caso del gobierno de Sánchez" porque abarca a varios ministros y a la propia mujer del presidente, han dado un empujón notable a la resistencia anti sanchista en el PSOE, donde ya parece haber comenzado la desbandada y la carrera por la sucesión.
Ayer comenté por teléfono el asunto con uno de los pocos socialistas que conservo como amigo y me dijo que "En los próximos años veo a Sánchez en la cárcel y al socialismo luchando por sobrevivir, después de este desastre".
Francisco Rubiales
Personalmente me quedan muy pocos amigos socialistas. Mi postura crítica los ha alejado, pero entre los que me quedan no hay uno sólo que no sienta ganas de vomitar ante la política de su partido.
Los testimonios de los disidentes comienzan a aparecer y crecen las reuniones entre disidentes socialistas, como la reciente reunión entre Felipe González y García-Page, todas ellas críticas con el sanchismo y orientadas a preparar la sucesión de un Sánchez cada día más quemado y rechazado por los españoles.
El diario "La Voz del Sur" comenta el testimonio de una teniente de alcalde y delegada municipal socialista, en Jerez de la Frontera, una de las ciudades andaluzas gobernada por el PSOE en muchas etapas, Refiriéndose a la Amnistía, la socialista dice que no comulga "con esta locura".
"Llevo tiempo pensándome la baja, estoy en el 12% del partido que votó parar esta locura, pero si te das de baja se quedan con todo sin nadie que se les oponga", mantiene bajo el anonimato este destacado miembro de uno de los gobiernos municipales más relevantes que ha tenido el PSOE andaluz en las dos últimas décadas.
El presidente de la Junta, Juanma Moreno acaba de apelar al rechazo masivo que la amnistía ha despertado en España, incluso dentro del PSOE. "Hasta Espadas y el PSOE lo reconocen: la sociedad española ni entiende ni comparte la Ley de Amnistía. Liberar de sentencias firmes a quienes vulneraron la Constitución Española con el afán de mantenerse en la Moncloa es un error".
El rechazo de la inmensa mayoría de los españoles a la amnistía es un hecho comprobado. Algunas encuestas lo sitúan por encima del 70 por ciento, pero, a pesar de ese rechazo, Pedro Sánchez ha decidido violar la voluntad popular y enfrentarse a su pueblo, como un vulgar tirano, y seguir adelante con esa política contraria a la Constitución, al derecho y a la decencia.
La sucia amnistía, unida al escándalo corrupto del Caso Koldo, que cada día crece más y es ya "el caso del gobierno de Sánchez" porque abarca a varios ministros y a la propia mujer del presidente, han dado un empujón notable a la resistencia anti sanchista en el PSOE, donde ya parece haber comenzado la desbandada y la carrera por la sucesión.
Ayer comenté por teléfono el asunto con uno de los pocos socialistas que conservo como amigo y me dijo que "En los próximos años veo a Sánchez en la cárcel y al socialismo luchando por sobrevivir, después de este desastre".
Francisco Rubiales