Caricatura de la viceministra Ángela Rodriguez, alias PAM, que circula por Internet como protesta por sus declaraciones de odio
¿Desde cuando España es un dominio de la chusma? Muchos observadores y expertos dicen que ese drama nació el 12 de marzo del año 2004, hace hoy 19 años, cuando los peores atentados terroristas de la España moderna propiciaron la inesperada victoria electoral de un tipo llamado José Luis Rodríguez Zapatero, auténtico prototipo de "chusma" política,
Los del PSOE no pueden ni quieren frenar los desmanes de Podemos porque condenarlos abiertamente significaría la muerte de la coalición que les permite gobernar y disfrutar del opíparo botín del poder.
Los de Podemos saben meter miedo porque actúan no como políticos sino como hampones. Tienen amedrentados a muchos jueces, periodistas y también al mismo Pedro Sánchez, incapaz de romper con la chusma podemita, de la que depende que el gobierno siga vivo.
El periodista Eduardo Inda, uno de los pocos críticos españoles sin miedo a la chusma, dice de Pam: "la malnacida esta, más chula que un ocho, a sabiendas de que Pedro Sánchez jamás se atreverá a tocarle un pelo porque eso significa tanto como perder el Falcon, el Super Puma, el Airbus 310, Moncloa, Doñana y la Residencia Real de La Mareta".
La gorda Pam define a los españoles como "bastante violadores" y constituye el ejemplo de la maldad intrínseca y del fracaso del sanchismo, que ha elevado a la chusma hasta la cúspide del poder en un país como España, cargado de Historia y hasta ahora respetado en el concierto mundial.
A estas alturas, la gorda Pam es un esperpéntico personaje convertido en una fábrica de ciudadanos frustrados, de gente asqueada de la política, de antisanchistas furiosos y de votos para VOX.
Los matones de Podemos, los batasunos de BILDU, los golpistas e independentistas catalanes y los vascos del PNV y otros, siempre dispuestos a vender sus votos a cambio de poder, concesiones, dinero y privilegios, integran hoy la chusma que gobierna España, encabezada por el PSOE de Pedro Sánchez, donde el viejo socialismo está siendo masacrado y sustituido por una masa de aprovechados, sin generosidad ni altruismo y sin otra ideología que el disfrute del botín del poder, capaz de todo con tal de poder seguir agarrados a la teta del Estado español, ya escuálida por exceso de succión.
Esa chusma gobernante produce leyes inicuas, endeuda al país de manera suicida, despilfarra, divide, enfrenta, agudiza el divorcio entre ciudadanos y políticos, reparte los recursos arbitrariamente, es opaca y sucia, asesina la democracia, es codiciosa, envilece la vida pública y llena el país de corrupción y abuso, acelerando el desencanto, el rechazo a la política y a lo público, provocando el deterioro y la decadencia de la nación.
Un país gobernado por gente así es una auténtica mierda, aunque miles de medios y periodistas corrompidos se ocupen cada dá, con sus mentiras y silencios, de que la mierda parezca una flor.
Francisco Rubiales
Los del PSOE no pueden ni quieren frenar los desmanes de Podemos porque condenarlos abiertamente significaría la muerte de la coalición que les permite gobernar y disfrutar del opíparo botín del poder.
Los de Podemos saben meter miedo porque actúan no como políticos sino como hampones. Tienen amedrentados a muchos jueces, periodistas y también al mismo Pedro Sánchez, incapaz de romper con la chusma podemita, de la que depende que el gobierno siga vivo.
El periodista Eduardo Inda, uno de los pocos críticos españoles sin miedo a la chusma, dice de Pam: "la malnacida esta, más chula que un ocho, a sabiendas de que Pedro Sánchez jamás se atreverá a tocarle un pelo porque eso significa tanto como perder el Falcon, el Super Puma, el Airbus 310, Moncloa, Doñana y la Residencia Real de La Mareta".
La gorda Pam define a los españoles como "bastante violadores" y constituye el ejemplo de la maldad intrínseca y del fracaso del sanchismo, que ha elevado a la chusma hasta la cúspide del poder en un país como España, cargado de Historia y hasta ahora respetado en el concierto mundial.
A estas alturas, la gorda Pam es un esperpéntico personaje convertido en una fábrica de ciudadanos frustrados, de gente asqueada de la política, de antisanchistas furiosos y de votos para VOX.
Los matones de Podemos, los batasunos de BILDU, los golpistas e independentistas catalanes y los vascos del PNV y otros, siempre dispuestos a vender sus votos a cambio de poder, concesiones, dinero y privilegios, integran hoy la chusma que gobierna España, encabezada por el PSOE de Pedro Sánchez, donde el viejo socialismo está siendo masacrado y sustituido por una masa de aprovechados, sin generosidad ni altruismo y sin otra ideología que el disfrute del botín del poder, capaz de todo con tal de poder seguir agarrados a la teta del Estado español, ya escuálida por exceso de succión.
Esa chusma gobernante produce leyes inicuas, endeuda al país de manera suicida, despilfarra, divide, enfrenta, agudiza el divorcio entre ciudadanos y políticos, reparte los recursos arbitrariamente, es opaca y sucia, asesina la democracia, es codiciosa, envilece la vida pública y llena el país de corrupción y abuso, acelerando el desencanto, el rechazo a la política y a lo público, provocando el deterioro y la decadencia de la nación.
Un país gobernado por gente así es una auténtica mierda, aunque miles de medios y periodistas corrompidos se ocupen cada dá, con sus mentiras y silencios, de que la mierda parezca una flor.
Francisco Rubiales