Francisco Vázquez, antiguo dirigente socialista, denuncia el drama que padece España por culpa de un Sánchez que sienta a los comunistas en su gobierno
España está demostrando ser el país más rácano de Europa a la hora de ayudar a los héroes de Ucrania, a los que, por presiones de los comunistas de Podemos, amigos de Putin e incapaces de condenar la invasión mas sucia y rastrera que padece una nación soberana desde hace décadas, España se niega a enviarles el material militar que necesita para repeler las tropas de Putin y salva la cara ante el mundo enviando sólo cascos y chalecos antibalas, a pesar de que es uno de los principales fabricantes de armas del planeta.
Podemos no sólo bloquea la ayuda militar española a Ucrania, sino que colabora con la más sucia y soez propaganda pro rusa, difundiendo mentiras, justificando la invasión de Ucrania y criticando a la OTAN como si fuera la culpable de la matanza de ucranianos. Podemos critica y condena las sanciones que Europa está imponiendo a la invasora Rusia y considera abusivas e ilegales las medidas europeas para silenciar los medios de comunicación e intoxicación rusos que están engañando al mundo con mentiras y falsedades.
Pedro Sánchez y el PSOE ocultan al pueblo español el coste de decenas (quizás centenares) de miles de millones de euros y de toneladas de prestigio que cuesta a España su sucia alianza con el totalitarismo comunista que representa Podemos. Por culpa de esa alianza, que se traduce en nada menos que en un gobierno de coalición, el traidor Sánchez está permitiendo que España sea despreciada y maltratada en el concierto mundial.
España no es invitada a los grandes foros internacionales donde se decide el destino del mundo, pierde contratos vitales para nuestras empresas, exporta con desventaja sus productos, artificialmente encarecidos, y las fuerzas armadas y de seguridad han perdido el acceso a información que necesitan y que sus colegas internacionales ya les bloquean.
Pablo Casado lo dijo claramente no hace mucho: “Por mucho que se disfrace, el Gobierno de Sánchez es el más radical de Europa. El único con ministros comunistas y que está recibiendo apoyo del brazo político de una banda terrorista”.
Sánchez y los socialistas no lo dicen, pero los aliados de España, con Estados Unidos a la cabeza, ocultan a España información vital y datos porque están seguros de que los colegas comunistas de Sánchez los filtran inmediatamente a los estercoleros mundiales del totalitarismo comunista, representados por Rusia, Cuba, Irán, Venezuela y otros "paraísos" de la opresión y la represión.
Francisco Vázquez, antiguo dirigente socialista y hoy adversario del sanchismo, acaba de declarar con toda verdad y crudeza lo que nos ocurre como nación: “Tenemos comunistas en el Gobierno y eso implica la desconfianza y lejanía de los gobiernos occidentales”. “Sánchez tiene una mayoría basada en lo que más horroriza a un gobierno democrático, tenemos comunistas, alianzas con grupos de carácter terrorista, con separatistas y partidos vinculados a los narco-guerrilleros colombianos”. "Este PSOE nada tiene que ver con en el que yo milité, ha roto con su propio pasado, lo ha roto a través de las alianzas y de su proyecto político”.
Nuestros antiguos clientes y socios compran ahora productos en otros mercados que no sea España y contratan en otros países trabajos que antes realizaba España. Las empresas españolas que padecen esos daños no se atreven a denunciar al gobierno que les está perjudicando por miedo a perder contratos internos. España ha dejado de construir barcos de guerra para países que antes nos lo compraban y nuestros astilleros sobreviven penosamente porque ya no reparan buques ni realizan el mantenimiento a flotas como la norteamericana del Mediterráneo, que han huido de España.
Toda la información sobre el desastre que España está sufriendo sólo porque el sátrapa Sánchez necesita el apoyo de los comunistas para gobernar es clasificada, como si se tratara de un vital secreto de Estado, cuando es sólo el reflejo de una desvergüenza y una suciedad que repugna y que son inéditas en nuestra historia moderna.
Francisco Rubiales
Podemos no sólo bloquea la ayuda militar española a Ucrania, sino que colabora con la más sucia y soez propaganda pro rusa, difundiendo mentiras, justificando la invasión de Ucrania y criticando a la OTAN como si fuera la culpable de la matanza de ucranianos. Podemos critica y condena las sanciones que Europa está imponiendo a la invasora Rusia y considera abusivas e ilegales las medidas europeas para silenciar los medios de comunicación e intoxicación rusos que están engañando al mundo con mentiras y falsedades.
Pedro Sánchez y el PSOE ocultan al pueblo español el coste de decenas (quizás centenares) de miles de millones de euros y de toneladas de prestigio que cuesta a España su sucia alianza con el totalitarismo comunista que representa Podemos. Por culpa de esa alianza, que se traduce en nada menos que en un gobierno de coalición, el traidor Sánchez está permitiendo que España sea despreciada y maltratada en el concierto mundial.
España no es invitada a los grandes foros internacionales donde se decide el destino del mundo, pierde contratos vitales para nuestras empresas, exporta con desventaja sus productos, artificialmente encarecidos, y las fuerzas armadas y de seguridad han perdido el acceso a información que necesitan y que sus colegas internacionales ya les bloquean.
Pablo Casado lo dijo claramente no hace mucho: “Por mucho que se disfrace, el Gobierno de Sánchez es el más radical de Europa. El único con ministros comunistas y que está recibiendo apoyo del brazo político de una banda terrorista”.
Sánchez y los socialistas no lo dicen, pero los aliados de España, con Estados Unidos a la cabeza, ocultan a España información vital y datos porque están seguros de que los colegas comunistas de Sánchez los filtran inmediatamente a los estercoleros mundiales del totalitarismo comunista, representados por Rusia, Cuba, Irán, Venezuela y otros "paraísos" de la opresión y la represión.
Francisco Vázquez, antiguo dirigente socialista y hoy adversario del sanchismo, acaba de declarar con toda verdad y crudeza lo que nos ocurre como nación: “Tenemos comunistas en el Gobierno y eso implica la desconfianza y lejanía de los gobiernos occidentales”. “Sánchez tiene una mayoría basada en lo que más horroriza a un gobierno democrático, tenemos comunistas, alianzas con grupos de carácter terrorista, con separatistas y partidos vinculados a los narco-guerrilleros colombianos”. "Este PSOE nada tiene que ver con en el que yo milité, ha roto con su propio pasado, lo ha roto a través de las alianzas y de su proyecto político”.
Nuestros antiguos clientes y socios compran ahora productos en otros mercados que no sea España y contratan en otros países trabajos que antes realizaba España. Las empresas españolas que padecen esos daños no se atreven a denunciar al gobierno que les está perjudicando por miedo a perder contratos internos. España ha dejado de construir barcos de guerra para países que antes nos lo compraban y nuestros astilleros sobreviven penosamente porque ya no reparan buques ni realizan el mantenimiento a flotas como la norteamericana del Mediterráneo, que han huido de España.
Toda la información sobre el desastre que España está sufriendo sólo porque el sátrapa Sánchez necesita el apoyo de los comunistas para gobernar es clasificada, como si se tratara de un vital secreto de Estado, cuando es sólo el reflejo de una desvergüenza y una suciedad que repugna y que son inéditas en nuestra historia moderna.
Francisco Rubiales