Los últimos estudios revelan que el salario real en la España de 2006 es el mismo que en 1997, hace casi diez años. El espectacular crecimiento económico de España es una burbuja irreal, porque no está afectando a los ciudadanos, que cada día pierden poder adquisitivo y están más endeudados, debido al encarecimiento de los productos.
España crece por encima del 3% y lleva años creciendo más que los paises de la Unión Europea, lo que convierte a España en un país envidiado por su potencia económica. Sin embargo, cuando se conoce la realidad, más que envidia, España quizás provoque lástima.
Los ciudadanos, sobre todo los jóvenes, viven paor que hace diez años, mucho peor, porque los bienes de primera necesidad valen hoy entre un 50 y un 100% más que en
1997, a lo que se suma el desorbitado aumento del precio de las viviendas, junto a
una cada vez más precaria contratación laboral. Los jóvenes que salen de la
Universidad entran al mercado laboral por sueldos de entre 600 y 1000 euros mensuales (con contrato) y entre 300 y 600 (con beca). Además sus derechos laborales están en entredicho, porque la atroz competencia por encontrar trabajo hace casi imposible que se respeten los derechos laborales y que se cumpla la jornada laboral, ya que hay gente dispuesta a trabajar más de 8 horas por el mismo sueldo. La realidad demuestra que los españoles trabajamos más de 8 horas al día y cobramos cada vez menos.
Y son los jóvenes quienes se están llevando la peor parte. Tienen una gran capacidad potencial de consumo, pero sus sueldos ne les permiten adquirir viviendas, muebles o automóviles. Los expertos creen que el consumo interno se resentirá muy pronto y que la economía entrará en recesión, lo que abrirá las puertas a una profunda crisis, que disparará el desempleo.
Los políticos españoles, con fama de malos gestores, corruptos y dedicados más a luchar por el poder y al enfrentamientomutuo, parecen insensibles o impotentes ante el drama que se avecina y no adoptan medidas para evitar el desastre.
España crece por encima del 3% y lleva años creciendo más que los paises de la Unión Europea, lo que convierte a España en un país envidiado por su potencia económica. Sin embargo, cuando se conoce la realidad, más que envidia, España quizás provoque lástima.
Los ciudadanos, sobre todo los jóvenes, viven paor que hace diez años, mucho peor, porque los bienes de primera necesidad valen hoy entre un 50 y un 100% más que en
1997, a lo que se suma el desorbitado aumento del precio de las viviendas, junto a
una cada vez más precaria contratación laboral. Los jóvenes que salen de la
Universidad entran al mercado laboral por sueldos de entre 600 y 1000 euros mensuales (con contrato) y entre 300 y 600 (con beca). Además sus derechos laborales están en entredicho, porque la atroz competencia por encontrar trabajo hace casi imposible que se respeten los derechos laborales y que se cumpla la jornada laboral, ya que hay gente dispuesta a trabajar más de 8 horas por el mismo sueldo. La realidad demuestra que los españoles trabajamos más de 8 horas al día y cobramos cada vez menos.
Y son los jóvenes quienes se están llevando la peor parte. Tienen una gran capacidad potencial de consumo, pero sus sueldos ne les permiten adquirir viviendas, muebles o automóviles. Los expertos creen que el consumo interno se resentirá muy pronto y que la economía entrará en recesión, lo que abrirá las puertas a una profunda crisis, que disparará el desempleo.
Los políticos españoles, con fama de malos gestores, corruptos y dedicados más a luchar por el poder y al enfrentamientomutuo, parecen insensibles o impotentes ante el drama que se avecina y no adoptan medidas para evitar el desastre.