Éstas son las razones y comportamientos que hacen imprescindibles que Europa vigile y controle al gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, al que no deberían entregar fondos europeos de ayuda a la reconstrucción libremente porque resulta evidente que los emplearían para fortalecer su opción ideológica, para burlar le voluntad popular y para desarrollar políticas electoralistas y sectarias, contrarias a la Constitución.
Por estas razones sectarias y partidistas, miles de españoles están pidiendo a la Unión Europea y a los países del norte de Europa que vigilen y controlen el dinero que se entregará a España para la reconstrucción después del coronavirus. Sin controles, el gobierno español abusará de su poder y será injusto en el reparto y las inversiones y la izquierda gobernante hará sectarismo, electoralismo, injusticia y muchas burradas contrarias al bien común.
El gobierno de Sánchez está infectado de uno de los grandes vicios de los sátrapas y corruptos, que consiste en anteponer sus propios intereses al bien común, una línea roja que España traspasa con frecuencia y que invalida y deslegitima la falsa democracia española.
"La totalidad del incremento de la inversión irá destinado a la educación pública de gestión directa", subraya el documento pactado entre PSOE y Podemos, que excluye a la escuela concertada de esas ayudas económicas, un comportamiento arbitrario y tirano contrario a lo que quieren millones de familias españolas.
El gobierno de Pedro Sánchez utiliza todos los recursos a su alcance para imponer su voluntad sobre la de los ciudadanos, lo que supone una actitud tiránica y antidemocrática. Es el electoralismo y el sectarismo el que preside su política. Esa forma de actuar es contraria a la democracia y a las tradiciones europeas, donde se subraya que ser democrático implica respetar la voluntad popular, salvo excepciones muy justificadas, y respetar también a las minorías.
El sectarismo exhibido por el gobierno da la razón a los miles de españoles que están escribiendo mensajes y cartas a las instituciones europeas pidiendo que no le entreguen los fondos europeos de ayuda al gobierno español sin crear antes mecanismos de vigilancia y control que impidan que esos fondos sean utilizados por el gobierno de manera sectaria y arbitraria, más en beneficio de los partidos que gobiernan que del pueblo y de la reconstrucción, tras la crisis del coronavirus.
Pero esta actuación arbitraria en materia de educación no es el único ejemplo que demanda que controlen y vigilen al gobierno desde Europa. Hay otros muchos ejemplos de abuso y sectarismo, entre ellos el reparto de las subvenciones, la hostilidad contra los emprendedores, la obsesión por subir los impuestos cuando es aconsejable reducirlos, las amenazas a la propiedad privada, que están provocando fuga de capitales y empresas, el despilfarro y la corrupción, que no cesan, la compra de votos, la política antidemocrática de control informativo, la utilización del miedo y de la mentira para gobernar y un largo etcétera que convierte al gobierno de Sánchez e Iglesias en antidemocrático, ajeno a la ética, injusto y poco fiable.
A los ciudadanos que, indignados ante el comportamiento poco democrático e injusto del gobierno, quieran enviar su protesta a Europa con el fin de que la Unión vigile y controle al gobierno de España en el uso del dinero para la reconstrucción, les sugerimos que copien la carta enviada a Europa desde este blog www.votoenblanco.com y la envien a las instituciones y cancillerías que integran la Unión Europea.
Francisco Rubiales
Por estas razones sectarias y partidistas, miles de españoles están pidiendo a la Unión Europea y a los países del norte de Europa que vigilen y controlen el dinero que se entregará a España para la reconstrucción después del coronavirus. Sin controles, el gobierno español abusará de su poder y será injusto en el reparto y las inversiones y la izquierda gobernante hará sectarismo, electoralismo, injusticia y muchas burradas contrarias al bien común.
El gobierno de Sánchez está infectado de uno de los grandes vicios de los sátrapas y corruptos, que consiste en anteponer sus propios intereses al bien común, una línea roja que España traspasa con frecuencia y que invalida y deslegitima la falsa democracia española.
"La totalidad del incremento de la inversión irá destinado a la educación pública de gestión directa", subraya el documento pactado entre PSOE y Podemos, que excluye a la escuela concertada de esas ayudas económicas, un comportamiento arbitrario y tirano contrario a lo que quieren millones de familias españolas.
El gobierno de Pedro Sánchez utiliza todos los recursos a su alcance para imponer su voluntad sobre la de los ciudadanos, lo que supone una actitud tiránica y antidemocrática. Es el electoralismo y el sectarismo el que preside su política. Esa forma de actuar es contraria a la democracia y a las tradiciones europeas, donde se subraya que ser democrático implica respetar la voluntad popular, salvo excepciones muy justificadas, y respetar también a las minorías.
El sectarismo exhibido por el gobierno da la razón a los miles de españoles que están escribiendo mensajes y cartas a las instituciones europeas pidiendo que no le entreguen los fondos europeos de ayuda al gobierno español sin crear antes mecanismos de vigilancia y control que impidan que esos fondos sean utilizados por el gobierno de manera sectaria y arbitraria, más en beneficio de los partidos que gobiernan que del pueblo y de la reconstrucción, tras la crisis del coronavirus.
Pero esta actuación arbitraria en materia de educación no es el único ejemplo que demanda que controlen y vigilen al gobierno desde Europa. Hay otros muchos ejemplos de abuso y sectarismo, entre ellos el reparto de las subvenciones, la hostilidad contra los emprendedores, la obsesión por subir los impuestos cuando es aconsejable reducirlos, las amenazas a la propiedad privada, que están provocando fuga de capitales y empresas, el despilfarro y la corrupción, que no cesan, la compra de votos, la política antidemocrática de control informativo, la utilización del miedo y de la mentira para gobernar y un largo etcétera que convierte al gobierno de Sánchez e Iglesias en antidemocrático, ajeno a la ética, injusto y poco fiable.
A los ciudadanos que, indignados ante el comportamiento poco democrático e injusto del gobierno, quieran enviar su protesta a Europa con el fin de que la Unión vigile y controle al gobierno de España en el uso del dinero para la reconstrucción, les sugerimos que copien la carta enviada a Europa desde este blog www.votoenblanco.com y la envien a las instituciones y cancillerías que integran la Unión Europea.
Francisco Rubiales