Enoc y un nephilim (ángel) viajando por el Universo
La respuesta del Poderoso, pronunciada con grave acento de verdad, fue sorprendente y sobrecogedora, como un viento gélido que congela el rostro y el alma:
"El diablo Puigdemont cumple sin saberlo la misión que yo le he encomendado. Él hace el mal porque el mal es el aliento de su alma, pero es un mal que purifica y genera el bien. La Cataluña mártir es un territorio de la rica Iberia, que fue el rincón predilecto de los Vigilantes en el planeta Tierra, donde dejaron sembrada la semilla del mal, un mal que se manifiesta en la envidia, el rencor, el desprecio a los demás humanos y, sobre todo, una ralea de dirigentes con el alma negra, tan parecidos a los demonios que merecen vivir congelados en el Abismo infernal. Puigdemont está purificando la tierra contaminada de la vieja Iberia esparciendo su ácido corrosivo sobre los iberos, que pronto estarán tan cerca del Infierno que reaccionarán y darán un viraje a sus vidas, emprendiendo la senda del amor y del bien. Puigdemont es el viento de la muerte que genera vida. Parece imposible, pero Yo sé que es cierto."
El viejo Enoc, el hombre más sabio de la existencia humana porque el Gran Hacedor le permitió conocer los cielos, los planetas, las razas y todos los rincones del saber, comprendió aquella terrible paradoja y agachó la cabeza con respeto, viendo la esperanza donde sólo se veía el vómito negro de uno de los peores demonios.
Al abandonar el salón del Cielo donde todo se decide, Enoc volvió a subir en su carro de fuego, acompañado de arcángeles, Tronos y Potestades, y reemprendió veloz su maravillosa inspección de todo lo creado.
Francisco Rubiales
(El Libro de Enoc es un texto enigmático y apócrifo del Antiguo Testamento, muy valorado por el viejo Judaísmo y por los primeros cristianos, pero que pronto la Iglesia consideró "maldito" y los eliminó del texto bíblico oficial. El libro describe el conflicto entre Dios y Satanás y cómo Satanás y sus demonios son derrotados por las legiones de ángeles fieles al Supremo.)
"El diablo Puigdemont cumple sin saberlo la misión que yo le he encomendado. Él hace el mal porque el mal es el aliento de su alma, pero es un mal que purifica y genera el bien. La Cataluña mártir es un territorio de la rica Iberia, que fue el rincón predilecto de los Vigilantes en el planeta Tierra, donde dejaron sembrada la semilla del mal, un mal que se manifiesta en la envidia, el rencor, el desprecio a los demás humanos y, sobre todo, una ralea de dirigentes con el alma negra, tan parecidos a los demonios que merecen vivir congelados en el Abismo infernal. Puigdemont está purificando la tierra contaminada de la vieja Iberia esparciendo su ácido corrosivo sobre los iberos, que pronto estarán tan cerca del Infierno que reaccionarán y darán un viraje a sus vidas, emprendiendo la senda del amor y del bien. Puigdemont es el viento de la muerte que genera vida. Parece imposible, pero Yo sé que es cierto."
El viejo Enoc, el hombre más sabio de la existencia humana porque el Gran Hacedor le permitió conocer los cielos, los planetas, las razas y todos los rincones del saber, comprendió aquella terrible paradoja y agachó la cabeza con respeto, viendo la esperanza donde sólo se veía el vómito negro de uno de los peores demonios.
Al abandonar el salón del Cielo donde todo se decide, Enoc volvió a subir en su carro de fuego, acompañado de arcángeles, Tronos y Potestades, y reemprendió veloz su maravillosa inspección de todo lo creado.
Francisco Rubiales
(El Libro de Enoc es un texto enigmático y apócrifo del Antiguo Testamento, muy valorado por el viejo Judaísmo y por los primeros cristianos, pero que pronto la Iglesia consideró "maldito" y los eliminó del texto bíblico oficial. El libro describe el conflicto entre Dios y Satanás y cómo Satanás y sus demonios son derrotados por las legiones de ángeles fieles al Supremo.)