Para mi, el 15 M fue el principio de esa sociedad organizada desde abajo que salió a la calle movida única y exclusivamente por el hartazgo social que padecía. El 15 M fue el germen de la sociedad civil articulada que tanto echamos de menos en éste país, sencillamente porque no existe. Y como era de esperar, no tardaron en hacer su aparición los grupos manipuladores e instrumentalizadores de semejante cuota de poder ciudadano, lo cual la llevó a su desaparición.
El 15 M fue un movimiento que mostró el camino a seguir por la sociedad. Solo le faltó liderazgo, jerarquía y organización para no dejar penetrar a las organizaciones del régimen. El problema es la manipulación que estas organizaciones hacen de cualquier movimiento surgido de la sociedad. Es ahí donde tenemos que atacar para tener nuestro propio espacio vital que ahora está invadido y usurpado por dichas organizaciones en forma de sindicatos, fundaciones, empresas públicas, asociaciones de tipo cultural, económico, político, vecinal, deportivo, religioso, cooperativo etc... cuyo núcleo son los partidos políticos. Estas organizaciones impiden que la sociedad se articule por si misma y que tenga voz propia, está secuestrada. Y eso es malo porque la hoja de ruta real no la elabora la sociedad, la construyen estas organizaciones conforme a los intereses de ese núcleo duro que son los partidos, lo cual nos lleva a deducir que la realidad está manipulada.
Y si la realidad está manipulada, los problemas reales también lo están porque los construyen los partidos, no la sociedad. Y eso hace que la sociedad quede reducida a hacerlos suyos en una escala donde lo único que les queda es el enfrentamiento de lo que desde los partidos nos vayan marcando. Hoy es el aborto mañana la independencia pasado ¿Quien sabe? Pero mientras tanto, la sociedad tiene otros y reales problemas pero mientras no sea ella quien tenga esa voz que los haga suyos seguiran sin ser atendidos porque no estarán en la agenda de los partidos, sencillamente porque no son sus problemas ni por tanto, sus prioridades. Sus únicas prioridades son mantenerse en el poder llegando incluso a producirse la paradoja de que políticos y ciudadanos tengan intereses contrapuestos. Eso es lo que está pasando porque no hay sociedad civil articulada. En España, la sociedad civil no existe, está suplantada por organizaciones satélites de los partidos que son fieles gracias a las millonarias subvenciones que compran esa fidelidad robótica de intereses mutuos.
Carlos RH
El 15 M fue un movimiento que mostró el camino a seguir por la sociedad. Solo le faltó liderazgo, jerarquía y organización para no dejar penetrar a las organizaciones del régimen. El problema es la manipulación que estas organizaciones hacen de cualquier movimiento surgido de la sociedad. Es ahí donde tenemos que atacar para tener nuestro propio espacio vital que ahora está invadido y usurpado por dichas organizaciones en forma de sindicatos, fundaciones, empresas públicas, asociaciones de tipo cultural, económico, político, vecinal, deportivo, religioso, cooperativo etc... cuyo núcleo son los partidos políticos. Estas organizaciones impiden que la sociedad se articule por si misma y que tenga voz propia, está secuestrada. Y eso es malo porque la hoja de ruta real no la elabora la sociedad, la construyen estas organizaciones conforme a los intereses de ese núcleo duro que son los partidos, lo cual nos lleva a deducir que la realidad está manipulada.
Y si la realidad está manipulada, los problemas reales también lo están porque los construyen los partidos, no la sociedad. Y eso hace que la sociedad quede reducida a hacerlos suyos en una escala donde lo único que les queda es el enfrentamiento de lo que desde los partidos nos vayan marcando. Hoy es el aborto mañana la independencia pasado ¿Quien sabe? Pero mientras tanto, la sociedad tiene otros y reales problemas pero mientras no sea ella quien tenga esa voz que los haga suyos seguiran sin ser atendidos porque no estarán en la agenda de los partidos, sencillamente porque no son sus problemas ni por tanto, sus prioridades. Sus únicas prioridades son mantenerse en el poder llegando incluso a producirse la paradoja de que políticos y ciudadanos tengan intereses contrapuestos. Eso es lo que está pasando porque no hay sociedad civil articulada. En España, la sociedad civil no existe, está suplantada por organizaciones satélites de los partidos que son fieles gracias a las millonarias subvenciones que compran esa fidelidad robótica de intereses mutuos.
Carlos RH