La primera lectura fue en dos etapas con un breve descanso para un almuerzo. No esperaba un libro así después de haber leído otros de don Francisco Rubiales.
Empiezas a leer y no encuentras la página adecuada para hacer un alto. Toda la trama es una tela de araña que te envuelve. Las ideas que describe el libro sobre la creación, Adán y Eva, los ángeles, el bien y el mal, la sabiduría, la inteligencia, el papel preponderante de la mujer con una inteligencia superior... sobrepasan los conceptos que tenemos, según la educación cristiana. Es una imaginaria creación del mundo, del ser inteligente, Noé, el Diluvio, el Averno. La mano del ser Supremo se siente por todas partes pero no en los mismos momentos. Ingenioso.
El final, con la aparición de un diablo que aterra al autor en una pequeña iglesia en una ciudad italiana, la muerte de dos personas relacionadas con los escritos de Onakra y las circunstancias te trasladan a un ambiente de película de exorcistas, muy cinematográfico.
Cuando terminé la lectura, tenía la cabeza llena de nombres exóticos, de tramas, de otras vidas, otros mundos, muy antiguos y muy actuales. Hechos en los que nunca había meditado aparecieron como nuevos y con una solución actual. Y concluí la lectura con una duda, que posiblemente me había empachado de historias de seres con nombres preciosos, sonoros, gráficos. Y esto lo he resuelto, he empezado a leerlo de nuevo, más despacio y marcándome un límite de páginas. Y sigo con la duda si lo del manuscrito de Onakra es o puede ser una realidad y la copia está en Sevilla. Un libro para pensar y leer de nuevo.
Ligur
Empiezas a leer y no encuentras la página adecuada para hacer un alto. Toda la trama es una tela de araña que te envuelve. Las ideas que describe el libro sobre la creación, Adán y Eva, los ángeles, el bien y el mal, la sabiduría, la inteligencia, el papel preponderante de la mujer con una inteligencia superior... sobrepasan los conceptos que tenemos, según la educación cristiana. Es una imaginaria creación del mundo, del ser inteligente, Noé, el Diluvio, el Averno. La mano del ser Supremo se siente por todas partes pero no en los mismos momentos. Ingenioso.
El final, con la aparición de un diablo que aterra al autor en una pequeña iglesia en una ciudad italiana, la muerte de dos personas relacionadas con los escritos de Onakra y las circunstancias te trasladan a un ambiente de película de exorcistas, muy cinematográfico.
Cuando terminé la lectura, tenía la cabeza llena de nombres exóticos, de tramas, de otras vidas, otros mundos, muy antiguos y muy actuales. Hechos en los que nunca había meditado aparecieron como nuevos y con una solución actual. Y concluí la lectura con una duda, que posiblemente me había empachado de historias de seres con nombres preciosos, sonoros, gráficos. Y esto lo he resuelto, he empezado a leerlo de nuevo, más despacio y marcándome un límite de páginas. Y sigo con la duda si lo del manuscrito de Onakra es o puede ser una realidad y la copia está en Sevilla. Un libro para pensar y leer de nuevo.
Ligur