imagen cedida por www.lakodorniz.com
Hoy voy a contarles un cuento inquietante sobre la derecha andaluza, un cuento que algunos juzgarán surrealista y otros alucinante, pero que podría ser verdad. Dejemosló, simplemente, en un "inexplicable" cuento del sur:
Dicen que existe un grupo de gente, preparada y consciente, cansada de que Andalucía viva la parálisis de un régimen agotado y convencida de que la alternancia en el poder es vital para esta tierra, que ha sabido crear durante años, jugándose su seguridad y sus puestos de trabajo, una valiosa y eficiente estructura informativa, una red creada con gente infiltrada en consejerías, instituciones y empresas de la Junta de Andalucía, que ha sido capaz de capturar durante años información documentada sobre irregularidades, escándalos, nóminas, chanchullos y todo tipo de movidas injustificables y sospechosas.
Ahora viene la parte espeluznante del cuento:
Esa gente ofreció un dia su "tesoro informativo" a los más altos jerifaltes del PP de Andalucía, pero los responsables de la derecha andaluza no reaccionaron y despreciaron el material.
Los tipos que habían montado la red y arriesgado su seguridad acumulando información documentada se quedaron perplejos y helados. Todavía siguen en estado semicatatónico, sin poder explicarse por qué extraña razón los responsables del PP de Andalucía no quieren saber nada de una información que, políticamente, vale su peso en oro y que desvela con el sustento necesario tramas, implicaciones, favores, concursos, subvenciones y mil historias capaces de acaparar las primeras páginas de la prensa en los próximes seis meses.
Carpetas y carpetas que recogen un capital informativo único, una especie de destilado de más de 25 años de poder socialista en Andalucía, se encuentran arrinconadas, sin que el PP andaluz se atreva a tocarlas.
No me negarán que es un cuento inexplicable, una incomprensible historia de miedo y cobardía que, de ser cierta, debería quitar el sueño y la esperanza a todos los demócratas y a los andaluces de bien.
Y colorín colorado...este cuento se ha acabado.
Dicen que existe un grupo de gente, preparada y consciente, cansada de que Andalucía viva la parálisis de un régimen agotado y convencida de que la alternancia en el poder es vital para esta tierra, que ha sabido crear durante años, jugándose su seguridad y sus puestos de trabajo, una valiosa y eficiente estructura informativa, una red creada con gente infiltrada en consejerías, instituciones y empresas de la Junta de Andalucía, que ha sido capaz de capturar durante años información documentada sobre irregularidades, escándalos, nóminas, chanchullos y todo tipo de movidas injustificables y sospechosas.
Ahora viene la parte espeluznante del cuento:
Esa gente ofreció un dia su "tesoro informativo" a los más altos jerifaltes del PP de Andalucía, pero los responsables de la derecha andaluza no reaccionaron y despreciaron el material.
Los tipos que habían montado la red y arriesgado su seguridad acumulando información documentada se quedaron perplejos y helados. Todavía siguen en estado semicatatónico, sin poder explicarse por qué extraña razón los responsables del PP de Andalucía no quieren saber nada de una información que, políticamente, vale su peso en oro y que desvela con el sustento necesario tramas, implicaciones, favores, concursos, subvenciones y mil historias capaces de acaparar las primeras páginas de la prensa en los próximes seis meses.
Carpetas y carpetas que recogen un capital informativo único, una especie de destilado de más de 25 años de poder socialista en Andalucía, se encuentran arrinconadas, sin que el PP andaluz se atreva a tocarlas.
No me negarán que es un cuento inexplicable, una incomprensible historia de miedo y cobardía que, de ser cierta, debería quitar el sueño y la esperanza a todos los demócratas y a los andaluces de bien.
Y colorín colorado...este cuento se ha acabado.