Información y Opinión

Comportamiento "ganster" de algunos gobiernos autonómicos españoles



Televisión Española, por la Primera cadena, emitió anoche, 16 de mayo, en Comando Actualidad, un escalofriante programa sobre el Impuesto de Sucesiones y Donaciones que se cobra en España, en el que quedaron claras algunas cosas terribles, entre ellas que algunos gobiernos autonómicos se comportan como gansters con sus ciudadanos, que ese impuesto es anticonstitucional y que los ciudadanos, ante tamaño abuso de poder y frente a tanta injusticia, tienen el deber democrático de luchar sin descanso para que ese impuesto sea retirado y para que los que lo cobran con brutalidad, como ocurre en Andalucía y Asturias, sean expulsados del poder.

El derecho ciudadano a rebelarse contra lo inicuo, reconocido en las grandes constituciones democráticas y por la mayoría de los juristas y autores clásicos, es perfectamente aplicable en el caso del Impuesto de Sucesiones, un auténtico saqueo inmoral, una burla a la Constitución Española y un intolerable abuso de poder perpetrado por políticos sin sensibilidad, conciencia ni ética, que deben ser erradicados.
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Manifestación contra el impuesto en Granada
En el programa se analizaron casos concretos que reflejan el abuso y la injusticia del impuesto español de Sucesiones y Donaciones, dominado por la desigualdad, hasta el punto de que heredar en Andalucía o Asturias, donde la codicia de los políticos y su voracidad fiscal es extrema y repugnante, significa pagar cien veces más impuestos que heredar en Madrid y mil veces más que heredar en Canarias. Esa desigualdad viola de manera obscena el principio constitucional de la "igualdad" de los españoles ante las leyes.

Pero el programa demostró que esos gobiernos abusivos, feroces y dominados por la codicia no sólo cobran el impuesto de manera abusiva, sino que es inmoral, inhumano y corrupto todo lo que lo rodea, sobre todo la valoración de los inmuebles, que se hace muy por encima de su valor de mercado, sin otra intención que expoliar a los herederos, cobrándoles tal cantidad de dinero que muchos de ellos tienen que renunciar a sus herencias o se arruinan para conservarlas.

Tambien quedó claro que la voracidad recaudatoria de los socialistas andaluces y asturianos, que gobiernan en esas dos autonomías, provocan la emigración de los que más tienen y de los que crean empleo y riqueza, la ruina de numerosos negocios, la destrucción de puestos de trabajo y la negativa a residir en esos territorios de saqueo de numerosos técnicos altamente cualificados, que prefieren vivir en otras regiones de España por miedo a morir en Andalucía o Asturias y dejar a sus familias en la ruina.

Uno no entiende como los jueces no intervienen, ni por qué los ciudadanos no se alzan, pacifica pero contundentemente, contra ese intolerable abuso, aunque ya hay un fuerte clamor en contra de ese impuesto en Andalucía, Asturias y Aragón, ni cómo un gobierno central, que es el máximo responsable de la existencia de ese impuesto demoníaco, no lo suprime de una vez.

Es urgente que políticos como Susana Díaz dejen de expoliar a los muertos y a los vivos. Da escalofríos pensar que una mujer como Susana, incapaz de sentir el dolor ajeno y que practica con tanta saña la injusticia y el abuso desde el poder, aspire a gobernar el PSOE, lo que significa que un día podría llegar a gobernar España.

El Impuesto de Sucesiones, contra el que ya existe una sentencia europea que lo condena porque se aplica de manera desigual y discriminatoria en las distintas regiones de España, es una de las inmoralidades políticas más vergonzosas existentes en España y el más brutal, injusto y anticonstitucional de los impuestos vigentes.

Una de las conclusiones que se extraen de la visión del programa de anoche es que la voracidad recaudatoria de algunos gobiernos está en proporción directa con la necesidad de dinero para pagar parásitos y lujos de la clase política. La España política se ha convertido en la mayor organización de latrocinio de Europa, lo que obliga a todos los ciudadanos demócratas y decentes a cerrar filas contra ese abuso que viola por igual la Constitución, la decencia y la justicia.

Francisco Rubiales


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Miércoles, 17 de Mayo 2017
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