Ya lo supimos, a su debido tiempo, que lo justo hubiera sido adelantar las elecciones para ganar cuatro meses de adelanto. Pero eso no se concedió, porque no había altura de miras. Y aún quedan políticos que lo único claro que tienen es que, si el gobierno actual no ha sido capaz de dar respuesta a los problemas, nadie podrá hacerlo en su lugar; la monda. Incluso ya se atisban en el horizonte manifestaciones y algaradas para estorbar todo lo que se ponga en marcha. Y eso es bajura de miras, porque no es hora de huelgas vacías, ni de empresarios listillos, ni de orgullos nacionalistas, ni de indignados sagaces.
Con altura de miras, se podría reconocer que los dos grandes partidos, con acuerdos de Estado, podrían frenar los dos grandes males que tenemos los españoles: el paro y los ataques de los nacionalistas. Basta con sumar los votos de ambos partidos y utilizar la democracia.. Pero, para aquellos, lo de menos es España y temen que los dos grandes puedan hacer una gestión distinta y cambiar algunas cosas con altura de miras.
PP y PSOE han comenzado sus campañas electorales bajo el lema de “Empieza el cambio”; el comienzo que todos esperamos. Necesitamos que cambie el modelo de los sindicatos que se miran el ombligo como los hesicastas; el modelo de los empresarios del pelotazo y del dinero fácil, el modelo de las autonomías del dispendio y de los lujos de los reinos de Taifa.y, sobre todo, el modelo de los partidos que hacen demagogia para continuar aferrados al poder cueste lo que cueste.
Necesitamos a los dos grandes partidos con altura de miras y, si esto es imposible, tendríamos que concluir que la democracia es una utopía, un mito. La única inversión legítima que se puede hacer en estos momentos es la de la Educación, que es la principal fuente de riqueza, de trabajo y de salud de las personas. Pero también a esto se le está poniendo coto, para oscurecer lo que es español, como la lengua. Por eso, tendríamos que clamar a nuestros políticos que es, precisamente en la Educación y en el Trabajo, donde no se pueden hacer recortes ni huelgas ni ofertas.
Si los dos partidos son capaces de contactar en unos momentos como éstos, estamos seguros que España puede tirar hacia adelante sin caer en el vacío. Los dos unidos constituyen la única fuerza capaz de sacar del bache a este vehículo que se llama España. Lo único que hace falta es altura de miras. Lo malo es que todavía hay políticos que parecen ajenos al cambio y han dejado en solitario a los dos partidos con una bajura de miras incomprensible.
Europa se está jugando mucho en una crisis que sólo entienden ellos y ellos. Afortunadamente, hay algún líder que siente a Europa. Pero España se está jugando más, porque algunos nacionalistas están dispuestos a desafiar a los tribunales superiores de Justicia de las autonomías, que es tanto como acabar con el “Estado de Derecho”.
JUAN LEIVA
Con altura de miras, se podría reconocer que los dos grandes partidos, con acuerdos de Estado, podrían frenar los dos grandes males que tenemos los españoles: el paro y los ataques de los nacionalistas. Basta con sumar los votos de ambos partidos y utilizar la democracia.. Pero, para aquellos, lo de menos es España y temen que los dos grandes puedan hacer una gestión distinta y cambiar algunas cosas con altura de miras.
PP y PSOE han comenzado sus campañas electorales bajo el lema de “Empieza el cambio”; el comienzo que todos esperamos. Necesitamos que cambie el modelo de los sindicatos que se miran el ombligo como los hesicastas; el modelo de los empresarios del pelotazo y del dinero fácil, el modelo de las autonomías del dispendio y de los lujos de los reinos de Taifa.y, sobre todo, el modelo de los partidos que hacen demagogia para continuar aferrados al poder cueste lo que cueste.
Necesitamos a los dos grandes partidos con altura de miras y, si esto es imposible, tendríamos que concluir que la democracia es una utopía, un mito. La única inversión legítima que se puede hacer en estos momentos es la de la Educación, que es la principal fuente de riqueza, de trabajo y de salud de las personas. Pero también a esto se le está poniendo coto, para oscurecer lo que es español, como la lengua. Por eso, tendríamos que clamar a nuestros políticos que es, precisamente en la Educación y en el Trabajo, donde no se pueden hacer recortes ni huelgas ni ofertas.
Si los dos partidos son capaces de contactar en unos momentos como éstos, estamos seguros que España puede tirar hacia adelante sin caer en el vacío. Los dos unidos constituyen la única fuerza capaz de sacar del bache a este vehículo que se llama España. Lo único que hace falta es altura de miras. Lo malo es que todavía hay políticos que parecen ajenos al cambio y han dejado en solitario a los dos partidos con una bajura de miras incomprensible.
Europa se está jugando mucho en una crisis que sólo entienden ellos y ellos. Afortunadamente, hay algún líder que siente a Europa. Pero España se está jugando más, porque algunos nacionalistas están dispuestos a desafiar a los tribunales superiores de Justicia de las autonomías, que es tanto como acabar con el “Estado de Derecho”.
JUAN LEIVA