Rivera está cabreado con Rajoy y juega fuerte
Millones de españoles se indignan cuando comprueban que el separatismo sigue actuando libremente por Cataluña, donde, ante la debilidad manifiesta del gobierno, los grupos radicales como ARRAN y los CDR se asoman a la violencia y los que se sienten españoles sufren un acoso insoportable. El escándalo ha sido muy sonado cuando los españoles han sabido por la Fiscalía que los separatistas llevan pagando su golpe con dinero del Estado desde 2014, ante las mentiras del ministro Montoro y la inacción de Rajoy, que ni siquiera recurre al Tribunal Constitucional el voto delegado de los prófugos Puigdemont y Comín, permitiendo a esos golpistas privilegios que no tienen los demás diputados y senadores de España. Ciudadanos, asumiendo una postura indignada, dice que no legitimará esta dejación de funciones en Cataluña.
Albert Rivera, ejerciendo cada día más como líder de la oposición, afirma que "Es una tomadura de pelo que se haya dedicado dinero del FLA para el 9-N" y ha llegado a amenazar al presidente del Gobierno con retirarle el apoyo si no aplica estrictamente la Constitución en Cataluña recurriendo el voto delegado de Toni Comín y Carles Puigdemont y controlando el dinero público para evitar que financie el secesionismo. El líder de Ciudadanos presiona al pasivo gobierno para que impida que el golpe de Estado siga avanzando en Cataluña, donde el rigor y la fuerza del 155 apenas se nota.
Para Rivera se trata de un asunto de suma gravedad y ha recordado al presidente Rajoy, con gran enfado, que su partido otorga un apoyo vital defendiendo la democracia, apoyando el artículo 155, su investidura y los presupuestos.
Rivera conecta con la indignación y la angustia de muchos millones de españoles, hastiados de lo que no sabemos si es prudencia o cobardía de Mariano Rajoy en Cataluña, al sostener sin disimulo ni palabras suaves que el golpe de Estado catalán se ha financiado con dinero público y ha remarcado que el Ejecutivo "no puede mirar para otro lado" sólo para conseguir que haya un Gobierno "de cualquier manera".
El rigor de Ciudadanos será bienvenido en una sociedad española cansada de que el Estado se muestre indeciso, débil y torpe en la gestión del golpismo catalán, un atentado brutal a la Constitución y a la paz que, por culpa de la blandura gubernamental se ha internacionalizado y adquirido proporciones desmesuradas y apoyos inesperados en el extranjero.
"Hasta aquí hemos llegado", ha dicho Rivera en conversación con los periodistas en los pasillos del Congreso. Ahora sólo queda esperar la reacción del gobierno y si el órdago de Ciudadanos es un desafío solvente o sólo una bravuconada.
Francisco Rubiales
Albert Rivera, ejerciendo cada día más como líder de la oposición, afirma que "Es una tomadura de pelo que se haya dedicado dinero del FLA para el 9-N" y ha llegado a amenazar al presidente del Gobierno con retirarle el apoyo si no aplica estrictamente la Constitución en Cataluña recurriendo el voto delegado de Toni Comín y Carles Puigdemont y controlando el dinero público para evitar que financie el secesionismo. El líder de Ciudadanos presiona al pasivo gobierno para que impida que el golpe de Estado siga avanzando en Cataluña, donde el rigor y la fuerza del 155 apenas se nota.
Para Rivera se trata de un asunto de suma gravedad y ha recordado al presidente Rajoy, con gran enfado, que su partido otorga un apoyo vital defendiendo la democracia, apoyando el artículo 155, su investidura y los presupuestos.
Rivera conecta con la indignación y la angustia de muchos millones de españoles, hastiados de lo que no sabemos si es prudencia o cobardía de Mariano Rajoy en Cataluña, al sostener sin disimulo ni palabras suaves que el golpe de Estado catalán se ha financiado con dinero público y ha remarcado que el Ejecutivo "no puede mirar para otro lado" sólo para conseguir que haya un Gobierno "de cualquier manera".
El rigor de Ciudadanos será bienvenido en una sociedad española cansada de que el Estado se muestre indeciso, débil y torpe en la gestión del golpismo catalán, un atentado brutal a la Constitución y a la paz que, por culpa de la blandura gubernamental se ha internacionalizado y adquirido proporciones desmesuradas y apoyos inesperados en el extranjero.
"Hasta aquí hemos llegado", ha dicho Rivera en conversación con los periodistas en los pasillos del Congreso. Ahora sólo queda esperar la reacción del gobierno y si el órdago de Ciudadanos es un desafío solvente o sólo una bravuconada.
Francisco Rubiales