Información y Opinión

18 de Julio, Alzamiento Nacional. Pedro Sánchez resucita a Franco



Son tan imbéciles e insensatos los rojos, los progres y los separatismos que odian a España que han resucitado al general Franco y lo han convertido en un nuevo héroe para millones de españoles que ya lo tenían olvidado y que repudiaban su dictadura.

Lo han desenterrado, condenado y vilipendiado, pero también lo han convertido en un valorado modelo político, opuesto al socialismo de Pedro Sánchez. Han querido utilizar el Franquismo para ganar votos y les está saliendo mal la operación porque millones de españoles han recordado los éxitos del régimen franquista, que hizo de España la octava potencia industrial del mundo, que protagonizó el "milagro económico español" y que construyo, sin apenas cobrar impuestos, con austeridad y con muy pocos funcionarios, millones de viviendas sociales, cientos de pantanos, regadíos y nuevos pueblos, además de crear una industria envidiable que fabricaba barcos, coches, camiones, electrodomésticos y un acero de alta calidad.

Los españoles habíamos enterrado los odios, rencores y la violencia de la Guerra Civil, pero gobernantes ineptos, irresponsables y miserables, como Zapatero y Pedro Sánchez, han resucitado aquella tragedia, han recreado el fantasma de las dos Españas enfrentadas y restablecido los odios y rencores previos a la Guerra entre hermanos de 1936.



Un día como hoy, hace 88 años, en 1936, militares comandados por el general Franco, hartos de ver sufrir a España, cumplieron con su deber de defender la patria, se alzaron contra el marxismo que malgobernaba el país, como lo hacen hoy los marxistas Pedro Sánchez y Yolanda Díaz. Tres años después ganaron la guerra, liquidaron la República e inauguraron un régimen que duró casi cuatro décadas.

Ha sido Pedro Sánchez quien más ha hecho por restablecer el rencor y el odio de 1936. Sánchez parece que ha calcado en buena parte el ambiente crispado de los años previos a la guerra: izquierdas y derechas enfrentadas, censura contra la crítica, compra de periodistas y medios por el gobierno, alianza del gobierno socialista con comunistas y nacionalistas, ventajas y dinero abundante para los desleales independentistas vascos y catalanes, mentiras, recelos, corrupción, politización, acoso a la Justicia, crispación, acusaciones y discursos de odio en las tribunas del Congreso y el Senado.

Los socialistas y comunistas revanchistas han logrado que millones de españoles valoren hoy la etapa franquista, que habían decidido olvidar, y la comparen con el régimen sanchista del presente, al que acusan de ser más corrupto, injusto, inseguro, menos próspero, decadente, sin prestigio internacional y con sus libertades y derechos en retroceso.

Si no fuera por Sánchez y sus secuaces socialistas, comunistas y separatistas, Franco continuaría en el olvido, bien enterrado, pero los fallos, abusos y corrupciones de Sánchez, su codicia, su ansia de poder y sus tendencias a la tiranía han convertido al viejo general en un modelo que cada día gana adeptos, valor y atractivo.

Han querido denigrar a un muerto y le han inyectado vida y prestigio. Han querido estigmatizar el franquismo y los han convertido en estrella rutilante. Verdaderamente, los socialistas son patéticos por haber destruido lo mejor que España hizo en todo el siglo XX, tras la muerte del general Franco, que fue perdonar el pasado de Guerra Civil y decidir caminar juntos, en libertad, hacia un futuro próspero y en paz.

Por culpa del sanchismo rastrero, hoy, 18 de julio, es un día conflictivo, de recuerdos insanos, de polémica y rechazo, pero también de admiración y nostalgia para muchos españoles.

Francisco Rubiales


- -
Jueves, 18 de Julio 2024
Artículo leído 1166 veces

También en esta sección: