"Podemos" y "Ciudadanos" hacen posible el cambio en España. Ninguno de los dos partidos podría derrotar por si solo al poderoso dúo PP-PSOE, pero juntos si pueden. Podemos representa el catalizador del rechazo y el reto masivo de millones de españoles que quieren terminar con la vieja política, mientras que Ciudadanos es el partido moderado y limpio que recojerá muchos votos del desencanto y la rabia que no se atreven a dar su apoyo al radicalismo de Podemos. Juntos representan la esperanza para España.
"Podemos" ha tenido el mérito indiscutible de encarnar el desencanto de los españoles con los viejos partidos fracasados (PP, PSOE, IU y cómplices nacionalistas) y de deslumbrar a la sociedad entera al crecer con fuerza y demostrar que otra forma de política y liderazgo es posible, mientras que Ciudadanos, por su fidelidad a la democracia, limpieza y honestidad en sus planteamientos y trayectorias, está llamado a recoger una inmensa cosecha de votos, en especial de los cientos de miles de españoles que quieren una sociedad mejor y mas justa y romper con los viejos partidos podridos, pero que sienten miedo a las raíces marxistas y radicales de Pablo Iglesias y los suyos, a los que son incapaces de entregar el voto.
Juntos, los dos partidos son capaces de dinamitar el carcomido y fracasado edificio de la vieja política española, culpable de muchas suciedades e injusticias que han creado una sociedad desequilibrada, plagada de pobres y desempleados, sometida a impuestos injustos, despilfarradora, endeudada hasta la locura, arrogante y cada día mas alejada de los ciudadanos, a los que ha despreciado y expulsado de la política y de los procesos de toma de decisiones.
El binomio "Podemos-Ciudadanos", junto con otras pequeñas formaciones que también acapararán votos deseosos de justicia, verdadera democracia y cambio, aunque en menor cuantía, permite soñar con un relevo pacífico y ejemplar en la política española, que sustituya a partidos quemados, deteriorados y sin regeneración posible, por nuevas formaciones capaces de ilusionar a una sociedad que lleva décadas votando sin ilusión, confianza ni fe en el sistema, mas para castigar al mal gobernante que con esperanza en un nuevo gobierno.
Los ciudadanos se están decantando por apoyar a Podemos y a Ciudadanos por varias razones de peso, la principal de las cuales es el rechazo y odio a los viejos partidos, a los que culpa con razón del profundo deterioro moral, político y económico de España, de la corrupción y del abuso de poder. Pero hay otras razones: la gente quiere gente mas nueva y decente, que sea ajena a la vieja "casta" y que no esté implicada en la indecencia política de las últimas décadas, donde la corrupción y la antidemocracia de los grandes partidos ha permitido estafas, abusos, desmanes y saqueos, dentro de un ambiente de corrupción e impunidad que ha provocado asco y rabia en millones de ciudadanos.
Cuando las aguas se calmen y la sociedad española ordene y decante sus ideas, "Podemos" será el receptor de los millones de votos radicalizados que quieren cambiar el sistema como un calcetín, lo que implica el apoyo concreto de toda la vieja izquierda que no se ha corrompido, de los activistas que han estado llenando las calles de protesta en los últimos años, de los que se movilizaron ilusionados con el 11 M y de muchos españoles que desean una sociedad igualitaria y parecida a la que quisieron construir, sin éxito, los viejos comunistas a las órdenes de Lenin, Stalin y otros profesionales de la revolución.
Por su parte, Ciudadanos recibirá el voto masivo de las clases medias indignadas, de los que creen en el esfuerzo y la competitividad para salir del foso, de los profesionales, empresarios y trabajadores que, aunque están furiosos e indignados ante el fracaso y el abuso de la vieja derecha e izquierda, se sienten inquietos ante el radicalismo de Podemos y rechazan la estética de las coletas, y, finalmente, de los muchos españoles que desean una democracia auténtica y decente, que se oponen a los viejos partidos y a la vieja política corrupta con idéntica fuerza, pero quieren mantener vigente un sistema democrático que, a pesar de sus muchos defectos, sigue siendo, como dijo Winston Churchill, el menos malo de todos.
"Podemos" ha tenido el mérito indiscutible de encarnar el desencanto de los españoles con los viejos partidos fracasados (PP, PSOE, IU y cómplices nacionalistas) y de deslumbrar a la sociedad entera al crecer con fuerza y demostrar que otra forma de política y liderazgo es posible, mientras que Ciudadanos, por su fidelidad a la democracia, limpieza y honestidad en sus planteamientos y trayectorias, está llamado a recoger una inmensa cosecha de votos, en especial de los cientos de miles de españoles que quieren una sociedad mejor y mas justa y romper con los viejos partidos podridos, pero que sienten miedo a las raíces marxistas y radicales de Pablo Iglesias y los suyos, a los que son incapaces de entregar el voto.
Juntos, los dos partidos son capaces de dinamitar el carcomido y fracasado edificio de la vieja política española, culpable de muchas suciedades e injusticias que han creado una sociedad desequilibrada, plagada de pobres y desempleados, sometida a impuestos injustos, despilfarradora, endeudada hasta la locura, arrogante y cada día mas alejada de los ciudadanos, a los que ha despreciado y expulsado de la política y de los procesos de toma de decisiones.
El binomio "Podemos-Ciudadanos", junto con otras pequeñas formaciones que también acapararán votos deseosos de justicia, verdadera democracia y cambio, aunque en menor cuantía, permite soñar con un relevo pacífico y ejemplar en la política española, que sustituya a partidos quemados, deteriorados y sin regeneración posible, por nuevas formaciones capaces de ilusionar a una sociedad que lleva décadas votando sin ilusión, confianza ni fe en el sistema, mas para castigar al mal gobernante que con esperanza en un nuevo gobierno.
Los ciudadanos se están decantando por apoyar a Podemos y a Ciudadanos por varias razones de peso, la principal de las cuales es el rechazo y odio a los viejos partidos, a los que culpa con razón del profundo deterioro moral, político y económico de España, de la corrupción y del abuso de poder. Pero hay otras razones: la gente quiere gente mas nueva y decente, que sea ajena a la vieja "casta" y que no esté implicada en la indecencia política de las últimas décadas, donde la corrupción y la antidemocracia de los grandes partidos ha permitido estafas, abusos, desmanes y saqueos, dentro de un ambiente de corrupción e impunidad que ha provocado asco y rabia en millones de ciudadanos.
Cuando las aguas se calmen y la sociedad española ordene y decante sus ideas, "Podemos" será el receptor de los millones de votos radicalizados que quieren cambiar el sistema como un calcetín, lo que implica el apoyo concreto de toda la vieja izquierda que no se ha corrompido, de los activistas que han estado llenando las calles de protesta en los últimos años, de los que se movilizaron ilusionados con el 11 M y de muchos españoles que desean una sociedad igualitaria y parecida a la que quisieron construir, sin éxito, los viejos comunistas a las órdenes de Lenin, Stalin y otros profesionales de la revolución.
Por su parte, Ciudadanos recibirá el voto masivo de las clases medias indignadas, de los que creen en el esfuerzo y la competitividad para salir del foso, de los profesionales, empresarios y trabajadores que, aunque están furiosos e indignados ante el fracaso y el abuso de la vieja derecha e izquierda, se sienten inquietos ante el radicalismo de Podemos y rechazan la estética de las coletas, y, finalmente, de los muchos españoles que desean una democracia auténtica y decente, que se oponen a los viejos partidos y a la vieja política corrupta con idéntica fuerza, pero quieren mantener vigente un sistema democrático que, a pesar de sus muchos defectos, sigue siendo, como dijo Winston Churchill, el menos malo de todos.
Comentarios: