Maduro es un gran riesgo para Venezuela

Sin duda estamos ante la era de la mediocridad, la era que ha dado los peores dirigentes políticos de la historia. Y todo porque la accesibilidad al cargo no requiere de una formación previa ni de meritocracia alguna, al contrario, ahora se accede desde los aparatos de partidos donde la mayor virtud es ser el más servil y rastrero de los pelotas que rodean al cacique.

Si en Venezuela se puede llegar a ser Presidente con el bagaje profesional de conductor de autobuses es que además se debe ser muy servil con el anterior Presidente, lo cual encierra un peligro pues no es lo mismo un Presidente con un nivel intelectual que sepa tomar las decisiones correctas en base a la razón y al bienestar de sus ciudadanos que un autentico zote que tiene un culo por cabeza y que desde la muerte de Chaves no lo hemos visto más que llorar, gritar, buscar enemigos imaginarios y desplegar toda clase de slogans pasados de moda pero que a la izquierda le siguen gustando cuando no hay otra cosa con la que contentar al pueblo.

Este tipo de dirigentes son un peligro por la inconsistencia de su discurso y por la imprebisibilidad de sus decisiones pues éstas no se suelen tomar desde la razón sino en base a lo que el populismo les reclame en cada momento, lo mismo pueden nacionalizar un banco, una petrolera o cualquier empresa extranjera con la que acaban de firmar un acuerdo que expulsan a un embajador si eso les ayuda a tener a las masas de su parte, masas por otra parte que en nada les va a afectar ninguna de estas decisiones.

Algo parecido tenemos por estos lares, donde las grandes mentes pensantes del Estado corrupto van desde un butanero como Presidente de alguna institución autonómica a un conserje de Alcalde, a un jardinero recien jubilado vitaliciamente con el dinero de todos como Presidente de otra cámara autonómica, una telefonista de partido al frente de un partido o un encargado de la fotocopiadora como Ministro del ministerio con más presupuesto. Lo normal es que un país en esas manos se hunda por completo y ellos salgan forrados hasta la médula, no se le puede pedir más a ese tipo de cerebros, de ahí que ésta era de la mediocridad esté acabando, fragmentando y arruinando a países como España, no se puede esperar otra cosa.

Hace unos días alguien hablaba de la incultura de Chavez a cuento de no sé que comparación. Yo contesté que no sería demasiado inculto cuando se ha muerto en la cama y por supuesto mucho más culto que muchos presuntos líderes europeos.

Sin duda que Chavez debió tener algo que hizo que los venezolanos le votaran repetidas veces. Cierto que con votos comprados, pero por aquí también se hace y no chillamos (me refiero a los medios, que en este blog si se chilla). Eso de la compra de votos es uno de los grandes males que pueden acabar con la democracia, como vemos aquí.

El problema de los gobiernos personalistas es que normalmente la salida siempre es poniendo al más tonto y entonces el negocio se hunde. Nos pasó a nosotros y les pasará a ellos. Y al igual que nosotros si el candidato oficial es un mediocre adulador, el candidato de la oposición no es mucho mejor.

Puede que Maduro pueda comprar el suficiente número de votos y entonces la caida del país se acentuará y si ahora están mal dentro de cuatro años (o los que sean) van a estar mucho peor. La alternativa ahora o entonces es peor. Esto me recuerda al gobierno del contador de nubes y lo que vino después.

Yo desearía equivocarme pero me temo que no va a suceder. El candidato Maduro, ya sabemos lo que es y de lo que es capaz. Del candidato Capriles no me fío. Lo veo con doblez.

Lo único que podemos hacer es desear lo mejor para los venezolanos.

En la empresa y la politica, "Todos pueden ascender en la jerarquia hasta llegar a su nivel de ineptitud. Chavez llego en su momento, y Maduro lo acaba de hacer. Venezuela debe volver a la democracia natural y a la alternancia de sus dirigentes. Chavez fue el impasse ante una democracia corrupta. Democracia que renacera sin influencias extranjeras.
Animo a Venezuela entera para que reflexione sobre su futuro.