La zapatiesta que tienen nuestros competidores en la industria base de España, el turismo, es agua de mayo. El turismo extranjero sube, gasta más dinero y esto representa trabajo y más ingresos. No seré cruel y no digo ¡Que Dios mantenga la guerra en casa de los competidores! Sin las revueltas y levantamientos en el norte de África y Oriente Medio el sector turismo y todo lo que depende de este lo estaría pasando crudo.
Por otro lado ha sido publicado que 128.655 españoles han elegido tomar las maletas y emigraron en 2010. Muchos de ellos serían asiduos al INEM. Ya en otra época, la franquista, la emigración fue decisiva para bajar la presión en España y convertirse en una fuente de ingresos de divisas del tamaño de las exportaciones de cítricos (años 1965-69). Las remesas de emigrantes fueron un salvavidas para la economía de Franco. Curioso que la miseria y la necesidad ayudasen a quien era incapaz de solucionarla.
¿Estamos hoy en la misma situación? En la época franquista un emigrante era barato desde el punto de vista económico. Emigraron peones, braceros y no tantos con estudios medios o superiores. España no había invertido mucho en ellos. En el emigrante de hoy la sociedad ha invertido grandes sumas que tiramos por la borda.
El valor de aquellos emigrantes como los de ahora en cuanto a seres humanos son exactamente iguales, los mismos familiares, los mismos dramas de separación impacto social.
Pero curioso, la emigración vuelve a ayudar a quienes son culpables de su precariedad y les obliga a emigrar.
¿El final del túnel?
Ligur
Por otro lado ha sido publicado que 128.655 españoles han elegido tomar las maletas y emigraron en 2010. Muchos de ellos serían asiduos al INEM. Ya en otra época, la franquista, la emigración fue decisiva para bajar la presión en España y convertirse en una fuente de ingresos de divisas del tamaño de las exportaciones de cítricos (años 1965-69). Las remesas de emigrantes fueron un salvavidas para la economía de Franco. Curioso que la miseria y la necesidad ayudasen a quien era incapaz de solucionarla.
¿Estamos hoy en la misma situación? En la época franquista un emigrante era barato desde el punto de vista económico. Emigraron peones, braceros y no tantos con estudios medios o superiores. España no había invertido mucho en ellos. En el emigrante de hoy la sociedad ha invertido grandes sumas que tiramos por la borda.
El valor de aquellos emigrantes como los de ahora en cuanto a seres humanos son exactamente iguales, los mismos familiares, los mismos dramas de separación impacto social.
Pero curioso, la emigración vuelve a ayudar a quienes son culpables de su precariedad y les obliga a emigrar.
¿El final del túnel?
Ligur
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