La casta política española está muy preocupada por el rechazo y la rebeldía que crecen como la espuma en la sociedad española. Los resultados de las elecciones europeas del 25 de mayo, las reacciones ante la abdicación del rey, el frio recibimiento al príncipe y el creciente, casi imparable, desprecio de los ciudadanos a la clase política han provocado que la casta haya decidido contraatacar y aprovechar las favorables circunstancias del verano y la sobredosis de fútbol para intentar reconstruir su pésima imagen con una receta que nunca falla: una mezcla intensa de narcóticos, mentiras y miedo.
El opio lo pone el fútbol, que acaparará la atención de millones de españoles durante todo un mes con los mundiales de Brasil, en los que si España lograse ganar su segunda copa del mundo Rajoy y el bipartidismo tal vez puedan aguantar un par de años mas, a pesar de que están heridos de muerte.
Las mentiras llegan en forma de datos económicos trucados y falseados, acompañados de promesas de bajadas de impuestos y de pronta recuperación de la economía, cuando la verdad es que el país sigue muy dañado, el desempleo sigue siendo masivo, la protección social desciende cada día mas, la pobreza avanza, los negocios siguen cerrando y la recuperación es un fenómeno limitado al turismo, que está fuerte porque el resto del mundo ha salido de la crisis, mientras España sigue instalada en la tristeza económica.
El miedo llega siempre bajo la sombra de la amenaza: amenaza de ruptura de la unidad, amenaza de colapso económico y amenaza terrorista. "Alerta!!!! El terrorismo anarquista amenaza a España", gritan desde el Ministerio del Interior y vaticinan atentados que, si Dios no lo remedia, pronto ocuparán las portadas mediáticas. No hay nada tan eficaz como la inseguridad y el miedo para que el rebaño se vuelva obediente y tonto. El gobierno lo sabe y va a administrar con eficacia ese viejo recurso, el mejor aliado de los poderosos y los explotadores desde el principio de los tiempos.
Sandro Pertini, el sabio presidente de la República Italiana, decía que el terrorismo era el mejor aliado de los políticos italianos, refiriéndose a aquellos partidos italianos miserables y corruptos, como la Democracia Cristiana, el Partido Comunista y el Socialista, que después desaparecerían hundidos por los escándalos y las investigaciones judiciales.
La maltratada sociedad española parecía que despertaba en los últimos meses y hasta parecía posible que presionara para conseguir un sistema político mas decente y justo que el actual, minado por la corrupción y el abuso de poder, pero llega el verano y con él las mentiras, los narcóticos y los miedos.
La misma abdicación del rey Juan Carlos, provocada por el miedo a quedar sin protección ante la debilidad del PP y del PSOE, los dos partidos que protegen a la Corona, ha sido presentada con falsedad y mentira al pueblo como un acto de regeneración, cuando la llegada de Felipe VI no es sino la pura continuidad estéril de un sistema agotado y podrido.
Si la rebeldía y la indignación son capaces de soportar el contraataque de los políticos y mantener la cabeza alta exigiendo el cambio hacia una democracia verdadera que España necesita como el oxígeno, entonces la casta difícilmente podrá mantener un año mas sus suciedades y abusos. Pero si el fútbol, las mentiras y el miedo ganan la partida, el reino de la miseria y la indecencia, creado y protegido por la clase política y sus aliados, se mantendrá vivo y producirá todavía muchos estragos a España y dolores, tristezas e injusticias lacerantes a su pobre pueblo.
El opio lo pone el fútbol, que acaparará la atención de millones de españoles durante todo un mes con los mundiales de Brasil, en los que si España lograse ganar su segunda copa del mundo Rajoy y el bipartidismo tal vez puedan aguantar un par de años mas, a pesar de que están heridos de muerte.
Las mentiras llegan en forma de datos económicos trucados y falseados, acompañados de promesas de bajadas de impuestos y de pronta recuperación de la economía, cuando la verdad es que el país sigue muy dañado, el desempleo sigue siendo masivo, la protección social desciende cada día mas, la pobreza avanza, los negocios siguen cerrando y la recuperación es un fenómeno limitado al turismo, que está fuerte porque el resto del mundo ha salido de la crisis, mientras España sigue instalada en la tristeza económica.
El miedo llega siempre bajo la sombra de la amenaza: amenaza de ruptura de la unidad, amenaza de colapso económico y amenaza terrorista. "Alerta!!!! El terrorismo anarquista amenaza a España", gritan desde el Ministerio del Interior y vaticinan atentados que, si Dios no lo remedia, pronto ocuparán las portadas mediáticas. No hay nada tan eficaz como la inseguridad y el miedo para que el rebaño se vuelva obediente y tonto. El gobierno lo sabe y va a administrar con eficacia ese viejo recurso, el mejor aliado de los poderosos y los explotadores desde el principio de los tiempos.
Sandro Pertini, el sabio presidente de la República Italiana, decía que el terrorismo era el mejor aliado de los políticos italianos, refiriéndose a aquellos partidos italianos miserables y corruptos, como la Democracia Cristiana, el Partido Comunista y el Socialista, que después desaparecerían hundidos por los escándalos y las investigaciones judiciales.
La maltratada sociedad española parecía que despertaba en los últimos meses y hasta parecía posible que presionara para conseguir un sistema político mas decente y justo que el actual, minado por la corrupción y el abuso de poder, pero llega el verano y con él las mentiras, los narcóticos y los miedos.
La misma abdicación del rey Juan Carlos, provocada por el miedo a quedar sin protección ante la debilidad del PP y del PSOE, los dos partidos que protegen a la Corona, ha sido presentada con falsedad y mentira al pueblo como un acto de regeneración, cuando la llegada de Felipe VI no es sino la pura continuidad estéril de un sistema agotado y podrido.
Si la rebeldía y la indignación son capaces de soportar el contraataque de los políticos y mantener la cabeza alta exigiendo el cambio hacia una democracia verdadera que España necesita como el oxígeno, entonces la casta difícilmente podrá mantener un año mas sus suciedades y abusos. Pero si el fútbol, las mentiras y el miedo ganan la partida, el reino de la miseria y la indecencia, creado y protegido por la clase política y sus aliados, se mantendrá vivo y producirá todavía muchos estragos a España y dolores, tristezas e injusticias lacerantes a su pobre pueblo.
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